Cientos de taxistas cerraron durante la
mañana de este lunes la entrada y salida a Santa Elena de Uairén,
municipio Gran Sabana, que une a Venezuela con Brasil, con el fin de
protestar por la falta de combustible en las estaciones de servicio de la
zona. Los manifestantes también rechazaban las restricciones
“injustas” que presuntamente efectivos castrenses ponen en práctica para
controlar el contrabando de gasolina al vecino país. Los conductores
denunciaron que los militares adscritos al Teatro de Operaciones Número 5
(TO5) tienen un “monopolio” con el manejo del hidrocarburo y esto afecta
seriamente las actividades económicas de muchos de los residentes, quienes
carecen de fuentes de empleo distintas a las relacionadas con el sector
transporte.
Natalie García (Enviada especial)
ngarcia@correodelcaroni.com
Foto William Urdaneta
Contra el contrabando Cabe destacar
que cada habitante del pueblo es poseedor de una tarjeta para
el control del combustible que consume su respectivo
vehículo. Los profesionales del volante y los de las empresas de
turismo tienen prioridad a la hora de abastecerse, pero según varios
denunciantes, algunos efectivos del Ejército, presuntamente, dejan pasar a
las estaciones de servicio a quienes quieren dejando a otras personas por
fuera, cosa que llena de indignación a los taxistas y a la población en
general que se ve afectada directamente. Tales medidas
obedecen a una regulación que pretende minimizar el contrabando de
combustible con Brasil, pese a ello, hay muchos problemas y fugas
de gasolina a través de personas que sin obedecer a los controles cargan
más de una vez al día su automóvil y venden parte del combustible.
La contraparte El recién nombrado comandante
del puesto del TO5 instalado en la zona, antiguo destacamento de frontera
de la Guardia Nacional, coronel Edgar Morillo, declaró que su labor será
hacer lo que esté en sus manos para bajar el contrabando, sin que el resto
de los habitantes se vean afectados, siempre y cuando cumplan una serie de
normas -muy estrictas según los taxistas- que servirán de filtro para
evitar las irregularidades.
Aprovechamiento militar Un profesional del
volante, que no quiso identificarse, admitió, "estamos conscientes de que
algunos taxistas sacan gasolina varias veces, pero hay que hacer algo
porque los militares no hacen honor al uniforme que tienen puesto, a veces
tardamos hasta un día para echar gasolina y eso no se justifica, mientras
otras personas pasan las veces que les da la gana, el problema es con
quienes están en las bombas dejando pasar o no los carros".
En vista de la tranca, el alcalde del municipio Gran Sabana se
acercó a negociar con los trabajadores del volante junto al comandante
Morillo. Manuel Vallés insistió en que el problema no se solucionará de la
noche a la mañana, pero existen mecanismos para llegar a un punto en común
sin necesidad de tomar acciones radicales como las efectuadas este lunes
antes del mediodía.
Manifestó además que de manera conjunta los diferentes organismos
del estado se aliarán para lograr resolver el abastecimiento que es
limitado para esta población turística principalmente del estado Bolívar,
ya que Petróleos de Venezuela (Pdvsa) sólo surte a las dos estaciones del
pueblo un determinado cupo de combustible basado en el parque automotor
que allí hace vida.
Arreglos a medias
Cerca de la 1:30 de la tarde de este lunes el paso a Brasil fue
restablecido gracias a que se llegó a una suerte de arreglo con la promesa
de que se realizaría una actualización de las tarjetas de los taxistas que
habían caducado con el nombramiento del nuevo comandante del puesto del
TO5 en la zona. La promesa del coronel Edgar Morillo,
jefe del TO5, fue que haría efectiva la entrega si cumplían con los
requerimientos, entre los que destacaban la titularidad de los vehículos y
una revisión realizada por Tránsito Terrestre. Sin embargo, este lunes no
había gasolina en el pueblo y muchas personas tuvieron que padecer las
consecuencias, sin que hubiera una respuesta de las
autoridades |