China publica un informe sobre la
situación de los derechos humanos en EEUU
BEIJING (Xinhua) .-
7 de mayo del 2003
La Oficina de
Información del Consejo de Estado de China difundió el jueves un informe
sobre la situación de los derechos humanos de Estados Unidos en 2002. Los
siguientes son algunos hechos y cifras publicados por el
documento.
Se produjeron en ese país
norteamericano 11.8 millones de delitos en 2001, una subida del 2% frente al
año anterior. En promedio, se cometió un delito cada 3 segundos, incluyendo
44 asesinatos y 248 violaciones diarias (en total, 15,980 personas fueron
asesinadas y 90,491 mujeres fueron violadas).
En 2002, siguió
aumentando la tasa de delincuencia en las grandes ciudades estadounidenses,
especialmente en Washington, donde se registró una subida interanual de 36%,
en Boston (67%) y Los Ángeles (27% ).
La tasa de
asesinatos en ese país resultó ser entre cinco y siete veces mayor que en la
mayoría de los países industriales.
Debido a los más de 200
millones de armas privadas que poseen los estadounidenses, fueron frecuentes
los tiroteos, que han causado más de 30,000 muertos o heridos cada
año.
Se ha mantenido en EEUU una elevada tasa de delincuencia
juvenil, y los adolescentes cometieron un 20% de los crímenes
violentos.
En 2002, el número de detenciones policiales mensuales se
incrementó en un 15% respecto al año anterior, hasta las 7,823 personas, y
dos tercios de ellas fueron archivadas por la justicia por falta de
pruebas.
Las autoridades estadounidenses confirmaron que desde 1973
habían sido erróneamente condenados más de 200 encarcelados, de los que 99
condenados a muerte eran inocentes. Sin embargo, la mayoría de ellos no
obtuvo compensaciones.
EEUU es uno de los pocos países del mundo que impone la pena
capital a los delincuentes adolescentes y con enfermedades mentales. En ese
país se produjeron dos tercios de las ejecuciones de criminales adolescentes
realizadas en el mundo durante la última década.
A finales de 2001,
un total de 6.6 millones de personas cumplían penas en los cárceles
estadounidenses, las que tienen un alto índice de ocupación.
La
"democracia" estadounidense se encuentra relacionada al dinero. Durante los
comicios de 2002, un 95% de los escaños en la Cámara de Representantes y un
75% de los puestos en el Senado fueron adjudicados a los candidatos que más
gastaron en la campaña electoral.
La "política del dinero" ha hecho
que cada vez más ciudadanos estadounidenses pierdan el interés por la
participación en la política nacional, lo que se reflejó en que sólo el 40%
de los ciudadanos votaran en las elecciones de 2002.
La diferencia
entre los ricos y los pobres es cada vez mayor. En el periodo de 1998 a 2001
subió un 70% el desfase entre el 10% de las familias más adinerados y el 20%
de las más empobrecidas.
Sigue empeorando la situación de pobreza y
hambre, que afectan a 33 millones de norteamericanos. La situación
actual de los habitantes sin hogar en Estados Unidos ha llegado a ser tan
crítica como en el periodo posterior a la II Guerra Mundial.
Las
mujeres y niños son en muchas ocasiones las víctimas del crimen y violencia.
Las mujeres se encuentran bajo mayor riesgo de asesinato.
Se
revelaron varios escándalos sexuales cometidos en el seno de la iglesia.
Cerca de un 40% de las monjas católicas, es decir, 35,000 personas, han sido
víctimas de abusos sexuales.
Además, unos 80 sacerdotes han sido
acusados de violación a menores. A uno de ellos se le acusa de haber atacado
más de 100 niños durante los pasados 40 años.
Entre 1988 y 1997, un
total de 6,817 chicos de entre 5 y 14 años fueron asesinados a tiros en los
50 estados del país norteamericano. Cada año 58,000 chicos fueron
secuestrados por personas de otras familias (el 40 por ciento acabaron
siendo asesinados). Otros 200,000 fueron secuestrados por miembros de sus
propias familias, en muchos casos para conseguir la custodia del menor
negada por los jueces.
La discriminación racial continúa siendo un
problema arraigado en EEUU.
Los negros representan sólo un 13% de la
población total nacional de EEUU, pero el porcentaje de reclusos de color es
de 46%. Una de cada cinco personas de raza negra ha estado encarcelada en
algún momento de su vida.
En el año 2000 se registraron unos
800,000 prisioneros negros, en comparación con los 600,000 negros
matriculados en instituciones de enseñanza superior.
Los datos de los tribunales
muestran que es más común condenar a pena de muerte a personas culpables de
asesinar a ciudadanos blancos que a quienes matan a personas de otros
colectivos, y un acusado negro corre el mayor riesgo de recibir una pena de
muerte.
La tasa de pobreza en Estados Unidos subió al 12% en 2001.
Entre los afroamericanos y los hispanos las cifras fueron de un 23% y un
21%, respectivamente.
La tasa de mortalidad por cáncer entre los
negros es un 35% superior a la de los blancos. En lo que se refiere
al SIDA, la cifra registrada entre las mujeres y niños negros es un 75%
mayor que la entre los blancos.
La discriminación racial ha
aumentado en Estados Unidos tras los ataques terroristas del 11 de
septiembre. Un 48% de los musulmanes que viven en Estados Unidos indican que
sus vidas han empeorado desde esa fecha.
EEUU ejerce una política de
unilateralismo y viola los derechos humanos en otros países.
La
actual guerra contra Irak, iniciada el 20 de marzo de 2003 por Estados
Unidos y sus aliados, ha dejado un gran número de víctimas civiles inocentes
y graves desastres humanitarios.
Durante sus ataques aéreos contra el
régimen talibán en Afganistán en 2002, las tropas estadounidenses usaron
cerca de 250,000 bombas de racimo y mataron a más de 3,000 civiles en el
país.
Se informó de la detención de 12,000 guerreros tabibanes
después de la acción militar en Afganistán, pero sólo entre 3,500 y 4,000
han seguido con vida.
Centenares de miles de militares
estadounidenses están estacionados en el exterior. Cada año los soldados de
ese país acreditados en la República de Corea son capturados como
responsables de más de 400 accidentes de tráfico, pero menos de 10 casos son
juzgados por los tribunales surcoreanos.
Las tropas estadounidenes en
Okinawa (Japón) son famosas por su constante implicación en casos criminales
tales como incendios premeditados y violaciones. Tras la II Guerra Mundial,
los soldados de ese país norteamericano han cometido más de 300 delitos
sexuales en el
archipiélago.