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Lista Ecologia y Ambiente - VZLA |
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Asunto: | EL PROTOCOLO DE KIOTO | Fecha: | Viernes, 8 de Septiembre, 2000 21:16:45 (-0500) | Autor: | Julio Cesar Centeno <jcenteno @..........ve>
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El Protocolo de
Kioto
Los bosques se han convertido en un
importante componente
de las negociaciones
internacionales sobre cambios climáticos
por contener mas de 600.000 millones
de toneladas de carbono
y por su habilidad para
absorber dióxido carbono de la atmósfera
Julio César Centeno,
PhD
Septiembre 7, 2000
El Protocolo de Kioto de 1997 formalizó un acuerdo
internacional fundamentalmente destinado a reducir la dependencia de la economía
mundial del consumo de combustibles fósiles: petróleo, gas y carbón. A través
del Protocolo de Kioto, 36 países industrializado se comprometen a reducir sus
emisiones efectivas de gas carbónico (CO2) y otros gases del efecto invernadero,
en 5.2% por debajo de los niveles registrados en 1990. Esta reducción debe
hacerse efectiva, como promedio, para el quinquenio 2008 al 2012.
El compromiso varía por país o región: La Unión Europea se compromete a que
sus emisiones serán reducidas en al menos 8% como promedio para el
quinquenio 2008, Estados Unidos en un 7%. Canadá 6%. Mientras que Japón,
Rusia, Polonia, Hungría, Nueva Zelandia y Ucrania sólo deben estabilizar sus
emisiones con relación a las de 1990. Algunos países pueden aumentarlas: Noruega
hasta 1%, Australia hasta 8%, e Islandia hasta 10%. En estos casos se reconoce
que su desarrollo depende de un mayor consumo de energía.
Una de las consecuencias de las emisiones de gás carbónico, metano, óxidos
nitrosos y otros gases, es el calentamiento global. Sus evidencias son cada vez
más contundentes, incrementando la alarma por sus potenciales consecuencias.
Otros afirman que las consecuencias no son potenciales, sino que ya se
encuentran entre nosotros. Se reflejan en la creciente intensidad y frecuencia
de inundaciones, sequías, huracanes y otros desastres naturales que se han
venido registrando últimamente, tanto en el trópico como en países de clima
templado.
En los últimos 20 años se registraron los 15 años más calurosos desde el año
1900. La capa de hielo del océano Artico registra una reducción a casi la mitad
desde 1950. Los glaciares retroceden en Los Andes
suramericanos, al igual que en el Himalaya asiático o en los Alpes europeos.
El efecto invernadero ha sido reconocido por la mayor parte de las
principales empresas petroleras del mundo. El presidente de British
Petroleum, John Browne, se expresaba de la siguiente manera en un discurso
en la Universidad de Stanford el 19 de Mayo de 1987:
"El momento para considerar el cambio de política no es cuando se ha probado
de forma concluyente la relación entre los gases de invernadero y el cambio
climático, sino cuando tal posibilidad no puede excluirse y sea tomado en serio
por la sociedad de la que formamos parte. En British Petroleum hemos llegado a
ese punto."
Posiciones similares han sido asumidas por Shell, Ford, Toyota, Boeing y
Dupont. El director de ARCO, Michael Bowlin, señala la necesidad de pasar de una
economía basada en el carbono a otra basada en el hidrógeno: "Asistimos a los
últimos días de la edad del petróleo" – afirma.
Los bosques se han convertido en un importante componente de las
negociaciones internacionales sobre cambios climáticos, debido a su habilidad
para absorber dióxido carbono de la atmósfera, y convertirlo en madera y otros
tejidos de biomasa a través de la fotosíntesis.
También son importantes fuentes de emisiones de gas carbónico y otros gases
del efecto invernadero. Sólo entre 1980 y 1995, y sólo en los países tropicales,
se han perdido en promedio 13 millones de hectáreas de bosques por año ( FAO – FOREST RESOURCE ASSESSMENT
1993, FAO – FOREST RESOURCE ASSESSMENT 1997). La Deforestación en el trópico le ha venido inyectando a la
atmósfera un promedio de aproximadamente 1.400 millones de toneladas de carbono
por año, durante los últimos 15 años, equivalente al 20% de las emisiones
globales de carbono a la atmósfera.
El 75% de las emisiones de gases del efecto invernadero que se han acumulado
en la atmósfera en los últimos 50 años se han generado en países
industrializados, donde se encuentra el 20% de la población mundial. El 25% de
las emisiones se ha generado en países en desarrollo, con el 80% de la población
mundial.
El cumplimiento del Protocolo de Kioto reduciría las emisones
efectivas de los gases del efecto invernadero provenientes de los países
industrializados en sólo un 5.2% en el quinquenio 2008-2012, con respecto a
1990. De lo contrario, de mantenerse las tendencias actuales, las emisiones
aumentarían de 18 a 20 por ciento en el mismo período.
Los gobiernos de
los países mayormente responsables del calentamiento global se han resistido a
asumir medidas acordes con las conclusiones del Panel Inter-gubernamental de
Expertos Sobre Cambios Climáticos, organismo asesor del Convenio Marco
sobre Cambios Climáticos, sugiriendo reducciones de mas del 20% de las
emisiones globales, antes del año 2000.
El protocolo de Kioto incluye seis gases: gás carbónico (CO2), metano, óxido
nitroso, hidro-fluoro-carbonos, per-fluoro-carbonos, y hexafluoruro de sulfuro.
Estados Unidos de Norteamérica es la principal fuente de estos gases, con 25%
de las emisiones acumuladas de CO2 entre 1950 y 1990, y 36% de las emisiones
globales de todos los gases sujetos al protocolo de Kioto. Sus emisiones de CO2
en el año 2000 fueron 11% superiores a las de 1990. Para el año 2010 podrían
superar en 30% las de 1990, a no ser que se establezcan políticas efectivas para
cumplir con una reducción efectiva de emisiones a corto plazo.
Las emisiones de los gases del Protocolo de Kioto de Canadá en 1998 fueron
13% superiores a las de 1990 (Environment
Canada, Ontario, Sept 6, 2000. ENS).
Mientras que Alemania ya las redujo en un 15% y el Reino Unido en 12%
(ENS 6-9-2000).
El Protocolo de Kioto contempla un sistema de comercialización de
emisiones, con el fin de permitirle a quienes les sea más costoso reducir
sus emisiones, comprarle bonos de carbono y otras licencias de contaminación a
otros países, donde el costo de reducir emisiones sea menor.
El Mecanismo de Desarrollo Limpio del Protocolo de Kioto otorga la opción
de canalizar asistencia de los países industrializados a las naciones en
desarrollo, para facilitar un desarrollo menos contaminante y evitar emisiones,
incluyendo la protección de bosques para evitar emisiones, y el establecimiento
de nuevos bosques como vertederos de carbono. Los objetivos centrales del
Mecanismo de Desarrollo Limpio son mitigar el cambio climático y
contribuir al desarrollo limpio.
Algunos países, como Estados Unidos, esperan cumplir buena parte de su
compromiso con el Protocolo de Kioto a través del comercio de bonos de carbono y
la actividad agro-forestal, tanto doméstica como en países en desarrollo. L
protección de bosques amenazados podría evitar la emisión del carbono que
contienen. O se podrían establecer plantaciones de árboles como sumideros de
carbono.
Las próximas negociaciones del Convenio Marco Sobre Cambios Climaticos
tendrán lugar en noviembre próximo en La Haya. Coinciden con las elecciones
presidenciales en los Estados Unidos. El candidato republicano, George W. Bush,
personifica los intereses de las grandes corporaciones energéticas. Ha declarado
que considera al calentamiento global como un problema significativo, pero se
opone a la ratificación del Protocolo de Kioto porque se convertiría en una
carga injustificada para Estados Unidos.
El candidato demócrata, Al Gore, es el autor de un libro: Earth in the
Balance, donde afirma que el calentamiento global es el mayor desafío que
enfrenta la Humanidad. El resultado del enfrentamiento electoral en EUA tiende a
afectar las políticas globales sobre cambios climáticos.
El Congreso norteamericano insiste en que los países en desarrollo
participen significativamente en la reducción de emisiones, como
condición para ratificar el acuerdo. Los países en desarrollo sostienen que EUA,
Europa y Japón deben sentar el ejemplo, por su condición como los emisores de la
mayor proporción de los gases del calentamiento global ya acumulados en la
atmósfera, por continuar siendo la fuente de la mayor proporción de las
emisiones anuales, y por la capacidad técnica y financiera a su alcance.
En el marco de las negociaciones hay una fuerte división entre países
industrializados y naciones en desarrollo. Estas temen ver afectadas sus
posibilidades de crecimiento.
Por su parte, los países miembros de la
OPEP temen perder mas de 20.000 millones de dólares en exportaciones si se
tratara de cumplir con la reducción de emisiones a través de reducciones en el
consumo de petróleo y otros combustibles fósiles.
El secretario general
de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), el nigeriano
Rilwano Lukman, durante una reciente visita a Caracas recalcó: "Las medidas
propuestas para reducir las emisiones de gases causantes del efecto invernadero
constituyen una amenaza real y peligrosa para países altamente dependientes de
las exportaciones petroleras''.
''Las ventas de hidrocarburos representan
90 por ciento de los ingresos en divisas de algunos de nuestros países miembros,
y eso los coloca en una posición muy vulnerable'',
preciso.
Lukman resalta que los 11 países miembros de la OPEP
no pretenden que se les otorgue ''una licencia para contaminar'', pero
esperan que las negociaciones mundiales para enfrentar el cambio climático
consideren los intereses de todos los actores involucrados.
Uno de los aspectos más controvertibles en la agenda de la próxima reunión
del Convenio Marco Sobre Cambios Climáticos, en Noviembre del 2000, es la
forma en que será considerada en el Protocolo de Kioto la protección de bosques
ya existentes, o el establecimiento de nuevos bosques como sumideros de carbono.
La mayoría de los países industrializados, incluyendo a Estados Unidos, Canadá,
la Unión Europea, Japón y Australia, han definido su aceptación a que tales
actividades sean incluidas. Pero la forma de reconocer los respectivos créditos
varía significativamente.
Estados Unidos propone que el carbono capturado a través de actividades
agrícolas o forestales tenga el mismo valor, y cuente tanto, como el carbono que
se deja de emitir a través de la reducción de emisiones de la actividad
industrial. Esta posición es compartida por Canada, Australia, Japón, Nueva
Zelanda, Rusia y otros.
La Unión Europea no se opone. Pero sugiere que no mas del 50% de los
compromisos asumidos a través del Protocolo de Kioto pueda deberse al agregado
de la protección de bosques amenazados, la captura de carbono a través de
actividades agrícolas o forestales, y actividades de desarrollo limpio con
países del "tercer mundo".
En una declaración conjunta reciente (Septiembre 4, 2000), los
ministros de ambiente de Alemania, Jürgen Trittin, y del Reino Unido, Michael
Meacher, sostenían que para que el acuerdo tenga credibilidad se deben evitar
vías de escape, que le permitan a "algunos países" evadir acciones
domésticas para efectivamente reducir emisiones. Sugieren que la
reducción efectiva de emisiones domésticas debe ser equivalente al
50%, o más, del compromiso asumido por cada país en Kioto. Los Estados Unidos,
Canadá y Japón se han resistido a negociar tal propuesta (Germany and UK Issue Climate Change Challenge.
Berlín, September 4, 2000. ENS).
En el contexto del Mecanismo de Desarrollo Limpio, la Unión Europea
hace más énfasis en una "lista positiva" de actividades, incluyendo un
mayor uso de energía renovable, mejorar la eficiencia en el aprovechamiento de
energía y una administración más efectiva de la demanda energética.
El Protocolo de Kioto no entra en vigencia hasta que no sea ratificado
por al menos el 55% de los países que emitan al menos el 55% de los gases del
efecto invernadero. La reunión de Noviembre es vista como la última oportunidad
para que entre en vigencia en el 2002. Inicialmente había sido previsto que
entraría en vigencia en el 2002, coincidiendo con el décimo aniversario de la
Cumbre de Río, UNCED 92) donde inicialmente se firmó el Convenio Marco sobre
Cambios Climáticos.
Septiembre 7, 2000
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