31/01/02 EL NACIONAL
Venezuela recuperará el próximo sábado para
su patrimonio una colección de 112 fósiles de animales que vivieron hace seis
millones de años sobre la Tierra y que permaneció olvidada en Estados Unidos las
últimas tres décadas.
Los restos paleontológicos llegarán al aeropuerto internacional
de Maiquetía procedentes de Boston después de tres años de negociaciones con la
Universidad de Harvard. Esa institución académica ha tenido en depósito la
colección para su estudio desde que fue descubierta en 1972 en el desierto
venezolano de Urumaco, en el estado de Falcón, noroeste de Venezuela.
En la colección se incluye un caparazón de la especie de tortuga
más grande hallada en el planeta, la "Stupendemys geographicus", de 2,30 metros
de largo, que hasta hace pocos años fue el mayor localizado en el mundo y por
eso recibió los honores de ser incluido en el Libro Guinness de los Record.
También hay cráneos de cocodrilos gigantes, huesos de animales
desaparecidos, peces fosilizados y muchos otros ejemplares descubiertos entre
las 176 piezas halladas en Urumaco por un grupo de investigadores de Harvard,
con apoyo del Museo de Ciencias de Caracas -a cuyos fondos irá a parar la
colección- y de la Universidad Central de Venezuela.
En 1972, las instituciones participantes en la expedición
acordaron que los ejemplares serían trasladados al Museo de Zoología Comparada
"The Agassiz Museum" de la Universidad de Harvard para su debida identificación
y clasificación, antes de devolverlos a Venezuela, pero ese préstamo cayó en el
olvido.
El director del Museo de Ciencias de Caracas, Sergio Antillano,
después de clasificar e inventariar los fondos de la institución, descubrió que
nunca habían recibido el bien patrimonial llevado a Estados Unidos.
Antillano dijo hoy en una rueda de prensa que esta "operación
rescate" se inserta dentro de un programa de acciones mucho más amplio y
ambicioso que desarrolla la institución desde hace seis años para la
recuperación, ampliación y divulgación del patrimonio científico nacional.
Para Antillano, la repatriación de los fósiles de Urumaco es un
acontecimiento que fortalece el sentido de pertenencia de lo venezolano y
revaloriza el patrimonio científico nacional. Según Roger Woods, participante en
la expedición de 1972, y Eugene Gaffney, especialista en tortugas del Museo
Nacional de Historia Natural de Nueva York, "los ejemplares -que datan del
período Terciario- constituyen, por su antigüedad y el carácter único de algunas
piezas, un bien de inestimable importancia científica para conocer el pasado y
orientar futuras investigaciones".