Aceleradores del metabolismo
pueden causar trastornos orgánicos
Métodos
mágicos y 'naturales' para adelgazar amenazan la salud
Hierbas quema-grasa
sospechosas de estar 'adulteradas' con laxantes o diuréticos
NELIDA FERNANDEZ ALONZO -
EL UNIVERSAL -
Caracas,
martes 12 de junio, 2001
Es un día lunes en una tienda naturista de
Caracas: 'Señora, necesito un producto que me haga rebajar rápidamente porque
tengo que ponerme un vestido este sábado y no me entra', dice una clienta. La
señora contesta: 'puedes tomarte el Quiebrabarriga, que es totalmente natural,
rebajas rapidito y sólo te cuesta 3.000 bolívares'. Un poco escéptica _el nombre
no le parece muy confiable_ le pregunta por alguna otra cosa. 'También puedes
probar con éste que es importado y es lo mejor que tenemos aquí', entonces
enseña un producto: 'Este te sale en 20 mil', dice la vendedora. Menos
convencida, la potencial compradora le pregunta si el producto le producirá
malestar estomacal, 'no', dice la mujer, 'ese te acelera el metabolismo, si
sufres de la tensión, mejor no lo lleves'. Entonces la chica prefirió no comprar
nada.
Ahora resulta que las hierbas no sólo sirven
para aliviar la acidez o conciliar el sueño gracias a una infusión casera,
actualmente se consiguen en envases bien etiquetados como adelgazantes o
reductores naturales. Tampoco es necesario visitar un mercado popular o una
tienda de brujerías para conseguirlas, porque hasta en los estantes de las
farmacias se comercian como si se tratara de un quitaesmaltes para uñas.
Pues la realidad de estos productos
naturales supuestamente inocuos es que pueden producir daños colaterales en el
organismo y que además de hacer perder kilos a quienes los ingieren _ya sea
acelerando el metabolismo o induciendo la evacuación_ pueden causar daños al
hígado y al corazón.
Kilos de
charlatanería
'Muchas de estas hierbas están adulteradas,
a veces intencionalmente, con diuréticos, hormonas o laxantes, mezcla que puede
resultar peligrosa. Otras tienen plomo o mercurio, contaminación que viene dada
porque en el país de origen tienen estas sustancias en los ríos o en las
tierras', explica Vicente Lecuna, jefe del Servicio de Gastroenterología del
Hospital Universitario de Caracas.
No obstante, Lecuna aclara que las hierbas
pueden ser buenas si se saben usar. 'El 70% de los médicos alemanes usan
hierbas, pero las cultivan ellos mismos en condiciones sumamente purificadas',
comenta, y advierte que el problema de la llamada medicina alternativa 'es que
es como un saco donde cabe todo, charlatanería, abuso y cosas buenas'.
El especialista también aprovecha para
prevenir acerca de los astrólogos de televisión que indican recetas con plantas
e infusiones que en apariencia no hacen nada pero que igualmente pueden acarrear
daños: 'eso es mentira'.
Si es falso, caben las preguntas de por qué
se permiten, por qué se producen y por qué se venden. Todo tiene una explicación
que obedece a las leyes de la compraventa. 'Detrás de esto lo que hay es un gran
mercado', dice Lecuna y explica que la obesidad es un problema muy difícil de
solucionar y las personas que la padecen se desesperan y son fácil blanco de
cualquier promesa curativa, por insólita que esta sea.
Al referirse a las bondades de algunas
hierbas, el especialista dice que en ninguna de las estudiadas se observan
propiedades quema grasa o que hagan que el consumidor pierda peso. 'Algunas
pueden actuar como antidepresivos o ayudan en la demencia, sin embargo, muchas
son tóxicas y causan problemas al hígado, como la famosa Valeriana'.
Sin
control
En Venezuela no se controla la venta de
estos productos y muchos médicos no les preguntan a sus pacientes si consumen
algún producto 'naturista' ya sea para adelgazar o para cualquier otro complejo
o malestar.
En el Ministerio de Salud y Desarrollo
Social explican que muchas de estas hierbas envasadas no pasan por la
supervisión del ente gubernamental y advierten que estas tiendas expendedoras se
exponen a un decomiso y cierre del laboratorio en caso de que se produzcan en el
país. De acuerdo con un funcionario del MSDS que no quiso ser identificado, los
locales donde se venden estas hierbas deberían exigir a los proveedores que los
productos estén aprobados por el organismo, tengan 'fecha de entrada y de
registro' y explicó que aunque la idea es que todos estos artículos sean
registrados, muchos se venden sin certificación.
Existe una resolución que regula productos
naturales que yace en la Gaceta Oficial número 35.837.
Ramas
a la ligera
* Centella
asiática. Se ofrece en tiendas naturistas como reductor de kilos. La
saponina _compuesto activo_ tiene efecto cicatrizador. En cualquier caso, se
recomienda consultar a un especialista antes de usarla.
* Alcachofa. Algunos locales la ofrecen en cápsulas
como adelgazante. Se puede comer y como efecto medicinal pudiera servir como
regeneradora de las células hepáticas.
*
Gingseng. En la cultura milenaria china se ha
utilizado como tranquilizante, para aclarar la mente y lograr la longevidad, aún
no están claros sus verdaderos beneficios y se presume que su ingesta prolongada
pudiera resultar cancerígena.
* Ginko Bilova. 'Puede ayudar a atacar la demencia y mejorar la
capacidad de caminar en las personas con claudicación intermitente', dice
Lecuna.
Pedro Rivas, presidente de la Organización
Nacional de Trasplantes de Venezuela, explica que para que estos productos
salgan a la venta deberían tener estudios de 'farmacocinética y
biodisponibilidad', que determinen qué tiene cada artículo y lo que produce,
además de la capacidad de distribución en el organismo. Asimismo, se deberían
evaluar las diferencias interraciales e intergenéricas de sus efectos y la
variabilidad entre las edades.