Articulo de opinión.
El eterno problema de los desechos sólidos.
Julio Alexander Parra Maldonado
Jalexp@telcel.net.ve
Actualmente surgen algunas soluciones alternativas al
tradicional manejo de los desechos sólidos y existen propuestas para desarrollar
su aprovechamiento. En el Estado Mérida se están generando una gran cantidad de
desechos sólidos, o basura, que se pudiesen aprovechar, además de acompañar este
proceso con un manejo integral de los mismos. En cambio están yendo a parar en
botaderos a orillas de nuestros ríos y en las inmediaciones de comunidades y
pueblos, dañando enormemente la salud y el ambiente de todos.
Si observamos a la naturaleza encontramos que en ella nada se
pierde, todos los desperdicios de plantas y animales sirven como alimento a
otras plantas, después de descomponerse por medio de la ayuda de
microorganismos. En la naturaleza se realiza un circuito integrado de manera que
casi nunca quedan desperdicios sin aprovechar. Así nada se pierde, todos los
desperdicios y desechos son retornados al ciclo natural.
En cambio la vida humana moderna no mantiene ese equilibrio
natural en la producción y destino final de los desechos o basura. Es conocido
que la basura genera problemas en múltiples ámbitos para el hombre y su entorno
socio-ambiental.
Todo tipo de objeto que no es útil, automáticamente lo botamos
y lo mezclamos con otros de distinta especie, sin pensar en el costo ambiental y
socioeconómico que esto representa. El objeto desechado no es basura, nosotros
lo convertimos en basura al deshacernos de él en forma inadecuada, porque, si en
lugar de botarlo y mezclarlo con otros materiales que pueden ser dañinos o
contaminantes, pensamos sobre su destino final y hacemos una selección de los
productos que se pueden aprovechar de nuevo, transformamos la basura en
materiales reutilizables iniciando el proceso del reciclaje. Así nos parecemos
un poco al funcionamiento de la naturaleza.
Pero para que se pongan en marcha estos mecanismos es necesario
la participación de todos los sectores de la sociedad. Una primera acción es la
reducción del volumen de los desechos que generamos, que no pueden ser
aprovechados ni por el reciclaje, ni por el reuso. El segundo aspecto es el
reuso o la reutilización, que consiste en la nueva utilización de objetos y
materiales previamente utilizados, sin que implique transformación de su
condición inicial. El tercer aspecto es el reciclaje, propiamente dicho, que
consiste en el conjunto de acciones que permite reintegrar al ciclo de
producción y consumo, objetos y materiales previamente utilizados, con la
utilización como materia prima en procesos industriales o artesanales que
transforman su condición anterior.
Para un sistema de aprovechamiento de los desechos sólidos de
una población determinada es necesario un plan que aborde sus distintos
aspectos, y que contemple políticas públicas por parte de las autoridades, y
estructuras económicas para el mercadeo de los materiales.
Es muy importante la participación de las comunidades en la
separación de los materiales para aumentar su valor y la calidad de los mismos.
Ya sea con sistemas de recolección selectiva, donde se haga casa a casa en
distintos horarios para cada material, o bien con centros de acopios
comunitarios donde cada familia lleve sus materiales clasificados.
Los beneficios que trae el aprovechamiento de los desechos se
pueden resumir en:
- Disminución de los volúmenes de basura que se deben llevar y tratar en los
basureros o rellenos sanitarios.
- Representa un ahorro significativo de recursos naturales.
- Es un ahorro de la energía que se utiliza para producir esos
materiales.
- Disminuye los niveles de contaminación de aire, tierra y agua.
- Genera empleos, mediante la creación de empresas y fabricas para los
procesos de aprovechamiento.
- Genera materia orgánica que sirve como abonos ecológicos.
- Desarrolla una conciencia ecológica entre las comunidades, fortaleciendo
también su organización.
- Genera recursos económicos a las familias que se vinculan al proceso, y
representa ahorro del dinero que se invierte en los tradicionales sistemas de
recolección y disposición final.
Esta propuesta ambiental, económica, técnica y social arroja
resultados positivos. Este aprovechamiento de los desechos es una alternativa
que disminuye el problema y que de manera organizada genera dividendos
ambientales, sociales y económicos.
En Mérida el problema solo tiene visos de agudizarse. En
ocasiones pasadas se ha visto agravado cuando han colapsado basureros o se ha
suspendido el sistema de recolección.
En Mérida hay planteamientos alternativos, estudios serios de
largo aliento, liderados principalmente por la Universidad de los Andes,
concentrados en el CIULAMIDE, y del Centro Interamericano de Desarrollo e
Investigación Ambiental y Territorial CIDIAT, con el Ing. Miguel Cabeza, que han
encontrado eco en proyectos comunitarios, gremios profesionales, algunos
funcionarios de instituciones oficiales, empresas privadas, en fin
representantes de la sociedad, que están trabajando en un plan rector para fijar
las políticas para el tratamiento integral de los desechos sólidos, ya no solo
para el área metropolitana sino para todo el estado Mérida.
Existe una infraestructura física mínima para el
aprovechamiento de los desechos en Mérida. Esta compuesta por Centros de Acopio,
vehículos que realizan recolecciones en los comercios y hogares, rutas de
comercialización de los principales materiales que conforman los desechos. No
tiene capacidad para abarcar la recuperación total del volumen de desechos
producido, pero es una base significativa para el inicio de cualquier
proyecto.
En Mérida contamos con un equipo humano capacitado en
disposición de asesorar y ejecutar el plan de aprovechamiento de los desechos
sólidos. Ya se han realizado numerosas investigaciones desde planteles de
educación media, institutos tecnológicos universitarios, la Universidad de los
Andes y otros centros de estudio. Todas ellas recomiendan la aplicación de
programas de aprovechamiento de desechos sólidos.
Las instituciones oficiales, principalmente las alcaldías, no
tienen un plan concreto para estimular a corto o mediano plazo el
aprovechamiento y el manejo integral de los desechos. Aunque se han realizado
numerosas investigaciones sobre el tema, aún no se ponen en práctica la mayoría
de sus conclusiones y recomendaciones.
Son realmente preocupantes los métodos de recolección y
disposición final de los desechos sólidos que prevalecen en Mérida, aún más por
los problemas que han tenido. El punto más débil en los pasos necesarios es la
voluntad política en el apoyo a las alternativas propuestas.
Esta situación se ha mantenido debido a la falta de
planificación para el manejo integral de los desechos sólidos, hasta ahora no se
le ha dado la debida atención al problema, solo se atiende deficitariamente
cuando se agrava la crisis. Lo que se necesita es la elaboración de proyectos
por parte de los organismos gubernamentales y no gubernamentales enmarcados en
un plan rector. También se debe crear una conciencia ecológica que vaya desde la
más temprana edad en el hogar y en las escuelas, que se refuerce constantemente
a través de los medios de comunicación, a fin de terminar con ese grave problema
ambiental que ocasiona una serie de factores de riesgo para la salud como son:
la quema de los desechos, los criaderos de vectores de enfermedades, la
producción de gases tóxicos, contaminación de aguas y tierras alrededor de los
sitios de disposición final.
Como reflexión final puede señalarse que toda esta compleja
problemática nace del fracaso del sistema educativo, incluyendo escuela, familia
y medios de comunicación, en inculcar esta noción clave: "formamos parte de un
entorno integral y en equilibrio, que no se debe desestabilizar, a riesgo de
graves consecuencias que la naturaleza no tolerará".
Desde las organizaciones comunitarias estamos atentos y
dispuestos a involucrarnos en la implementación de estos planes, esperamos por
el aporte importante de las autoridades, esperamos por su voluntad y compromisos
con el plan rector para un adecuado manejo de los desechos sólidos en
Mérida.
Universidad de Los Andes
Dirección de Cultura y Extensión
Cátedra de la Paz y Derechos Humanos
"Mons. Oscar Arnulfo Romero"