NCeHu
144/07
Estrategia conjunta de Estados
Unidos y España en América Latina
Héctor José Arenas
A.
Le Monde Diplomatique , Colombia
En la primera semana de diciembre,
Bernardino León, número dos del Ministerio de Relaciones Exteriores español,
cenó con Thomas Shanon, subsecretario de Estado estadounidense para el
hemisferio occidental. Dialogaron sobre “la forma como España puede ayudar a
Estados Unidos a fortalecer su influencia en América Latina”.[1] León
señaló: “Estados Unidos y España son dos actores muy determinantes en la región,
con grandes inversiones y relaciones políticas profundas que deben implicarse
más en un momento difícil, uno de los más complicados de los últimos 50 años.
Esta cooperación tiene un fuerte valor añadido”. [2]
La alineación de la política exterior
española con la estadounidense sobre América Latina es notable desde el
desencuentro por el retiro de las tropas españolas de Iraq, ordenado por
Rodríguez Zapatero, cumpliendo con su promesa como candidato. Los dos gobiernos
‘encapsularon’ sus diferencias en Iraq para avanzar en una cooperación fluida en
su acción sobre América Latina[3]. Ahora los
encargados de la política sobre la región se comunican hasta dos veces por
semana, “según la temperatura política” en la región. Antes de navidades se
programó una reunión en Washington con Nicholas Burns, Subsecretario de Estado
para Asuntos Políticos, a fin de trabajar sobre la agenda de la próxima visita
de Condolezza Rice a Madrid.
Las
políticas imperiales del “Proyecto para un Nuevo Siglo Usamericano” que fundan
la supremacía en la fuerza y las acciones derivadas de la Estrategia Nacional de
Seguridad anunciada en septiembre de 2.002 han afectado la posición dominante de
Estados Unidos en el control ideológico que ejerce desde hace décadas, han
acelerado la erosión del “poder suave” estadounidense fundado en sus estrategias
mediático-culturales, y han desnudado el estrangulamiento economico ejercido con
la instrumentación de instancias internacionales con apariencia de neutralidad
(FMI, Banco Mundial, BID, OMC, OEA) para determinar políticas económicas
nacionales y decisiones estatales en lo internacional, así como la actuación
camuflada a través de estados gobernados por élites sometidas o
manipulables.
En
América Latina estalló a fines de los 90 la rebeldía que provocó la
intensificación hasta el paroxismo, durante una década, del saqueo despiadado.
La respuesta del gobierno estadounidense privilegió el despliegue militar, el
intento de configurar fuerzas multinacionales de intervención en Colombia , el
crecimiento de las FOL (Forward Operating Locations) en la región, las acciones
encubiertas de desestabilización y la continuidad de la hipócrita ‘Guerra contra
las drogas y el terror’. Este proceder catapultó el rechazo a la estrategia de
anexión regional con base en asimétricos tratados de ‘Libre Comercio’ a favor de
sus megacorporaciones. La larga historia de expoliación, siembra de divisiones y
agresiones de Estados Unidos en Latinoamérica afloró también a la conciencia
colectiva al hacerse públicos los reales objetivos de la ocupación de Iraq y al
contemplar la resistencia indoblegable que surgió. Por esto, ahora, análisis de
influyentes “tanques de pensamiento” estadounidenses cuestionan la exclusividad
de las “políticas duras”, buscando no simplificar lo complejo en aras de obtener
mejores resultados en la tarea de contener y en lo posible desintegrar el
formidable movimiento de soberanía y unidad política que emerge en la
región.
Se
trata de que con el valor agregado de la cooperación en la acción exterior de
Estados Unidos y España se evite ahondar la alteración en el balance de poder en
la región que suscita la Revolución Bolivariana en favor de los pueblos. Esto
exige contrarrestar la percepción de que Estados Unidos se interesa en aislar y
desestabilizar al gobierno venezolano, lo mismo que circular entre la opinión
pública internacional la idea de que Estados Unidos quiere normalizar sus
relaciones con Venezuela y el presidente Chávez se resiste a un avance en tal
sentido.
Se
trata de evitar a toda costa que se expanda en Venezuela y América Latina el
conocimiento de otro universo de sentido: las ideas que muestran en la práctica
que hay otro mundo posible, aquí y ahora.
Ideas
sencillas que revelan cómo la soberanía nos permite la vida y la dignidad negada
por la subordinación impuesta con la cooptación de élites, el engaño , el
chantaje y violencia. Ideas que señalan no sólo que es posible sino que además
arroja infinita riqueza la vida social fundada en la cooperación, el cuidado de
los bienes comunes y la desprivatización de sectores estratégicos, en lugar de
aceptar el imperio de las reglas de juego de las megacorporaciones. Ideas que
revelan el reconocimiento prioritario de los derechos de los aniquilados,
oprimidos y excluidos en Venezuela, y que es posible cesar la prolongada y
descomunal violencia ejercida sobre las mujeres, los pueblos indígenas y
afroamericanos, y sobre todas las otras formas de vida con quienes compartimos
el habitar en el planeta.
Ideas
que privilegian el cuidado de la tierra y sus equilibrios, como una común e
impostergable tarea que comienza con la puesta en marcha inmediata de una
revolución energética; ideas que exigen el cese inmediato de la farsa sangrienta
de la ‘Guerra contra el narcotráfico’ y el despegue de una acción internacional
conjunta que acabe ya con la desbordada corrupción que sostiene el tráfico y
destroza decenas de miles de vidas humana y entornos naturales en los países
consumidores y productores, mientras enriquece la banca estadounidense y
europea. Ideas que alientan el respeto a formas de racionalidad diferentes de la
mirada nihilista occidental y el vacío insuperable que comporta. Ideas que
muestran el perfeccionamiento espiritual y cultural como horizonte de sentido,
en vez de la inevitable violencia que arrojan las reglas de juego de la
propiedad individual sin límites y la competencia feroz. Ideas que revelan los
caminos para la desarticulación del sistema de necesidades ficticias, de la
persecución frenética de simulacros de felicidad y del consumismo
patológico.
Nueva estrategia dirigida a aislar y colapsar la Revolución
Bolivariana
El Informe “Viviendo con Hugo, política de
Estados Unidos hacia la Venezuela de Hugo Chávez” [4]
recomienda ignorar la que llama “estridente retórica” de Chávez y plantea
“evitar demonizarlo”, porque enfrascarse en esta vía significa ascenso de
la imagen positiva de Chávez en la región y declive en la credibilidad del
gobierno estadounidense. El Informe identifica en la capacidad de Chávez para
ofrecer mejoras sociales concretas a la población excluida en Venezuela la clave
de su éxito regional. Los logros sociales atraen a los pueblos latinoamericanos
frente a gobiernos neoliberales o nominalmente de izquierda que, por procurar
condiciones macroeconómicas de estabilidad a las corporaciones y los poderes
económicos locales, condenan a la mayoría de sus comunidades a los infiernos de
miseria y la desesperación.
El
Informe propone examinar las debilidades de Chávez y pensar estratégicamente
sobre el camino que abre su reelección. Llama a privilegiar la acción exterior
conjunta sobre la Revolución Bolivariana y el aislamiento de la misma en el
contexto inmediato. En especial, con la influencia sobre Brasil, Argentina,
México y Chile.Colombia ni siquiera se menciona porque por ahora funciona como
una especie de portaviones estadounidense en la región.
La
segunda semana de febrero de 2.007 Nicholas Burns y Tom Shanon viajaron a Brasil
y Argentina con el objetivo señalado. Propusieron una nueva relación con Brasil
y con Argentina en torno a los biocombustibles que disminuya la dependencia del
petróleo poseído por países no subordinados al imperio: Venezuela e Irán. Sin
embargo, Burns reconoció que por el momento no pueden hacer nada con relación a
las cláusulas proteccionistas que impiden el acceso de más etanol brasilero al
mercado estadounidense. No hubo una palabra sobre la comunicación presentada por
más de 140 organizaciones mundiales (www.rebelion.org 10.02.07) pidiendo a la Unión Europea renunciar al uso de bio
carburantes por la vulneración de derechos humanos , los destrozos de la
biodiversidad y la no reducción de la emisión de gases que producen efecto
invernadero.Tampoco hubo una sola palabra sobre las masacres y los brutales
desplazamientos de comunidades afrocolombianas y campesinas realizados por
fuerzas paramilitares en el noroccidente de Colombia y la subsiguiente expansión
de empresas a de cultivos de palma de aceite para procesar biocarburantes , en
las que tienen acciones jefes de esas fuerzas.
Después de la reunión en Brasil y pese a la calculada ambigüedad
de las declaraciones de Burns con relación a las conversaciones sobre Venezuela
dirigida a sembrar dudas y dividir los países latinoamericanos, en las
declaraciones oficiales de la cancillería brasilera se negó el papel de Brasil
en la tarea de auxiliar al imperio en el intento de aislar a Venezuela y en el
papel de mensajero del gobierno de los EEUU , y se exhortó en cambio a un
dialogo directo entre el gobierno estadounidense y el venezolano. Como hay una
tradición en asuntos estatales que indica : “Nunca te creas nada hasta que lo
nieguen oficialmente” , lo mejor será esperar los próximos y decisivos meses
para observar las actuaciones concretas en el escenario de los avances en el
proceso de integración y soberanía, y en la continuidad en la profundización en
el socialismo.(Ver el extraordinario trabajo del profesor Luiz Alberto Moniz
Bandeira sobre política exterior brasilera y latinoaméricana).
El
Informe de Council of Foreign Relations señala que “siempre que Chávez no dé
pasos que amenacen en lo sustancial los intereses de Estados Unidos en América
Latina” (por ejemplo, si Chávez enmienda la Constitución para cambiar el período
presidencial, de modo que pudiera ser electo indefinidamente )–, es mejor
mostrar que se quiere trabajar con Venezuela sobre bases pragmáticas, en temas
como “guerra contra narcóticos y política energética”.
La energía fósil, en su fase final, es la
obsesión principal para el gobierno de los Estados Unidos, cuando toda la
movilidad demencial, la alimentación y su “forma de vida” se basan en un
despilfarro dependiente del acceso continuo y creciente a las fuentes que quedan
y se agotan vertiginosamente. Circunstancia a la que se añade la presencia de
China en la región compitiendo por el petróleo y otros invaluables recursos. Las
principales reservas mundiales de energías fósiles están ahora en
Venezuela[5], junto a
muy significativos y aún ocultos yacimientos en otros lugares de la zona
andina[6].
La
mención de la “Guerra contra narcóticos” hace parte de la continuidad de la
hipócrita doctrina que el gobierno de los Estados Unidos utiliza como propaganda
interna que ‘legitima’ sus intervenciones y sirve al control sobre aparatos
policiales, judiciales y ejecutivos en la región andina, a tiempo que ofrece a
la opinión publica internacional la ficción de librar una lucha antinarcóticos y
el lavado de activos. En Colombia , calificada en la segunda mitad de los años
noventa como el principal problema de Seguridad Hemisférica , se han ejecutado
durante seis años inclementes fumigaciones coordinadas por la DEA y contratadas
con la empresa Monsanto , y se han destinado más de cinco mil millones de
dólares –la mayor parte de los cuales ha sido absorbida por megacorporaciones
militares estadounidenses- a un bárbaro proceso de reingeniería social y control
regional en el que se ha aniquilado o desterrado la población colombiana no
funcional al trazado corporativo energético y estratégico imperial. El programa
sobre Colombia supuso la adopción plena de un paquete de medidas para entregar a
la voracidad de las corporaciones y al orden económico unipolar, sectores
enteros de la economía colombiana y fue presentado a la opinión pública como
Guerra contra el narcotráfico: Plan Colombia, con el objetivo principal de
“reducir en un 50% el cultivo, procesamiento y distribución de la
droga”.
Después de seis años los cultivos, el procesamiento y la
distribución no solo no se redujeron a la mitad, sino que se expandieron, los
laboratorios de procesamiento de cocaína prosperaron y su oferta sigue
satisfaciendo la multiplicada demanda europea y estadounidense.
El Plan Colombia fue
elaborado y presentando con extrema urgencia en septiembre de 1999, después de
que el 6 de diciembre de 1998 aconteció el triunfó de Hugo Chávez en Venezuela.
Una victoria inadmisible - en un país estratégico por su energía fósil - para
los encargados imperiales de la región que desde ese entonces ya consideraban a
Chávez como un líder no manipulable por el gobierno estadounidense.
En febrero de 2.007,
Condolezza Rice presento al Congreso estadounidense la fase II del Plan Colombia
y para el mes de marzo de este año se anunció la visita de Bush a su mayor
aliado regional: Colombia, dentro del programa de visitas a los principales
gobiernos amigos en la región: México, Guatemala, Brasil y Uruguay.
Con
el Plan Colombia se agudizó el proceso de control y fusión de algunas de las más
altas instancias estatales con el poder de los sectores del narcotráfico
articulados a la estrategia contra insurgente basada en aniquilar y desterrar la
población civil sospechosa de brindar algún apoyo a las guerrillas o de llegar a
auxiliarlas ( “Para ser considerado auxiliar basta con haber vendido algo
a un guerrillero, haberle dado clases a algún chico que se unió a las filas
rebeldes, haber perdido los documentos de identidad o incluso vestir el tipo de
indumentaria equívoco” Carrigan Ana , Hacia el abismo , el objetivo político
paramilitar en Colombia. www.crimesofwar.org ) . En
enero del 2.001 y escribiendo desde el exilio Sergio Otalora Montenegro,
analista y columnista semanal del diario independiente de Bogotá, "El
Espectador", escribió : "Los orígenes siniestros de los paramilitares y sus
verdaderos protectores no están exclusivamente arraigados en el conflicto a
muerte con las guerrillas. La verdad es que detrás de los escuadrones de la
muerte ha habido 15 años de guerra sucia con el propósito de desarticular cada
movimiento legítimo, organizado y popular y así realmente destruir cualquier
posibilidad de construir una alternativa democrática en oposición abierta a los
partidos tradicionales."
El
proceso de indistinción entre el capital del narcotráfico y todas las funciones
estatales avanzó estrechamente unido a la dinámica de expansión regional
paramilitar con instrucción profesional en el entrenamiento militar , en la
formación ideológica y en la propaganda dirigida a admitir e incluso relevar la
bondad del exterminio y el destierro.Es muy difícil comprender , dada la
magnitud decisiva de la “ayuda” exterior y su nivel de información , que este
proceso se desarrollará sin contar con la connivencia o al menos la indulgencia
de sectores decisivos encargados de Colombia en EEUU y la UE. La “cooperación
militar” de los gobiernos estadounidense , ingles ( e israelí) , se amplió pese
a las numerosas denuncias que indicaban los nexos entre las fuerzas
paramilitares e integrantes de la fuerza pública y lo mismo ocurrió con el
“respaldo político” y ahora la “cooperación pacificadora” , que privilegia la
inserción laboral de los victimarios directos por sobre los derechos de las
victimas en zona de interés corporativo , ofrecidos por los gobiernos alemán ,
holandés y español y por los encargados de exteriores del Consejo de la Unión
Europea en cabeza de Javier Solana.
La
afirmación del notable investigador Michael Chussodovsky en el artículo “De la
doctrina Truman a los neo-conservadores. La criminalidad en la política exterior
estadounidense” puede esclarecer mucho en Colombia : “Los crímenes y
atrocidades de guerra deberían considerarse como la consecuencia directa de una
política exterior y una agenda militar que apoya los intereses corporativos
estadounidenses, incluidos los gigantes del petróleo, el establishment
financiero de Wall Street y los seis grandes contratistas del sector de la
defensa.”En Colombia , afirma el mismo Chussodovsky , funcionan la
(GCP) Guerra Civil Patrocinada por EEUU y las (OS) Operaciones
secretas de inteligencia, ejércitos paramilitares, escuadrones de la
muerte.
El
sistema mediático internacional cumplió una función primordial en la
invisibilidad y la incomprensión por parte de la opinión pública internacional
del horrendo experimento neofascista en Colombia. Gran parte del sistema
mediático audiovisual nacional cumplió la función principal de habituar al
horror y banalizarlo e inocular a través de los informativos una carga
ideológica y valorativa meditadamente elaborada y dirigida a configurar una base
social favorable al autoritarismo, a la “paz con orden” - con un brutal control
de la vida cotidiana desde el vestuario a la lectura- y al programa económico y
político de la nefasta alianza.
Después de la sangrienta conquista de la mayor parte del
territorio, la última fase del proceso contempló un “proceso de paz” y de
repoblamiento - con “cooperación internacional” - de las áreas aseguradas
militarmente, con desmovilizados de las fuerzas paramilitares. Se tramitó la Ley
de “Justicia y Paz” en cuya elaboración participó el 30% de los congresistas,
elegidos en regiones dominadas a sangre y fuego, y sobre los que uno de los
cabecillas de los escuadrones paramilitares aseguró que formaban parte de sus
apoyos en el Congreso Nacional. En noviembre del 2.006 y febrero de 2.007 nueve
de estos congresistas han sido detenidos por sus vínculos con los escuadrones
paramilitares , por ordenes de la Corte Suprema de Justicia dentro del proceso a
la “parapolítica”.
La Ley de “Justicia y
Paz” fue aprobada el 22 de junio del 2005 y el 4 de
julio, el New York Times, señalo en su columna editorial:
“Colombia acaba de aprobar una ley para la desmovilización de paramilitares.
El gobierno la denomina “Ley de Justicia y Paz” pero más bien debería llamarse
“Ley de impunidad para asesinos en masa, terroristas y principales traficantes
de cocaína.”(…) La administración Bush podría haber presionado al Presidente
Álvaro Uribe para que aprobase un buen proyecto de ley. En cambio, el embajador
William Wood ha apoyado con entusiasmo la nueva ley, proporcionando el aval de
Washington a la capitulación de Colombia con la mafia terrorista.”
El
inocultable y repugnante deterioro de lo público estatal , sumado a la
prolongada y sangrienta embestida sobre la diferencia política y sobre las
comunidades indígenas,afros y campesinas ubicadas en áreas de codicia
corporativa – que ha arrojado decenas de miles de victimas de atrocidades
inenarrables, más de cinco mil personas desaparecidas , más de tres millones y
medio de personas desterradas y una pavorosa crisis humanitaria-, unido al
desmadre del poder paramilitar impune , al rechazo a la imposición de un Tratado
de Libre Comercio que arruina sectores enteros del campo y consolida el proceso
de destrucción de los territorios de los pueblos originarios , y agregado todo
ello al valeroso deslindamiento realizado por parte de sectores íntegros
nacionales (en el tejido social , en el mismo Congreso Nacional , en la Corte
Constitucional y en la Corte Suprema de Justicia ) y de sectores íntegros
internacionales que no avalaron el infame proceso de reingeniería y sometimiento
social, desencadenó una dinámica de perdida descomunal de credibilidad en el
engendro institucional que había sido concebido para servir como modelo
ejemplizador en toda Latinoamérica. Se levantó entonces un incontenible
movimiento sociopolítico que clama por la verdad sobre lo acontecido y por una
conducción ética que libere por fin a la población del imperio del crimen y la
mentira.
En “Media noche en la
historia” dice el profesor Reyes Mate: La injusticia hecha a las victimas de
la historia no tiene reparación. La magnitud del
ocultamiento y del trabajo de la industria de la amnesia en los que se ha
sostenido el bárbaro proceso de intervención indirecta y prolongación del
conflicto, convierten la batalla por la verdad en un proceso esencial para
alcanzar la paz en Colombia. Como señala el profesor español Reyes Mate en su
reflexión sobre las tesis de Benjamín: Los proyectos frustrados de los
que quedaron aplastados por la historia están vivos en su fracaso como
posibilidad o como exigencia de justicia. La realidad es facticidad y también
posibilidad.La posibilidad da vida a un pasado porque la ausencia cuestiona la
legitimidad de lo factico al tiempo que permite a la injusticia pasada hacerse
presente como demanda de justicia
Incluso la verdad es fundamental para que muchos victimarios –
atrapados en la siniestra dinámica del conflicto- puedan por lo menos iniciar el
largo camino de intentar curar el daño que se han hecho a sí mismos al masacrar
a sus congéneres. Como señaló Francisco Villalba uno de los autores de la
masacre del Aro - ordenada por Salvatore Mancuso conforme a su confesión en el
proceso de la “Ley de justicia y paz”- : “Hubo muchos
excesos pero si uno le decía eso a los comandantes después lo mataban. Entonces,
tocaba aguantarse.Le pido a Dios que me saque de las pesadillas los rostros y
los cuerpos destrozados de mis víctimas. Tuve un tiempo trastornado. Hoy me
pongo a pensar por las noches y los veo. Pido a Dios que los retire, que los
quite de mi mente".
El
acompañamiento de las organizaciones de la sociedad civil y de los núcleos
honestos de los sectores políticos de EEUU y UE a las organizaciones sociales y
la oposición política democrática en la lucha por la verdad Colombia ha sido es
y será decisiva. En este momento es creciente, y tiende a elevar su coordinación
y en consecuencia su capacidad de protección de las vidas que luchan por la
verdad y el fin del poder mafioso en Colombia. En el escenario internacional
asistimos a un pulso decisivo entre la deriva suicida de la opción imperial por
un orden fundado en la potencia aniquiladora y la irrefrenable movilización en
pos de un orden multipolar y cooperativo capaz de encausar el acervo de
sabiduría y conocimiento de la humanidad en favor de la vida.
Por
las consecuencias adversas directas que tiene la situación en Colombia con
relación a la sociedad civil estadounidense , europea , la batalla por la verdad
en Colombia, la verdad de las victimas , el significado de estas “ florecillas a
la vera del camino” que no han merecido atención frente a los intereses de los
grupos de poder internacional , puede implicar también un valioso aporte en la
puesta al desnudo de la globalización oculta , sus nexos con la red corporativa
y la deriva bélica. Lo que podría ayudar mucho en una depuración en la alianza
atlántica de los grupos que se han apropiado de lugares de decisión con base en
el engaño y en el descomunal poder financiero que arroja esta nefasta alianza.
Como señala Reyes Mate: Las florecillas a la vera del camino, no solo
son importantes, son decisivas ahora que se revela que el camino conduce a la
autodestrucción.
Para
los pueblos hermanos de América Latina la verdad en Colombia significa cesar una
amenaza inminente de replica - una vez más - de los modelos de seguridad
corporativa fundados en la barbarie y el exterminio.
El
proceso que desnuda la hipocresía de la “Guerra contra el narcotráfico” se ha
tornado irremediablemente público. El Instituto de Estudios Políticos de
Estados Unidos, en asocio con el gabinete de abogados Brian Gaffney , han
demandado judicialmente a la CIA para entregue los archivos sobre las relaciones
que estableció en 1993 con los PEPES para acabar con Pablo Escobar. Los Pepes se
convirtieron después en una parte fundamental de las Autodefensas Unidas de
Colombia (AUC).
En el libro “Prohibido olvidar” , de
Maureen Amaya y Gustavo Petro se indica: “...la CIA organizaba más de cincuenta
vuelos de Sothern Air Transport , para dejar armas a la contra nicaragüense en
Honduras y recoger cocaína del cartel de Medellín.La misma CIA pidió a Pablo
Escobar diez millones de dólares para financiar la contra y destruir a los
sandinistas…El cartel de Medellín entiende que así como ha hecho una alianza con
la CIA para entregarle cocaína para destruir el sandinismo, de igual manera
puede hacer una alianza con el ejercito colombiano para destruir la izquierda
comunista y eso explica como se pueden matar cuatromil militantes de la Unión
Patriótica sin que exista un solo detenido.La mafia ganaba con la muerte de los
comunistas el mercado de consumo de las drogas de los EEUU con un socio
importante: la CIA.” [7]
En la segunda semana de
febrero de 2.007 , el Ministro de Asuntos Exteriores de Venezuela , Nicolas
Maduro , refiriéndose al cese de la “ayuda” estadounidense para la
“Guerra contra el narcotráfico” , señalo: “En todo caso los sistemas de ayuda
que ellos han creado son una vulgaridad. Ellos pretenden entregar una cantidad
equis de ayuda, supuestamente para la lucha antidrogas, cuando en realidad es
para controlar a nuestras policías, para hacer inteligencia interna y, en muchos
casos para, a través de los organismos antidrogas de Estados unidos, controlar
ellos el negocio de la droga. Al final, pareciera haber una competencia entre
las élites corrompidas de ese país para controlar el negocio de la droga. Por
eso, decimos que todo este sistema de lucha antinarcóticos revela una gran
hipocresía”.
No es
casual entonces el nombramiento del hasta ahora embajador en Venezuela, William
Brownfield, como nuevo embajador estadounidense en Colombia – y el envío del
embajador Wood en Colombia a la embajada en Afganistán - , en febrero de 2.007.
La “Guerra Preventiva contra Venezuela” exige conocimiento y visión regional.
Acuden a la baza, cada vez más desacreditada, de no colaboración en la
“Guerra contra el Narcotráfico y el Terrorismo”, porque la sola excusa de
su preocupación por el “deterioro de la democracia” desde la evidente
participación de Estados Unidos en el golpe de abril del 2002, también ha
perdido enorme credibilidad. Este 1 de febrero, John Negroponte, designado como
número dos del Departamento de Estado de los EEUU señalo en la audiencia de
confirmación ante el Senado que el Presidente Chávez “intenta exportar su
populismo radical y pienso que su comportamiento amenaza las democracias en la
región" y llamó a continuar la “Cooperación” con Colombia: “La situación en
Colombia es crucial para nuestros intereses".
Este alto cargo del
departamento de exteriores de la administración Bush es el mismo que fue apodado
como el “procónsul” por su actividad en Centroamérica cuando en medio de
denuncias por violaciones de derechos humanos coordinaba operaciones respaldadas
por EEUU contra el gobierno sandinista.
En la
nueva y esclarecedora obra de la abogada Eva Golinger “Bush contra Chávez”
publicado por editorial Monte Avila, es posible encontrar un análisis detallado
y documentado de las diversas herramientas de la dinámica de intervención del
gobierno estadounidense en Venezuela, que también funcionan en otros países de
la región, y del acento especial que tienen las vastas operaciones mediáticas.
No es casual la extrema sensibilidad de los encargados estadounidenses de la
región andina sobre la comunicación de verdades que afecten el control casi
total que han ejercido hasta ahora sobre la opinión pública internacional. El
caso de Telesur y sus transmisiones sobre Colombia lo evidencian.Al corresponsal
Freddy Muñoz le han estructurado, con la complicidad de investigadores estatales
del norte de Colombia, un infame montaje judicial. A la burda farsa que también
busca el desprestigio de Telesur y la intimidación sobre su labor en Colombia se
ha plegado un semanario como Cambio 16. En febrero de 2.007 a la incriminación
judicial se ha sumado la amenaza directa sobre la vida del reportero por parte
de las “nuevas” conformaciones paramilitares.
Por
otra parte , en el artículo “Como el Imperio mueve sus piezas en Latinoamérica”
de Gabriel Martín ( www.rodolfowalsh.org) se encuentra muy valiosa información para comprender la historia
, los vínculos en sectas que abrevan en la noción de la supremacía patriarcal
blanca y la devoción por el secretismo , presentes entre quienes abanderan un
proceso de conquista territorial que da continuidad con el extermino en el sur
de América a la aniquiladora expansión en el oeste de norte América ,
implantando además en el proceso una forma suicida de progreso.
-----o-----
En el
largo plazo, y es éste el núcleo de la estrategia propuesta en el Informe
“Viviendo con Hugo, política de Estados Unidos hacia la Venezuela de Hugo
Chávez”, se señala la necesidad de “redirigir la política hacia América Latina,
subrayando los temas de pobreza e inequidad que hacen atractivo a Chávez en la
región (40 por ciento de pobres en 500 millones de habitantes)”.
En el
diario El Universal de Venezuela del 13 de diciembre, Thomas Shanon
expresó el nuevo enfoque sugerido en el Informe del Council of Foreign
Relations y en la reunión con Bernardino León: “Para Estados Unidos, las
tensiones que se han producido con países latinoamericanos han sido producto de
una ‘desconexión comunicativa’. Teníamos la tendencia de hablar ofreciendo
soluciones y la región hablaba desde una perspectiva de problemas. Con
frecuencia, las partes no conectaban. La región hablaba sobre la pobreza, la
desigualdad y la exclusión social, y nosotros de democracia, prosperidad y
seguridad contra el narcoterrorismo”. […] “Es un año de compromiso. Es hora de
comprometernos de nuevo con nuestros socios distantes de la región y centrarnos
en la forma en que podemos tener un desempeño relevante”.
La dinámica del
80/20[8]
El diálogo propuesto, pese a deslindarse
del lenguaje agresivo de los más recalcitrantes neocon y emisarios
políticos de la industria bélica, es entre socios con intereses en América
Latina y no con los pueblos de la región. Con éstos se propone implementar
estrategias que permitan continuar el formidable mecanismo de expoliación que
les garantiza hasta ahora a las corporaciones españolas 41.000 millones de euros
de ingresos/año, equivalentes al 5,6 por ciento del PIB español. La Bolsa
española en la que cotizan las principales empresas con presencia en América
Latina se ha situado en 2.006 y 2.007 como la más rentable de Europa.Se calcula
en US$ 900.000 millones la apropiación de las corporaciones multinacionales
estadounidenses, europeas y asiáticas por pago de intereses, beneficios,
royalties y activos en una década (1991-2001) [9] en la
región.
El
diálogo estadounidense-español se enfila a optimizar la complementariedad entre
diversos niveles de control sobre diferentes países de la región: presión
económica, cooptación, amenaza armada, control informativo, espionaje,
dominación simbólica y manipulación cultural. Cuando León habla , por ejemplo ,
de “gran déficit de cohesión social”, realmente señala –en el lenguaje cifrado
de los poderes neocoloniales para entenderse en los escenarios públicos– que se
trata de aliviar la pobreza, para evitar estallidos sociales y la emergencia de
actores políticos con apoyo popular fraguado en la desesperación de su
circunstancia cotidiana, pero sin modificar los valores, reglas de juego e
instituciones capitalistas en que se sostiene el desmesurado saqueo sobre la
región para sostener el modelo consumista, empobrecedor y autodestructivo que
impusieron al mundo.
En
“Viviendo con Hugo,…” se recupera para América Latina lo sugerido por el informe
“Andes 2020”, en el sentido de sugerir redireccionar recursos antinarcóticos,
apropiados casi totalmente por sus empresas de armamento, entrenamiento militar
y química, hacia la reducción de la exclusión social y la inequidad en la región
andina. En el Informe se recupera este planteamiento para su aplicación en toda
América Latina, y también se señala que ello exigiría flexibilidad en la
imposición del ‘libre comercio’ y que los sectores económicos nacionales
dominantes contribuyan con parte de lo que debería invertirse para evitar el
colapso de la dominación estadounidense.
Pero
la política del Pentágono y de la administración Bush continua privilegiando la
vía de la fuerza como lo demuestra el descomunal presupuesto militar de más de
650 mil millones de dólares tramitado en 2.007 , su acento en la dimensión
militar en Latinoamérica y la continuidad de la intervención en Colombia con dos
millones dólares diarios de “Ayuda” dirigidos a sostener la maquina de odio y
guerra entre colombianos , pretendiendo asegurar con las armas y un inverosímil
programa de pacificación un espacio decisivo en su designio de recuperar el
dominio regional, ahora que Venezuela , Bolivia y Ecuador han escapado a su
control.
El
departamento de Estado parece acoger algunas ideas presentes en el Informe del
CFR en el sentido de no desestimar la acción multilateral con gobiernos
subordinados o influenciables y el papel de la diplomacia , pero en cualquier
caso el diálogo que pregonan no va entonces hasta el respeto por la
opción socialista que votó el pueblo venezolano en las elecciones del 3 de
diciembre ni representa una forma de tránsito hacia el respeto de otros pueblos
de América Latina, como el colombiano, bárbaramente agredidos, lo que también
sería muestra real de buena voluntad para restablecer la confianza con la
Venezuela bolivariana. La inclemente y sangrienta guerra ideológica contra
cualquier diferencia ante la doctrina capitalista-neoliberal, adelantada por
décadas en la región, continúa pese al indetenible agotamiento del discurso
neocon.
Por
eso, no se trata sólo de “la ‘pobreza, estúpido’”, que señala León para explicar
la crisis de los partidos políticos tradicionales y la incapacidad institucional
ante las demandas sociales en América Latina, formulando a partir de ahí una
nueva estrategia conjunta en el reaseguramiento del control regional.
Se
trata del despertar de los pueblos de Abya Yala, del avance irrefrenable hacia
una fraternidad anhelada: unidad política del pueblo latinoamericano largo
tiempo fragmentado para mejor someterlo; emergencia incontenible de una
conciencia soberana enraizada en los ríos de sangre y sufrimiento producidos por
la colonia y la neocolonia, además de conciencia creciente y avance organizativo
frente al engaño que corroe sin remedio a una forma de ‘progreso’ que se rechaza
porque no puede procurar paz y creación sino muerte, angustia y desesperación
porque únicamente ofrece rapacidad, devastación y simulacros de la vida,
sosteniéndose en la mentira permanente.
Ante
el ‘progreso’, la ‘democracia” y el ‘libre mercado’ como régimen dominante, el
“socialismo ancestral y creador del siglo XXI emerge con una visión no mercantil
de la naturaleza y el Alba como forma de relación fraterna, de cooperación
creadora entre los pueblos, expresión de nuevas formas de organización social
con el uso creativo de las posibilidades infinitas de la revolución informática
y de las comunicaciones. Un horizonte de vida , fraguado en más de 500 años de
adversidad , no sólo para América Latina , sino también para un mundo atrapado
en el vértice destructivo de una dinámica social impulsada por la sumatoria de
los más poderosos ego ísmos.
Así, gana poco la política exterior
española al distanciarse del paleoneoliberalismo del Partido Popular y su
ramplona subordinación a los designios de los neocon estadounidenses ,
precipitantes de cambios y sentimientos antimperiales en la región durante los
gobiernos de Aznar , si no va un poco más allá y varía su propia mirada colonial
y su cautiverio ante los reducidos pero poderosos intereses financieros y
corporativos que no solo usurpan la definición de los objetivos y las
estrategias en la relación con los pueblos de América Latina[10], sino que
monopolizan la comunicación y la enseñanza en la península evitando que la
población sea conciente de las consecuencias del control corporativo de su
política exterior.
En
Latinoamérica está pendiente un debate parlamentario y de las organizaciones
sociales y políticas en torno a lo que ha significado la presencia de las
corporaciones españolas en América Latina, en términos de respeto a los derechos
de los trabajadores, a los derechos de las comunidades y los entornos naturales,
además de corrupción, influencias ilegales sobre políticas locales y niveles de
beneficios ante el cumplimiento real de obligaciones fiscales, y, ahora, la
alineación con un trazado imperial que tanta miseria y sufrimiento produce en la
región.
Reconocer la deuda española y europea con los pueblos originarios,
afros y mestizos de América Latina sería un primer paso fundamental en la
construcción de relaciones creadoras y de cooperación que arrojen beneficios
prontos a los pueblos de ambos lados, para responder a nuestros urgentes
desafíos como humanidad.Ahora que en España se ha puesto en marcha la primera
Comisión de la verdad en Valencia bien valdría la pena abrir el capitulo sobre
la verdad del franquismo en Latinoamérica. En Colombia se encontrarían sin duda
las raíces de la persecución y la cruzada aniquiladora que originó la
confrontación política que devino armada y que se extiende hasta nuestros días
en buena parte por la decisión exterior de impedir resolver por la vía de las
armas lo una refundación de la política en Colombia podría resolver con
asombrosa prontitud en beneficio de todos los colombianos.
Cesar
la codiciosa mirada neocolonial que sólo ve recursos y mercados en América
Latina sería un avance hacia relaciones exteriores no monopolizadas por la
ferocidad de los grupos de poder, con su estrecha y suicida visión mercantil del
mundo. Comprender los sentidos profundos, sencillos y visionarios del Alba e
iniciar una nueva política exterior diseñada desde las necesidades, los
intereses vitales comunes y la imaginación creadora de los pueblos, contemplando
las infinitas posibilidades emergentes de la cooperación genuina, es un punto de
encuentro de las fuerzas éticas de uno y otro lugar que comprenden cómo las
soluciones a los más urgentes desafíos de la humanidad no pueden darse en el
nivel nacional o regional.
Así
se podría avanzar en la articulación de un gran movimiento de comunicación y
cooperación entre fuerzas que encarnan la vida en el mundo, para acabar de
arrojar al desván de la historia las ideas, normas e instituciones que han
represado durante un tiempo vital el caudal creador de la humanidad y la
destinación de recursos materiales y la inteligencia colectiva planetaria a la
solución de graves e inaplazables problemas comunes.
La
suscripción y puesta en marcha del Alba entre Cuba, Venezuela, Bolivia y
Ecuador, y los resultados de la Operación Milagro en que médicos cubanos y
venezolanos les devuelven la mirada a millares de latinoamericanos revelan en la
práctica los asombrosos logros en tiempo brevísimo cuando la confianza, la
voluntad sincera de cooperación, y los principios de solidaridad y fraternidad
guían las relaciones entre los pueblos.
En la
reunión en marzo de 2007 en Madrid, entre la Secretaria de Estado estadounidense
Condolezza Rice y el Ministro de Asuntos Exteriores español Miguel Ángel
Moratinos, la acción conjunta sobre América Latina ocupará lugar principal en la
agenda. Se debe tener presente que España, junto a Alemania, sigue siendo una
voz determinante al decidir en el Consejo y la Comisión Europeas la acción
exterior sobre América Latina.
Es
hora de que los gobiernos latinoamericanos que hoy responden al clamor de
soberanía de sus pueblos o están en vía de ser sensibles a esta demanda
profundicen la construcción de una acción exterior conjunta. Si el impresionante
tejido de organización popular latinoamericano y los espacios de investigación y
comunicación que promueven el viraje de la región hacia la segunda y definitiva
independencia hallan espacios coordinados de análisis y respuesta común a las
medidas neocoloniales que intentan perpetuar el régimen de dominio y
expoliación, resultará más difícil el avance impune de la coordinación de
medidas dirigidas a sofocar la emancipación y unidad de Sur América.
Podemos asimismo acometer en conjunto la organización de un
plebiscito regional, que, siendo en sí mismo un proceso de pedagogía política,
permita avanzar con la urgencia requerida en la unidad política creativa de los
pueblos de América Latina que deje atrás la fragmentación en que han sostenido
el sometimiento y que aporte lo mucho que puede aportar en esta hora a la
conciencia fraterna de la humanidad.
Con
las formas de organización social que en España, Europa y Estados Unidos
rechazan la política exterior de sus gobiernos en beneficio económico de corto
plazo para unos pocos y en perjuicio real de todos, es posible establecer
comunicación orientada al examen público de los procesos históricos y los
imperantes en las relaciones exteriores, así como al análisis creador de nuevas
modalidades de relación reclamadas con urgencia por los pueblos.
[1] El País, Saturday December 9, English
edition with the International Herald Tribune.
[2] El
País: Estados Unidos nos pide consejo sobre América Latina.
[3] El 19 de
junio de 2006, en Washington, la Secretaria de Estado de Estados Unidos
Condolezza Rice y Miguel Ángel Moratinos, Ministro de Asuntos Exteriores del
Estado español, confirmaron públicamente su determinación de actuar
conjuntamente en América Latina. “Somos aliados y tenemos muchos intereses en
común”, señaló Rice, y Moratinos complementó ratificando la condición de
“aliados y amigos” [3] al señalar: “Necesitamos más
Estados Unidos en Latinoamérica, pero también necesitamos que España pueda
aportar una proyección de futuro que dé estabilidad real a la región” […]
“se ha decidido crear un grupo de trabajo específico
para Latinoamérica”', cuyo objetivo será “fijar las orientaciones y los
mecanismos para desarrollar la complementariedad que España y Estados Unidos
desean llevar a cabo en el continente latinoamericano”.
[4] Elaborado
por Richard Lapper y producido por el Centro de Acción Preventiva, articulado al
influyente Consejo de Relaciones Exteriores (www.cfr.org/venezuela), se publicó
en diciembre pasado.
[5] Estados
Unidos compra hoy 1,5 millones de barriles de petróleo diarios a Venezuela, el
11 por ciento de sus importaciones del hidrocarburo.
[6] En
Colombia, por ejemplo, con el apoyo de un gobierno absolutamente controlado, se
multiplica hoy la ofensiva de las corporaciones petroleras sobre territorios
indígenas, como el del pueblo Uwa.
[7]
Revelaciones formuladas en el valioso libro Prohibido olvidar, de Maureen
Amaya y Gustavo Petro.Editorial Buena Semilla , noviembre de 2.006.También se
puede consultar las declaraciones formuladas por la Vicepresidencia venezolana
en 2006 (Entrevista a José Vicente Rangel, en www.voltairenet.org)
[8] Expresión
utilizada por Julie Sweig, directora de Estudios Latinoamericanos del Council
of Foreign Relations, para señalar que la desconexión entre el poder
usamericano y su influencia en la región se debe a que las élites políticas
estadounidenses sólo hablan con las élites de la región, excluyendo a la mayor
parte de la población.
[9] Ver Las
relaciones entre Estados Unidos y América Latina: rupturas, reacción y la
ilusión del tiempo pasado. James Petras. www.rebelion.org.
[10] Ver
Observatorio de las Multinacionales en América Latina, www.omal.info. “Según la Fiscalía
del Estado y el FBI, el BBV blanqueó fondos del narcotráfico colombiano y
mexicano a cambio del control del Banco Ganadero y una posición de ataque al
Bancomer. Hoy, el BBVA es el segundo banco de Colombia y el primero de México”.
David L. Listar, www.debtwatch.org.
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