----- Original Message -----
Sent: Saturday, April 02, 2005 4:01 PM
Subject: Boletín RALLT 130. Arboles GM
RED POR UNA
AMERICA LATINA LIBRE DE TRANSGENICOS BOLETIN
130
Querid@s amig@s:
Este boletín trata sobre la problemática de los árboles
transgénicos como la última amenaza surgida para la sociedad y la biodiversidad.
Las plantaciones forestales producen una serie de impactos sociales y
ambientales, lo que ha movilizado a poblaciones en todo el mundo. Todos
estos problemas se exacerban con el advenimiento de los árboles genéticamente
modificados
Coordinación RALLT ===================================================================================================
ÁRBOLES TRANSGÉNICOS – LA ÚLTIMA
AMENAZA Dra. Mae-Wan Ho - Prof. Joe Cummins
La última amenaza Los árboles forestales
transgénicos no provocan las mismas inquietudes para la salud como lo hacen los
cultivos alimenticios genéticamente modificados (GM). Pero, en realidad, poseen
una amenaza mucho mayor que los cultivos transgénicos porque impactan
directamente sobre los bosques naturales que son esenciales para la vida de
nuestro planeta.
Status mundial de los árboles
GM
La mayor parte de la
modificación genética de los árboles forestales ha sido realizada con la
transferencia de DNA mediado por Agrobacterium; pero también se ha
utilizado el bombardeo de partículas con DNA fijado o “transformación
biolística”. De las 205 aplicaciones permitidas a finales del 2003, el 73,5% se
originó en EEUU, el 23% en otros países miembros de la OECD (en particular
Bélgica, Canadá, Francia, Finlandia, Nueva Zelanda, Noruega , Portugal, España y
Suecia) y el 3.5% en otras partes (Brasil, China, Chile, Sudáfrica y Uruguay)
[1]. Cuatro características se reportan para el 80% de las aplicaciones de
permisos: tolerancia a herbicidas (32%), marcadores de genes (27%), resistencia
a insectos (12%) y modificación de lignina (9%). De las especies de árboles
involucradas, Populus, Pinus, Liquidambar (Árbol de goma dulce) y Eucalyptus
representan el 85% de las aplicaciones.
A pesar de que el interés
comercial era bajo durante los primeros diez años del desarrollo de árboles
transgénicos, éste ha crecido paulatinamente desde finales de los 90s. A finales
del 2003, el 45% de los permisos otorgados fueron para la industria y,
principalmente, para álamos. Pero hasta el momento no ha habido un empuje
concertado para la comercialización de árboles GM excepto en China, donde se han
plantado más de un millón de árboles transgénicos en iniciativas de
“reforestación” a raíz de la aprobación de su comercialización otorgada por la
Administración Estatal de Silvicultura de China en el 2002.
Varias compañías, incluyendo
Weyerhaeuser, Shell and Monsanto, involucradas en la investigación de árboles
transgénicos, habían dejado los estudios porque no eran económicamente
atractivos [2]. Sin embargo, la decisión tomada en diciembre de 2003 en la
Novena Conferencia de las Partes en el Marco del Convenio de Cambio Climático de
las Naciones Unidas de permitir a las compañías y gobiernos del Norte establecer
plantaciones de árboles transgénicos en el Sur bajo el “Mecanismo de Desarrollo
Limpio” podría ser el peldaño que necesitan los productores de OGM para ver a
los árboles transgénicos económicamente atractivos.
La
creciente sustitución de los bosques
Los árboles forestales tienen una larga vida. Su sistema de
raíces es extensivo e interactúa con numerosas especies en la biota del suelo,
las cuales son cruciales para reciclar, almacenar y mantener los nutrientes en
el ecosistema forestal. Por encima del suelo, los árboles proporcionan sombra,
hogar y alimento a comunidades indígenas y a casi 2 millones de especies de
insectos, aves, mamíferos, otras plantes, epífitas, hongos y
bacterias.
Todos
los seres humanos dependen de los bosques de una u otra manera ya sea con agua
limpia, hábitat, alimentos, plantas medicinales y como santuarios recreacionales
y espirituales.
La mayoría de ellos, especialmente los bosques tropicales, son
esenciales para el ciclo del agua que lleva la lluvia hacia los cultivos; y para
regular la temperatura de la Tierra, evitando que algunos lugares sean muy
calientes o muy fríos. Los bosques absorben dióxido de carbono y producen
oxígeno; en ese sentido son los “pulmones” del planeta.
El reemplazo de los bosques por
plantaciones de árboles GM provocará un desastre ecológico para nuestro planeta,
especialmente ahora que el calentamiento global se está acelerando
dramáticamente.
Los árboles transgénicos condenan
Los árboles GM están diseñados
para plantaciones enormes de monocultivos, pero constituyen una amenaza a los
ecosistemas forestales naturales biodiversos. Las denominaciones que ponen las
comunidades locales a las plantaciones industriales son reveladoras [2]. El
eucalipto es el “árbol egoísta” porque sus plantaciones remueven nutrientes del
suelo y consumen tanta agua que los campesinos no pueden cultivar arroz en los
campos adyacentes. Los Mapuche de Chile se refieren a las plantaciones de pino
como “soldados plantados” porque son verdes, están en fila y avanzan. En Brasil,
las plantaciones de árboles son “desiertos verdes” y en Sudáfrica las llaman el
“cáncer verde”. A lo largo y ancho del hemisferio sur las organizaciones y redes
se están oponiendo activamente a las plantaciones industriales de árboles en sus
tierras. Los árboles transgénicos intensificarán los problemas de las
plantaciones industriales y la oposición de las comunidades
indígenas.
Un
reporte conjunto del Movimiento Mundial por los Bosques Tropicales (WRM en
inglés) y Amigos de la Tierra Internacional (FoEI en inglés) [2] señala que los
científicos que dicen “mejorar” árboles mediante modificación genética están en
realidad trabajando para “mejorar la rentabilidad de las empresas” que financian
sus investigaciones. Además destaca:
“Pero desde una perspectiva
biológica no existe un mejoramiento. ¿Acaso un árbol con menos lignina es mejor
o peor que uno normal? Claramente es peor, dada la pérdida resultante de sostén
estructural, lo que hace susceptible a daños durante tormentas de vientos. ¿La
resistencia a un herbicida es una “ventaja”? No lo es, pues permite la aspersión
extensiva de herbicidas que afectan el suelo y, al mismo tiempo, destruyen la
flora local y las formas de vida salvaje. ¿Es acaso un árbol sin flores ni
frutos ni semillas útil para los seres vivos? Este árbol no es el alimento de
miríadas de especies de insectos, aves y otras especies que dependen de él.
¿Constituye un árbol con propiedades insecticidas un “mejoramiento”? Es una
amenaza muy peligrosa para muchas especies de insectos que son parte de cadenas
alimenticias más grandes.”
Los árboles transgénicos violan los convenios
internacionales
El reporte del WRM señala que los OGM en general y los árboles
transgénicos en particular son una clara violación del Convenio de Diversidad
Biológica, el cual obliga a los gobiernos a ejecutar el principio de precaución
para los OGMs que puedan causar daños graves a la biodiversidad. Los árboles
transgénicos también violan el espíritu del Foro sobre Bosques de las Naciones
Unidas, que fue establecido para proteger los bosques del mundo.
Desafortunadamente, la inclusión
de árboles GM dentro del marco del Mecanismo de Desarrollo Limpio del Protocolo
de Kyoto significa que el Convenio de Cambio Climático no sólo apoya la
expansión de las plantaciones de árboles, sino que asume a las plantaciones de
árboles transgénicos como mejores “sumideros de carbono”.
El WRM, el FoE Internacional y
ECOTERRA Intl. hacen un llamado a todos los gobiernos, especialmente a las
Partes del Convenio de Cambio Climático y su Protocolo de Kyoto, a prohibir la
plantación de árboles transgénicos. La campaña en contra de los árboles GM fue
lanzada en Enero del 2004 por la Asociación de Bioseguridad de la Sociedad
Finlandesa y la Unión de Ecosilvicultura (ver “No a los árboles GM”, SiS
23).
Contaminación transgénica inevitable e
ineludible
Los árboles
forestales son altos, de larga vida y producen abundante polen y semillas que
pueden ser transportados bien lejos. Estos árboles también se reproducen
asexualmente mediante clones que se dispersan largas distancias de la planta
madre promoviendo, por lo tanto, una mayor contaminación transgénica. De esta
manera, la contaminación de árboles nativos por parte de árboles GM es
inevitable e ineludible.
Los árboles GM con poca lignina aumentan la destrucción de
bosques y formas de vida. Los árboles con poca lignina son más susceptibles, no
solo a daños por tormentas, sino también a ataques de insectos, hongos y
bacterias (ver “Árboles transgénicos con poca lignina y cultivos para forraje”,
SiS 23).
La
característica de lignina reducida diseminándose por los bosques nativos los
hará susceptibles a tormentas, ataques de pestes y enfermedades bacterianas y
por hongos. Las poblaciones de insectos plaga también
aumentarán.
Aunque las plantaciones de árboles GM con poca lignina
beneficiarán a la industria del papel, también destruirán las formas de vida
locales, forzando a las comunidades a desplazarse hacia lugares donde tendrán
que talar otros bosques para poder cultivar [2].
Las plantaciones forestales a
menudo están seguidas por la destrucción de bosques nativos. En Sumatra, por
ejemplo, extensas áreas de bosques fueron destruidas para alimentar las fábricas
de pulpa y papel; las zonas desbrozadas fueron reemplazadas por plantaciones de
acacia. El argumento de que plantar árboles GM de crecimiento más rápido es
“cultivar más madera en menos tierra” es engañarse. El producir más fibra para
la industria del papel no cambiará la demanda de maderas finas tropicales de
alta calidad para la industria de la construcción. Además, la demanda de madera
no es la única causa de la deforestación; la construcción de vías, las represas,
los monocultivos (como la soya en Brasil o Argentina) o la ganadería, minería y
extracción petrolera también contribuyen a la destrucción de los bosques
nativos, y la plantación de árboles GM no harán nada para detener la
destrucción.
Los
árboles GM de crecimiento rápido consumirán más agua que las plantaciones de
árboles industriales actuales, drenando aún más los pocos acuíferos que quedan e
impactando en los bosques adyacentes.
La mayor parte de la pulpa
producida en el Sur se exporta al Norte. El consumo de papel per capita en
Alemania es 70% más elevado que en EEUU. Vietnam consume en promedio el 2% de la
cantidad de papel consumida en EEUU, a pesar de que los niveles de
alfabetización en EEUU, Alemania y Vietnam son casi idénticos [2]. Cerca del 40%
del papel es utilizado para empaquetamiento, y el 60% del espacio utilizado en
los periódicos estadounidenses es para propagandas. Según Jukka Hamala,
directora de Stora Enso – la segunda compañía más grande del mundo en producción
de papel, embalaje y productos forestales, cuyas ventas bordearon los 12.4
billones de dólares en 2004 – el factor clave para una mayor demanda fue el
aumento de anuncios y propagandas en los periódicos y revistas. Por lo tanto, el
aumento del consumo de papel no es ni necesario ni tampoco deseable.
Los árboles
transgénicos de crecimiento rápido exacerban el cambio
climático.
El
argumento de que plantar árboles transgénicos puede revertir el cambio climático
también es una falacia. La empresa productora de autos Toyota empezó en 1993 sus
ensayos de campo con árboles genéticamente modificados para absorber más
carbono. Desafortunadamente, mientras la absorción de carbono aumentaba, también
lo hacía el consumo de agua.
Las plantaciones de árboles son mucho menos efectivas en
secuestrar carbón que los ecosistemas forestales nativos. Un ecosistema nativo
forestal es un sumidero de carbono efectivo. Se ha estimado que los bosques
neo-tropicales de América Central y del Sur secuestran, por lo menos, una
tonelada de carbono por hectárea al año gracias al aumento de biomasa por encima
del suelo (es posible que se secuestre más carbono en el suelo). En contraste,
la destrucción de una hectárea de bosque emite 200 toneladas de carbono (ver
“Por qué Gaia necesita de selvas tropicales”, Isis 23).
Los árboles de crecimiento rápido
y de poco contenido lignínico también se enraizarán más fácilmente, devolviendo
dióxido de carbono a la atmósfera con mayor rapidez, exacerbando el
calentamiento global en vez de aminorarlo.
Unos investigadores utilizaron un
escáner multiespectral térmico infrarrojo de la NASA para averiguar el contenido
energético de los bosques experimentales en Oregon en 1989 [3]. Encontraron que
un área desbrozada tenía una temperatura superficial de 51.8°C, es decir, era
más caliente que una cantera cercana, la cual registró 50.7°C. Una plantación de
abetos con árboles maduros registró 29.9°C, comparado con los 29.4°C del bosque
de abetos naturales; en contraste, la temperatura más baja fue de 24.7°C y fue
registrada en un bosque de 400 años de edad. El efecto de enfriamiento del
ecosistema forestal natural no solo es importante para aliviar el calentamiento
global; también es un indicador significativo de sustentabilidad
[4].
Los árboles transgénicos insecticidas destruyen la
biodiversidad
No hay duda de que
los árboles transgénicos insecticidas matarán a muchos insectos, tanto a
especies deseadas como a especies no deseadas; es decir, antes de que las plagas
desarrollen resistencia en unos seis o siete años, según una estimación de Liu
Xiaofeng del Departamento de Agricultura de Henan, un científico que cuestiona
el algodón transgénico plantado en China (ver “El fiasco del algodón transgénico
en todo el mundo”, SiS25). En ese punto, más insecticidas serán utilizados,
especialmente a medida que nuevas clases de plagas aparezcan.
La mayor amenaza a la
biodiversidad es la expansión de las características insecticidas hacia bosques
naturales. Los experimentos de laboratorio han demostrado que las toxinas Bt
producidas en los cultivos transgénicos pueden perjudicar a los predadores
beneficiosos que se alimentan de insectos plaga, incluso cuando las pestes no
sean afectadas por las toxinas [5]. Se encontró que una clase de toxinas Bt
(Cry1A) afectaban a ratones, mariposas y otras especies benéficas. Otra
clase (Cry3A) actúa contra los insectos del orden Coléoptera (escarabajos y
gorgojos) [6], que abarca a unas 28 600 especies. Las toxinas Bt son conocidas
por salir de las raíces y penetrar en el suelo impactando potencialmente a la
biota. La reducción de las poblaciones de insectos impactarán a su vez en aves y
mamíferos que se alimentan de ellos.
Los
árboles GM tolerantes a herbicidas producen desiertos
verdes
Los árboles GM han sido
construidos para ser tolerantes a herbicidas de amplio espectro que matan a
cualquier otra planta. Si esto no suficiente para creer lo perjudiciales que
son, estas sustancias también afectan a toda clase de animales incluyendo a los
seres humanos (ver El caso de un Mundo Sustentable libre de transgénicos,
reporte ISP www.indsp.org <http://www.indsp.org/> ). Las plantaciones de
árboles GM tolerantes a herbicidas realmente son desiertos verdes y el daño
colateral a bosques y cultivos adyacentes debido a la aspersión de herbicidas es
inevitable como también la contaminación de agua potable.
El glifosato es la causa más
frecuente de quejas y envenenamientos en Gran Bretaña. Se han reportado
trastornos de varias funciones del organismo después de su uso a niveles
normales. Además duplicó el riesgo de aborto espontáneo tardío y los hijos de
personas expuestas al glifosato tenían defectos neurológicos de comportamiento
elevados. El Roundup (la marca comercial del glifosato producido por Monsanto)
causó una disfunción de la división celular que podría estar vinculada con el
cáncer humano. También causó el desarrollo tardío del esqueleto fetal en ratas
de laboratorio. Inhibe la síntesis de esteroides y es genotóxico en mamíferos,
peces y sapos. Es letal y altamente tóxico para gusanos y
lombrices.
El
glufosinato de amonio está relacionado con la toxicidad neurológica,
respiratoria, gastrointestinal y hematológica y con defectos congénitos en los
seres humanos. Es tóxico para las mariposas, un sinnúmero de insectos
beneficiosos, larvas de almejas, ostras y otros invertebrados acuáticos, así
como a algunos peces de agua dulce como la trucha arco iris. También inhibe a
las bacterias y hongos benéficos presentes en el suelo, especialmente, aquellos
que fijan el nitrógeno.
Peligros a la
salud
Los peligros a la salud de
los árboles transgénicos son similares a los producidos por otros cultivos GM,
pero podrían ser más intensos. Mencionaremos dos de los más destacados. El
Agrobacterium, utilizado como vector para crear muchos árboles transgénicos, es
una bacteria del suelo que ocasiona tumores en plantas infectadas y es capaz de
transferir genes hacia las células humanas y animales (ver “Vector común vegetal
inyecta genes a células humanas” http://www.i-sis.org.uk/Agrobacterium.php). Los
científicos han advertido que la Agrobacterium es extremadamente difícil de
erradicar de las plantas transgénicas creadas y, por lo tanto, pueden servir
como un vehículo potencial para la transferencia horizontal no intencionada de
genes hacia bacterias del suelo y otras especies, incluyendo seres humanos que
entran en contacto con cultivos transgénicos. Este peligro aumenta enormemente
con los árboles GM, especialmente debido a su extenso sistema de raíces. La
rizósfera – sistema radicular vegetal – es un conocido “punto caliente” para la
transferencia horizontal de genes.
El potencial que tiene Agrobacterium para mediar la
transferencia horizontal de genes, y los peligros resultantes de la diseminación
de marcadores de resistencia antibiótica; la creación de nuevas bacterias y
virus que causan enfermedades como el cáncer en animales incluyendo los seres
humanos fueron revisados en el capítulo 11 el reporte ISP (www.indsp.org
<http://www.indsp.org>).
Otra amenaza para la salud constituyen las toxinas Bt y otros
transgenes, que podrían extenderse ampliamente en el polen de los árboles
transgénicos. Todas las toxinas Bt utilizadas como transgenes, incluyendo las
que confieren tolerancia al glifosato, tenían similitudes con alérgenos
conocidos y, por tanto, pueden provocar alergias (ver “¿son alérgenas las
proteínas transgénicas?” reporte de ISIS 05/01/ 2005
http://www.i-sis.org.uk/ATPA.php)
Referencias 1. Lang C. Genetically Modified Trees
The ultimate threat to forests. World Rainforest Movement and Friends of the
Earth, December 2004 http://www.wrm.org.uy/subjects/GMTrees/text.pdf 2.
Van Frankenhuyzen K and Beardmore T. Current status and environmental impact
of transgenic forest trees. Can J For Res 2004, 1163-1180. 3. Luvall JC and
Holbo HR. Measurements of short term thermal responses of coniferous forest
canopies using thermal scanner data. Remote Sensing and the Environment 1989,
27, 1-10. 4. Ho MW. Are sustainable economic systems like organisms? In
Evolution, Development and Economics (P. Koslowski, ed.), Springer-Verlag,
Berlin, 1998b. 5. Dutton A, Klein H, Romeis J and Bigler F. “Uptake of
Bt-toxin by herbivores feeding on transgenic maize and consequences for the
predator Chrysoperia carnea”, Ecological Entomology 2002, 27, 441-7. 6. Wu
S-J, Koller CN, Miller DL, Bauer LS and Dean DH. Enhanced toxicity of
Bacillus thuringiensis Cry3A d-endotoxin in coleopterans by mutagenesis in a
receptor binding loop. FEBS Letters 2000, 473, 227-232. 7. Reviewed in Ho MW
and Lim LC. The Case for a GM-Free Sustainable World, ISP Report, ISIS &
TWN, London & Penang, 2003.
La Dra. Maewan Ho es editora de la
revista Ciencia en Sociedad (SiS) y asesora científica de la Red del Tercer
Mundo. Para más información sobre su trabajo visite:www.i-sis.org.uk
http://www.i-sis.org.uk <http://www.i-sis.org.uk/>
Ningún derecho para la contaminación
Prohibición Mundial a los árboles
transgénicos
|