Estimados compañeros de LEA:
Me complace enviarles las conclusiones a las que arribó la
CONFERENCIA MUNDIAL DE ONG Y COMUNIDADES LOCALES SOBRE HUMEDALES
donde participó Yuleida Huerta, Presidenta del Bloque Vecinal de la Costa Norte
del Lago de Maracaibo para plantear la situación del conflicto ambiental
provocado por PRODUSAL C.A. con las secuelas de contaminación ambiental y
fragmentación del hábitat causados por la consabidas técnicas de la
producción salinera mediante el método de evaporación solar en la Ciénaga
de Los Olivitos, sitio Ramsar de Venezuela.
Con estas conclusiones, especialmente en lo relativo a la participación
de las comunidades locales en la gestión de sus humedales, la joven y
combativa resistencia ambientalista contra la contaminación salinera recibe las
mejores oportunidades para convertirse en una lucha global contra la
contaminación en la cuenca del Lago de Maracaibo, gracias a la solidaridad
de centenares de ONGs ambientalistas del mundo que tuvieron conocimiento del
caso PRODUSAL-CIENAGA LOS OLIVITOS, en esta conferencia mundial congregada en
Valencia, España, los dias 15 y 16 de noviembre del año en curso. Los detalles
de este favorable cuadro de lucha contra la contaminación salinera será dados a
conocer en los próximos dias.
Cordialmente,
Jorge Hinestroza.
Mas información en: http://www.nodo50.org/preramsar/
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CONCLUSIONES
DE LA CONFERENCIA MUNDIAL DE ONG Y COMUNIDADES LOCALES SOBRE
HUMEDALES
Con
motivo de la celebración de la 8ª Conferencia de las Partes Contratantes de la
Convención de Ramsar, se ha celebrado los días 15 y 16 de noviembre en el
Palacio de Congresos de Valencia, la Conferencia Mundial de ONGs y Comunidades
Locales sobre Humedales, con la participación de un centenar de representantes
de organizaciones ecologistas, comunidades locales y pueblos indígenas de 30
países de Oceanía, Asía, Europa, América y Africa.
La
Conferencia Mundial de ONGs y Comunidades Locales sobre Humedales denuncia que
de forma generalizada las Partes Contratantes incumplen la Convención de Ramsar
y la mayoría de las Recomendaciones y Resoluciones adoptadas en las Conferencias
Ramsar, como lo demuestra el preocupante estado de conservación de buena parte
de los humedales del mundo, incluidos muchos humedales reconocidos de
importancia internacional.
Por
ello, resulta prioritario establecer mecanismos eficaces para hacer cumplir a
las Partes Contratantes los compromisos y decisiones adoptados por la Convención
de Ramsar, poniendo especial atención en el control de las actividades
insostenibles que,
utilizan
y vierten al entorno, compuestos químicos y orgánicos contaminantes,
persistentes y bioacumulables.
La
Conferencia muestra su inquietud ante la política desarrollada por buena parte
de los países contratantes de la construcción de grandes embalses y trasvases
entre cuencas, siendo esta una de las actuaciones humanas que mayor impacto ha
producido sobre la biodiversidad,
sobre
las comunidades humanas que habitan las zonas afectadas, y sobre su patrimonio
natural. La construcción de grandes embalses es una de las principales causas de
desplazamientos forzosos de poblaciones, así como de la destrucción de su
patrimonio cultural.
Consideramos esencial que la Convención Ramsar cumpla
los mecanismos establecidos en la Resolución VII.8, asegurando la conservación
de los conocimientos autóctonos de las comunidades locales y pueblos indígenas
ligados a los humedales, y el mantenimiento de su patrimonio
cultural.
La
Convención Ramsar debe formular un plan que permita a las comunidades locales de
usuarios ancestrales, y pueblos indígenas, monitorear y manejar los recursos de
sus humedales de forma efectiva. Para ello, es necesario que las Partes
Contratantes reconozcan e impliquen a las organizaciones no
gubernamentales, las comunidades locales y los pueblos indígenas, a fin de
asegurar la sostenibilidad a largo plazo y la protección de los
humedales.
Consideramos que es necesario un esfuerzo por parte de la Convención
de Ramsar para incitar a las Partes Contratantes a educar sobre el consumo del
agua, a todos los niveles.
La Conferencia lamenta el incumplimiento de las Resoluciones VI.23 y
VII.18, así como del, Objetivo 2.2 del Plan Estratégico 1997-2002 sobre uso
racional del agua y los humedales, en los cuales se incluyen los lineamientos
para integrar la conservación y el uso racional de los humedales en el manejo de
las cuencas hidrográficas. Como lo demuestra la existencia de los proyectos del
Plan Hidrológico Nacional en España, o las presas de Narmada en India.
La
Conferencia considera que las Partes Contratantes deberían incrementar su
aportación al Fondo de Pequeñas Subvenciones (FPS) y al Programa Humedales para
el Futuro, potenciando el desarrollo eco-regional de estrategias de gestión de
humedales con enfoque nacional y transnacional.
Resulta esencial que los pueblos indígenas y las
Comunidades Locales, como sujetos con derechos fundamentales colectivos, deben
disponer de mecanismos de acceso directo a la gestión y uso responsable y
sostenible de los humedales, no pudiendo ser excluidos en la toma de decisiones
y la administración de sus territorios.
La Conferencia denuncia el incumplimiento de las
Resoluciones de la COP7 de San José (Costa Rica) y especialmente la Resolución
VII-21, párrafo 15 que especifica claramente que la Convención Ramsar se opone
al desarrollo insostenible en los humedales, incluyendo los Sitios Ramsar. Por
otro lado, la Resolución VII.8, sobre Comunidades Locales y Pueblos Indígenas,
reconoce el papel fundamental de estas comunidades, y pide a las Partes
Contratantes que apliquen las directrices para permitir su participación en los
procesos de toma de decisiones sobre los humedales.
Durante la COP-7 en Costa Rica, estas resoluciones
fueron aprobadas por los delegados presentes, por lo que deben ser aplicadas por
la Convención y las Partes Contratantes, y no ignoradas. Incomprensiblemente,
hemos visto en los últimos tres años, que las acciones que se han tomado son
insuficientes, incumpliendo las propias resoluciones. Pensamos que las Partes
Contratantes han fallado en poner en práctica sus propias resoluciones. Esto ha
llevado a la pérdida de seguridad y falta de confianza en el Proceso y en la
gestión de las Partes Contratantes.
Estas comunidades locales de base,
y poblaciones indígenas, que dependen de la salud de los ecosistemas de los
humedales cercanos, y que confían en ellos para sus vidas y sus sustentos, están
frustradas por el hecho de que las resoluciones que se aprobaron sean
simplemente ignoradas.
Hay
muchos ejemplos de actividades insostenibles que se llevan a cabo dentro de
Sitios Ramsar. La Conferencia ha analizado algunos ejemplos insostenibles de
acuicultura intensiva, como por ejemplo en el Golfo de Fonseca (Honduras), donde
las granjas ilegales de camarón se encuentran 100 has dentro de un Sitio Ramsar,
y se ha hecho muy poco para detener esta intrusión. Es el mismo caso que los
Sitios Ramsar en China, como Dongxaigang (Hainan Island) y At Zhanjiang
(Provincia de Gudngdong), que tienen el área más grande de manglares en China.
Las granjas destructivas de camarón amenazan a otros humedales de importancia
internacional como el de Sundarban en India y Bangladesh, o el de Cayapas-Mataje
en Ecuador, que han sido severamente degradados por las granjas de camarón y
otros desarrollos insostenibles.
La instalación de granjas de camarón ha ganado terreno a las áreas
productivas de agricultura, amenazando con destruir los cultivos básicos
tradicionales de Tailandia, Ecuador, India y otros países. Estas nuevas
tendencias amenazan la estabilidad de la producción alimentaria de los países en
vías de desarrollo, para la exportación de artículos alimenticios de lujo
destinados a los países ricos. Estos proyectos están financiados por el Banco
Mundial y otras Instituciones Financieras Internacionales.
Además, queremos denunciar el grave impacto ambiental generado sobre
los humedales por la pesca industrial, especialmente la que extrae recursos
marinos para la fabricación de piensos en América Latina. Del mismo modo,
denunciamos los impactos generados por la extracción de petróleo o gas en los
humedales, como por ejemplo el caso de la Reserva de la Biosfera Pantanos de
Centla y Laguna de Términos, en el sur de México.
Los
proyectos relacionados con la agricultura y otros sectores como la Presa
Narmada, en India, o los Pantanos bajos de Saemangeum en Corea del Sur, siguen
afectando seriamente a los humedales, y a las comunidades locales y poblaciones
indígenas que dependen de ellos.
Otros proyectos industriales o agrícolas, que incluirían
la desecación y relleno de humedales de importancia internacional como las
praderas submarinas o ecosistemas intermareales presentes en la Bahía de Isahaya
y Awase en Japón, o el Humedal Saemangeum en Corea del Sur, siguen en marcha,
pese al reconocimiento existente de sus valores económicos, sociales y
ambientales.
Por
todo ello, la Conferencia Mundial de ONGs y Comunidades Locales sobre Humedales
concluye lo siguiente:
1ª. Instamos a la Convención Ramsar a que desarrolle mecanismos para
poder presionar a las Partes Contratantes para el cumplimiento de sus propias
Resoluciones.
2ª.
Exigimos a las Partes Contratantes de la Convención de Ramsar la identificación,
catalogación y divulgación de los usos, relaciones y aprovechamientos
tradicionales procedentes o relacionados con los humedales y que condicionan el
estilo de vida de las poblaciones locales y, en ocasiones, la propia
supervivencia de los humedales.
3ª.
Instamos a las Partes Contratantes a la potenciación de programas continuos de
educación y comunicación públicos, dirigidos a todos los sectores sociales
implicados en la conservación de los humedales, sobre las funciones y valores de
los humedales y la necesidad de su uso sostenible.
4ª.
Exigimos que todas las partes contratantes pongan en marcha los Comités Ramsar,
con la participación de ONGs y comunidades locales, tal como estableció la
propia Convención. Es imprescindible la apertura de espacios de participación de
las ONGs y comunidades locales para la gestión de los humedales y el diseño y
ejecución de las políticas públicas que afecten a los
mismos.
5ª.
Proponemos, que en el plazo de cinco años, las Partes Contratantes de la
Convención, identifiquen todos los humedales existentes en los países firmantes,
así como los factores que garantizan su conservación.
6ª.
Instamos a las Partes Contratantes a la designación como humedales de
importancia internacional de todos los humedales que reúnen las características
técnicas para ello establecidos por la Convención. Especialmente la Conferencia
ha mostrado su apoyo para la designación de: los humedales de Villa María,
ubicados en Chimbote (Perú), por la alta biodiversidad que alberga como un
importante ecosistema en la zona costera peruana; el Lago de Chapala y su
cuenca, en México; y el Área de Protección de Flora y Fauna, Laguna de Términos,
en el estado de Campeche, sur de México.
7ª. Exigimos a las Partes Contratantes de la Convención Ramsar, que
procedan, en un plazo máximo de cinco años, a la identificación de todos los
humedales desaparecidos o en vías de desaparición, determinando asimismo las
causas de su destrucción. Exigir asimismo a las Partes Contratantes de la
Convención Ramsar que dispongan de los mecanismos técnicos, económicos y humanos
necesarios para su recuperación.
8ª.
Exigimos a las Partes Contratantes de la Convención Ramsar la aprobación y
cumplimiento de medidas legales que garanticen la conservación de todos los
tipos de humedales presentes en los países, y que eviten su transformación
directa para el establecimiento de tierras agrarias, para actividades urbanas,
industriales o de otro tipo, o que modifique indirectamente los factores que
determinan la existencia o el estatus de conservación adecuado de los
mismos.
9ª.
Urgimos a que la COP-8 reconozca y respete la importancia de los conocimientos,
valores, y tecnologías domesticas de las comunidades locales y pueblos
indígenas, así como sus esfuerzos para mantener un aprovechamiento sostenible de
los humedales para la obtención de alimentos y otros recursos. Este tipo de
aprovechamiento evita los impactos negativos de la industrialización
convencional de la producción alimenticia, y está en plena sintonía con el medio
ambiente.
10ª. Urgimos a la COP-8 a que haga cumplir el contenido
de la Resolución VII.8, relativa al papel de las comunidades locales y los
pueblos indígenas.
11ª. Instamos a las Partes Contratantes de la Convención
Ramsar al abandono definitivo de la construcción de grandes embalses y trasvases
entre cuencas, tales como los incluidos en el Plan Hidrológico
Español.
12ª. Exigimos a las Partes Contratantes de Ramsar, el
establecimiento de un garante legal que impida que se lleven a cabo obras
hidráulicas que afecten de forma directa o indirecta a la preservación de los
humedales.
13ª. Reclamamos la creación en todas las Partes
Contratantes de una Evaluación de Impacto Ambiental vinculante y específica para
los humedales. Esta Evaluación de Impacto Ambiental debe realizarse de forma
obligatoria a todos los proyectos y planes que puedan afectar directamente o
indirectamente a la conservación de los humedales.
14ª. Urgimos a la Convención de Ramsar para que
solicite a la ONU el desarrollo de directrices para reducir la corrupción
existente en determinados países, que facilita la destrucción de los recursos
naturales por parte de las compañías nacionales y
transnacionales.
15ª. Solicitamos que las Partes Contratantes
faciliten los recursos técnicos y financieros para el desarrollo eco-regional de
estrategias de gestión de humedales con enfoque nacional y transnacional a
través del Fondo de Pequeñas Subvenciones.
16ª. Instamos a las Partes Contratantes de la
Convención Ramsar que garanticen desde el sector público el abastecimiento, de
forma racional y sostenible, de agua potable a toda su población, al entender
que la disponibilidad de este recurso es un derecho fundamental de todo ser
humano. Las Partes Contratantes, además, deberán impedir en todo momento la
privatización, tanto del recurso hídrico y sus elementos ambientales asociados,
como del servicio de abastecimiento de agua potable.
17ª. Instamos a las Partes Contratantes de la
Convención Ramsar que promuevan la creación de una Agencia Internacional del
Agua bajo el auspicio de Naciones Unidas, que entre sus competencias esté la de
funcionar a modo de Tribunal Internacional, con la finalidad de solventar los
conflictos que existen en el mundo relacionados con la disponibilidad y gestión
del agua, tanto entre diferentes pueblos y estados, como en el interior de los
mismos. También debería controlar aquellos proyectos hidráulicos que cuenten con
la financiación del Banco Mundial y otras Instituciones Financieras
Internacionales, impidiendo que estas entidades financien aquellos que produzcan
una incidencia importante sobre el medio ambiente o las comunidades
locales.
18ª. Urgimos a la 8ª Conferencia de las Partes de la Convención
Ramsar para que implemente inmediatamente el párrafo 15 de la Resolución VII.21
emanada de la COP-7, para detener la acuacultura insostenible de camarón.
19ª. Del mismo modo instamos a la COP-8 para que
establezca garantías legales que impidan la sobreexplotación pesquera que afecta
a los humedales, y que también pone en peligro la seguridad alimentaria de las
comunidades locales y pueblos indígenas.
20ª. Urgimos que la Convención Ramsar demande al Banco
Mundial y otras Instituciones Financieras Internacionales que dejen de promover
y subvencionar proyectos de acuicultura de camarón y otras actividades
industriales en los humedales, así como descargas de desechos sobre los
mismos.
21ª. Denunciamos, el hostigamiento a que son sometidos
los miembros de numerosas ONGs, comunidades locales y pueblos indígenas, en
forma de campañas de difamación, amenazas, e incluso asesinatos por defender los
humedales y sus derechos fundamentales.
Por
otra parte, la Conferencia Mundial de ONGs y comunidades locales sobre humedales
ha analizado la problemática y amenazas existentes en todo el mundo sobre
diversos humedales:
- Manifestamos nuestra oposición a los grandes proyectos de represas
hidroeléctricas que se están construyendo en los departamentos de Carolina del
norte y Morasanz de El Salvador, los cuales destruirán los humedales y la
cultura natural de los pueblos, amenazando físicamente a los habitantes de
dichas zonas que se oponen a su construcción.
-
La Conferencia Mundial de ONGs y comunidades locales sobre humedales, hace un
llamamiento a las autoridades responsables de la administración de cuencas y
humedales de México para que de inmediato honre su firma en la Convención de
RAMSAR, y tome las medidas necesarias para recuperar el Lago de Chapala,
garantizando su volumen natural y la calidad de sus aguas, para estabilizar sus
ecosistemas y su uso sostenible.
-
La Conferencia se ha pronunciado contra la ejecución del proyecto hidroeléctrico
Boruca, pues afectaría el humedal de importancia internacional Terraba – Sierpe,
con graves consecuencias para su ecosistema y para el territorio indígena de
Curré, en Costa Rica. Además considera que la COP-8 también debería mostrar su
oposición a dicho proyecto.
- Solicitamos al Grupo de Examen Científico Técnico que acuerde
enviar una Misión al humedal de importancia internacional Cayos Miskitas, en
Nicaragua, para evaluar las concesiones para la explotación de hidrocarburos en
la zona.
-
Consideramos que la COP8 debería reconocer que los pantanos bajos y zonas
intermareales son extremadamente importantes en términos de biodiversidad, y por
la forma de vida de las personas, la productividad de las pesquerías y las
interconexiones bioregionales como las de Korea, Japón y China. La Convención
debe demandar a las Partes Contratantes la retirada inmediata de este tipo de
proyectos.
-
Solicitamos a la Convención Ramsar que nombre una comisión técnica de expertos
para analizar las denuncias presentadas por las ONGs y comunidades locales,
evaluando las agresiones ambientales a los humedales, conjuntamente con los
denunciantes.