
Colección Gandula
de poesía brasileña contemporánea coedición de
Grumo y editorial VOX de Bahía Blanca.
Presenta
Casi un arte - Paula Glenadel.- Traducción:
Rodrigo Labriola
Presentación: Sábado 27 - 19hs / CIA Centro de
Investigaciones Artísticas
Tucumán 3758 / CABA

3 poemas de Casi un Arte
Piedra y planta
entonces, ciega yo sigo
ciega pero a salvo
de la piedra por la piedra
todavía falta saber
de qué por quién
o de quién por qué
en la invidencia sigo
deseando que la planta
parta de la piedra
Entreacto
crío ratas
como matas
beso sapos
cato cato cato
nada hago
agua bebo
latas pego
tapo tapo tapo
limpio platos
chupo clavos
bailo frevo
hiervo hiervo hiervo
Planes
algunas semillas de Australia
presienten el fuego
y se preparan para sobrevivir
el fuego está previsto en sus planes,
si es que los tienen.
él viene a abrirlas para que germinen
en el bosque devastado
entonces pueden crecer sin disputarse
el sol con los enormes árboles
ni la tierra con las gruesas raíces
esto me lo contó alguien una vez
era suizo
estaba leibniziano
Paula Glenadel nación en Río de Janeiro en abril de
1964. Es profesora de Literatura Francesa en la Universidad Federal de Niteroi
(Brasil). Además de textos críticos en el área de literatura, publicó poemas en
la revista de poesía Inimigo Rumor (Río de Janeiro), en el Segundo Caderno del
diario O Estado de São Paulo, y en algunas antologías en Brasil y en el
exterior. Es autora de los siguientes libros de poesía: A vida espiralada.
Editora Caetés, 1999; Quase uma arte. Editora Cosac Naify/7Letras, 2005; A fábrica
do feminino. Editora 7Letras, 2008 (semifinalista del Premio Portugal Telecom).
Casi un arte es su primer libro de poesía traducido al castellano.

Colección Gandula
de poesía brasileña contemporánea coedición de
Grumo y editorial VOX de Bahía Blanca.
Presenta
20 poemas para tu walkman – Marilia García
(traducción de Diana Klinger, Paloma Vidal y Mario Cámara)
Presentación: Sábado 27 - 19hs / CIA Centro de
Investigaciones Artísticas
Tucumán 3758 / CABA
3 poemas
II. rue de fleurus
desde aquella ventana, el cartel en el lado
opuesto de la calle con las iniciales de g.
s. no oye nada muy bien, pero aún
debe esperar el frío muy fino, tomar el
tren la lluvia el cordón de la
vereda contornear el jardín – y allí el
vendedor
de crepes había cerrado el negocio. el libro
empieza
con una pregunta al azar sobre esta
ciudad, pero lo principal ni lo supone –
cómo llegar al punto de encuentro
con el film empezado. todas las veces
perdía la estación y trazaba rutas
diversas (intenta explicar cambiando de cabinas
y llamando diversas veces por
día, en desplazamientos
aéreos.)
Un día blanco
sostiene el borde de la mesa con
el pelo rojo vamos
a polonia
a ver la nieve
andaba de tal modo dispersa
nunca conoció a la familia con ganas
de frío. siempre aquel
movimiento
necesito leer otras
cosas la frase cortada
en el mismo punto rendija de luz
donde habla una carcajada
asomada a la ventana cuando lo ve
del otro lado de la calle buscando el
castillo.
pelo corto, sostiene la punta
de la mesa y mastica las sílabas
en la lengua.
De dentro de la caja verde
I
como el surco de la caligrafía
llegando todas las semanas. como
el pulóver colorado
que viste ahora (no era
la vuelta a casa, un consuelo, ni
la limosina negra vino a buscarla
de otro poema)
una noche que se extiende
con los ruidos de un sueño
ausente – y si te levantás en un
entresueño, parece otra ciudad, cuando llega
la luz del día antes de tiempo – no sé
en qué mapa quedó leeds
en aquel paseo de manos dubitativas
alrededor de la plaza.
II
con un vestido arrugado en el pico
de la montaña (la aguja de los segundos
borronea el silencio): – no soy
felice, sonreía con calma, con los dedos
trémulos – es una relación
virtual, vibro como esta ruta – ojos de gato
en la oscuridad concreta, del asiento
de adelante ni sospechaba la persecución. ni
sospechaba las voces que vienen del océano
(¿algún barco aún aguarda
en la ensenada?)
III
sobre la valija
la caja de té (no el deseo
de contar los aviones partiendo
en la pista sobre el mar) en el billete estaba
impreso
el retorno (¿tenemos los días contados? ¿adónde
va? su voz de
neblina en la oscuridad)
Marília Garcia nació en Río de Janeiro en 1979. Es
autora de los libros 20 poemas para tu walkman (Cosac Naify, 2007) y Engano
geográfico (7letras, 2012), y coedita la revista Modo de usar & co.
(revistamododeusar.blogspot.com). Tradujo para el portugués autores como
Gertrude Stein, Emmanuel Hocquard y Kenneth Koch y, actualmente, es profesora
del Centro de Letras y Artes de la UNIRIO.