Articulo de
Opinión.
Centro de Reciclaje Los Curos
CERCUS:
El reciclaje en la
comunidad.
Diana
Lobo
A mediados de 1991 se comenzó a trabajar un
anteproyecto para el aprovechamiento de los Desechos Sólidos en la Urb. J. J.
Osuna Rodríguez Los Curos (Mérida - Venezuela). Esta comunidad de 25.000
habitantes forma el núcleo principal de la Parroquia J. J. Osuna Rodríguez, la
segunda en extensión y población del Municipio Libertador del Estado Mérida.
Esta comunidad presenta un deterioro ambiental, con las claras manifestaciones
de un inadecuado sistema de manejo y disposición de los desechos domiciliarios,
que es causa de problemas para la salud y el
ambiente.
En Marzo de 1992 se inició
formalmente el Centro de Reciclaje los Curos CERCUS, una idea con el objetivo
primordial de investigar y promover el aprovechamiento de los desechos sólidos a
través de la participación comunitaria, la educación ambiental y la autogestión.
La Cátedra de la Paz y la ahora
extinta Coordinadora de Grupos Los Curos fueron los iniciadores de CERCUS: con
muchos voluntarios, iniciándose el trabajo con el almacén de acopio, local donde
las personas llevan sus materiales secos, limpios y separados. En CERCUS son
pesados o contados, valorados para ser cancelados en efectivo. Es importante
señalar que muchas personas donan sus materiales. Hasta ahora se ha trabajado en
la recuperación y aprovechamiento de desechos inorgánicos, principalmente papel,
cartón, envases de vidrio, aluminio y algunos
plásticos.
El inicio de CERCUS estuvo
orientado por cuatro objetivos específicos que son:
1.
Promover el
Desarrollo Local Sustentable con la comunidad a través de la Educación
Ambiental.
2.
Desarrollar
alternativas económicas a través de la recuperación para el reciclaje y reuso de
los desechos sólidos.
3.
Investigar y
promover el aprovechamiento de los desechos sólidos, con participación
comunitaria.
4.
Fomentar en
la comunidad la capacidad de comprender autogestionariamente el problema del
tratamiento inadecuado de los desechos sólidos.
El proyecto inicial en sus
aspectos operativos fue avalado por un crédito para la dotación básica del local
(70m2), un escritorio con su silla, un peso romana, baldes plásticos, papelería
de oficina, recibos, dos extintores y un fondo para pagar los materiales a la
comunidad, el monto del crédito fue de 150.000 Bolívares para devolverlo en 30
meses, con sus respectivos intereses. Este crédito fue otorgado por AUGE, un
programa de autogestión económica del grupo Social CESAP, al comienzo solo el
almacenista recibía un bono quincenal por el tiempo invertido, cinco tardes en
la semana, el resto del equipo era voluntario. Actualmente cuatro personas
conforman el equipo dedicado al proyecto. Un almacenista, un conductor, un
responsable - promotor, y una persona dedicada a los aspectos administrativos.
Estas personas están con dedicación parcial, compartiendo esta actividad con
acciones en otros programas o proyectos de la Cátedra de la Paz. Alrededor de
ellos hay un voluntariado que apoya esta y otras acciones comunitarias en Los
Curos.
Desde CERCUS se dispuso de
promotores voluntarios, previamente capacitados, iniciando una campaña educativa
en los distintos sectores de la comunidad: encuestas, notas de prensa,
boletines, altavoces, reuniones y charlas sirvieron para informar a la
comunidad, algunas casas comerciales se incorporaron donando sus materiales,
oficinas publicas y departamentos universitarios; las escuelas organizaron
campañas de recolección clasificando los desechos, algunas de las cuales son
permanentes hasta la actualidad, la práctica diaria interesó a organizaciones e
instituciones, profesores, investigadores, estudiantes universitarios y
liceístas, quienes se acercaron a proponer nuevas practicas, a dar sugerencias,
a buscar colaboración en sus estudios, que significaron nuevos aportes para
CERCUS.
En 1994 la acción educativa
recibió un aporte de la Fundación Polar, dirigido a fomentar en la comunidad la
conciencia y la practica del reciclaje y el reuso manifestándose en la
incorporación de nuevas familias a la acción del Centro de Reciclaje en la
comunidad, permitió la publicación del material. Para fortalecer la acción en
1995 se recibió una donación de la Embajada Británica en Venezuela destinada a
la adquisición de un vehículo de carga, que optimizara la operatividad de la
acción de CERCUS con este camión se creo la ruta de Reciclaje por la ciudad de
Mérida. Desde el Municipio Libertador de Mérida CERCUS ha recibido la distinción
de Ciudadano Meritorio en Junio de 1993 y el premio Municipal de la Conservación
en Junio de 1996.
La existencia del Centro de
Reciclaje Los Curos CERCUS también presenta dificultades para su continuidad y
mejoramiento, lo cual lleva a plantearse nuevas metas También se tiene claro que
un centro de acopio comunitario con toda la acción que genera no es la solución
definitiva al problema que plantea el inadecuado tratamiento de los desechos
sólidos en las comunidades de Mérida.
El Centro de Reciclaje Los
Curos ha obtenido logros importantes que puedan resumirse
en:
- Se han recuperado 160 toneladas de desechos sólidos
aprovechables
- Se cuenta con una planta física y operativa adecuada para
la acción, con posibilidad de ampliación. Un local comunitario en calidad de
alquiler, pesos, mobiliario, herramientas y el equipo básico para continuar
desarrollando la acción. Se incluye un vehículo de
carga.
- 150 familias llevan mensualmente sus desechos a CERCUS;
algunas las donan beneficiándose social y ambientalmente, otras también se
benefician económicamente.
- Por concepto de comercialización del material recuperado
han ingresado a la comunidad 6.000.000 Bs. Es decir esta cantidad ha ido a parar
a los bolsillos de las familias que hacen la labor del reciclaje en su casa y
para los gastos operativos del proyecto. Se intenta guardar una proporción de
cincuenta por ciento para cada cual, familias y
CERCUS.
- 70 distintos destinos han tenido los materiales
recuperados, entre: plantas recicladoras,
industrias, talleres, artesanos, microempresas y productores de alimentos
y bebidas. Aunque algunos son esporádicos, la mayoría permanece en contacto
permanente con CERCUS. Estos empresarios son tratados bajo una política de
atención al cliente, puesto que son uno de los capitales intangibles más
valiosos, ya que le dan viabilidad económica al
proyecto.
- 30 Instituciones educativas han participado en las
campañas de reciclaje. Cada campaña tiene un componente educativo y un aspecto
práctico, es decir, que los muchachos reciclan los materiales en sus casas y
escuelas, a la vez que aprenden.
- Más de 50 instituciones, centros de investigación y
organismos, públicos y privados, se han asesorado en CERCUS. Se acercan a buscar
información básica sobre el tema, a buscar ideas para nuevos proyectos, datos
estadísticos, investigaciones académicas, asesoría técnica y social, en fin
CERCUS les sirve de referencia para su formación o la puesta en práctica de sus
conocimientos.
- 123.500 envases de reuso han sido recuperados. Estos
envases de vidrio en su mayoría se destinan a la pequeña y mediana industria de
alimentos y bebidas de la región andina.
- El papel recuperado (60,5 Toneladas) equivale a la madera
de 1028 árboles en edad madura para producir pulpa de papel. Podemos decir que
CERCUS cuenta con un bosque, o que lo ha salvado.
- Más de 1350 infantes han visitado a CERCUS en charlas
formativas. Vienen de escuelas, grupos ecológicos y comunitarios, planes
vacacionales o acompañando a sus padres. Estos niños y niñas serán los
protagonistas del cambio de actitud necesaria para implementar la cultura del
reciclaje.
- Se han impartido numerosas charlas y talleres referidas al
aprovechamiento de los desechos sólidos y de Educación Ambiental, por varios
municipios del estado y en otras ciudades del país.
- Se han distribuido 8000 trípticos educativos. Contentivos
de información obtenida con el desarrollo del proyecto, como apoyo a la acción
formativa de CERCUS.
- La inversión de 150.000 Bs del crédito con que inició el
proyecto, ha logrado movilizar cuarenta veces, esa cantidad sólo por concepto de
comercialización, a lo que hay que sumar las donaciones de otros entes y el
aporte del voluntariado al proyecto, en función de la comunidad. Aunque CERCUS
ha recibido siempre un apoyo externo a la autogestión, estas cifras que es de
todas maneras más rentable y productivo el aprovechamiento de los desechos que
seguir enterrándolos o quemándolos.
- Se han diseñado estrategias educativas y de acción para la
promoción comunitaria del tema. Se cuenta con métodos y técnicas para
desarrollar una acción similar en nuevas comunidades. La práctica enseña y
proyecta nuevas ideas.
En definitiva son muchos los aportes personales y los
esfuerzos grupales. Esas horas de trabajo, camiones que cargar, libros que leer,
cuentas que sacar, dinero que rendir, compromisos adquiridos que cumplir,
costales que llevar, botellas que limpiar, personas que conocer, sitios por
conocer, situaciones difíciles que resolver, ratos alegres que vivir, ventas
exitosas, deudas que cobrar; y muchas otros eventos que significan a diario un
aprendizaje a quienes hemos compartido esta experiencia comunitaria. Debemos
decir que el aporte de quienes se han involucrado, los que están y los que han
estado, es la razón de la subsistencia de CERCUS en el
tiempo.
Este proyecto, por ser una iniciativa
comunitaria, continuada y generadora de ideas ha sido reconocida con su estudio,
reseña y replica en otras partes del país. Se reconoce el Centro de Reciclaje
Los Curos como uno de los primeros centros de acopio comunitario en el país, y
ha servido de experimento y prueba para proyectos más ambiciosos como la
propuesta de la Universidad de Los Andes para los municipios del estado.
Investigadores nacionales e internacionales han reseñado el trabajo de CERCUS.
También se puede señalar la proyección que ha recibido la comunidad hacia el
país, mediante su reconocimiento de comunidad organizada y por el aprendizaje
que supone el haber estado vinculado al proyecto para profesionales y líderes
comunitarios, tanto de Los Curos como de otros lugares. Desde periódicos locales
hasta revistas nacionales y extranjeras ha mostrado esta iniciativa como
motivadora y positiva.
Esta estrategia de
desarrollo local sustentable ha generado importantes experiencias para ampliar
el campo de acción, tanto cualitativa como cuantitativamente. Quedan pendientes
nuevas metas; hay ideas pero faltan recursos para implementarlas. La
dificultades son cosas de todos los días, la diferencia para el éxito esta en
que cada día logremos un triunfo sobre la desesperanza y el letargo que embarga
a los perdedores.