NCeHu
359/06
Argentina De Skinner a
Tedesco
Andrés Sarlengo
CONTRAPUNTOS 06/05/2006
Recientemente Daniel Filmus visitó la ciudad de Santa Fe y
felicitó a su colega provincial “por el esfuerzo en mejorar la calidad de la
educación y por haber empezado las clases con absoluta normalidad”. Sin embargo,
Adriana Cantero (ministra de Educación de Santa Fe) aseguró que los “índices de
analfabetismo crecieron notablemente en los últimos tiempos”.
Santa Fe
posee 61.165 analfabetos y 7.507 de ellos habitan en el departamento La Capital.
Asimismo, en la provincia santafesina el 63 % de las personas mayores de 20 años
no culminó el nivel medio de educación. En el país 14 millones de argentinos no
terminaron la “secundaria”.
Con todo, ni Filmus ni Cantero,
felicitaciones y preocupaciones mediante, pretenden realmente conseguir que “El
Yo Sí Puedo” derrote a la peor de las ignorancias: el analfabetismo político
(1). Esa categoría de “burros” le es servicial y complaciente al “político
corrupto y lacayo de las empresas nacionales y multinacionales”. (1)
Para sentirse superiores y poder administrar el devenir del cuerpo y el
alma de las mayorías: funcionarios y empresarios deben manipular la verdad,
recubrirla de conceptos inentendibles y propagar las “ilusiones necesarias”. Tal
vez Filmus y Cantero piensen como uno de los padres fundadores de los Estados
Unidos. John Jay aseveró: “Los dueños del país deben conducirlo”. Quizás razonen
así y digan otra cosa.
Recientemente Juan Carlos Tedesco dejó de ser
asesor del gobierno nacional y se convirtió en el Viceministro de Educación.”Las
prioridades son las que ya está enfrentando el ministerio: mejorar la calidad de
la educación y hacerlo de manera más homogénea. Tratar de disminuir al máximo
las diferencias que existen entre los distintos sectores del país y entre los
diversos sectores sociales. Ya se sancionaron la Ley de Financiamiento, la Ley
de
Educación Técnica y se va a impulsar la sanción de la Ley General de
Educación”, le contestó Tedesco a Página 12. (2) “Debe ser una ley que exprese
el compromiso de diversos partidos y sectores sociales en convertir la educación
en una variable para el impulso económico y la formación ciudadana. La educación
es necesaria para que tenga una economía competitiva y una ciudadanía fuerte”,
resaltó el ex director educativo de la Organización de las Naciones Unidas para
la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).
Cabe destacar-
inexorablemente- que de la UNESCO también surgen otros datos que Tedesco no debe
disimular ni silenciar. En 1975 los argentinos utilizábamos diariamente para
expresarnos entre 5000 y 8000 palabras. Hoy sólo pensamos y nos comunicamos con
800 a 1000 palabras.
Terrorismo de Estado, economía de mercado,
democracias formales, pobreza masiva y desnutrición conceptual. Señor Tedesco:
¿acaso a los grandes banqueros, los insignes petroleros, las poderosas compañías
y los capitostes de la prensa radiotelevisiva no les interesa que nuestro
lenguaje sea escueto, apático y confuso? “En la tierra que te daré no mantengas
analfabeto a tu hermano para que corte tú algodón y recoja tú café. Habla Yavé”,
escribió el poeta y ex ministro de Cultura nicaragüense Ernesto Cardenal.
El libre mercado y la economía productiva concentrada no nos va a ser
felices, señor Viceministro. Y de eso se trata, me parece, Licenciado Tedesco.
¿Qué es si no la democracia? Gobierno del pueblo para su bienestar. Ser simples
no es recaer en el simplismo. Mucho de simplismo -no obstante- se percibe en la
obra de Filmus y sus subordinados ministeriales. “La realidad no es así, la
realidad está así. Y está así no porque ella quiera, ninguna realidad es dueña
de sí misma, esta realidad está así porque estando así sirve a determinados
intereses del poder”, sentencia Paulo Freire en “El Grito
Manso”.
Gratificante y provechoso sería que el ex director educativo de
la UNESCO releyera al pedagogo brasilero.
Freire fue declarado “Experto
de la UNESCO” en 1961 y Tedesco no lo ignora. Por eso, señor Viceministro, antes
de educar para una economía competitiva, relea cualquier apunte del autor de
Pedagogía de la Autonomía. Su capacidad intelectual así lo permite. Además,
¿sabe usted que el “linyera” contribuyó a la alfabetización de los trabajadores
del campo tanto o más que los maestros rurales? “En la pampa argentina surgió un
personaje típico, el llamado linyera. Y no por nada esa palabra es de origen
italiano. Según algunos autores proviene de linghera, el bolso donde esos
vagabundos políticos llevaban sus enseres, principalmente volantes y periódicos
anarquistas. Esas figuras tolstonianas que viajaban en los trenes de carga,
trabajaban en el campo y enseñaban las ideologías de la rebelión social”, narra
Osvaldo Bayer en Los anarquistas expropiadores y otros ensayos.
¿Qué
significa darle al Estado Nacional un fuerte poder para actuar a través de los
maestros, que es un elemento crucial en la calidad educativa? (2) Como
actualmente se expande la moda de los conocimientos polivalentes: la respuesta
la sacamos de las Ciencias de la Comunicación Social. “Adiestrar la mente de la
población para que manifieste una sana virtuosa adhesión a su gobierno”,
sostiene James Mill. Indudablemente.
Es probable que “El Yo Sí Puedo”
derrote el analfabetismo en cualquier lugar que se aplique. Pero ni Filmus, ni
Tedesco, ni Cantero, Ni Kirchner, ni Obeid... pueden compararse con la proeza
cubana que se declaró “territorio libre de analfabetismo” el 23 de diciembre de
1961. La dignidad y la entereza de Conrado Benítez García es una lección de
pedagogía y libertad. Conrado es uno de los 40 educadores cubanos muertos por
las garras de los grupos contrarrevolucionarios yanquis. A los 18 años cayó
mientras alfabetizada a su pueblo. Trayectoria, corta y coherente, que ministros
y academicistas argentinos ningunean por simplismo o conveniencia.
Elsa
Sáenz es una militante cristiana del litoral argentino que fue educadora de la
Ligas Agrarias en la década del ´70. En diálogo con Carlos Del Frade sus
palabras son tan claras, simples y precisas que da pena que no tuviesen alas
para que volaran hasta los oídos de Viceministro Tedesco. “Denunciábamos a la
industria tabacalera. La industria tabacalera en el mundo comienza a imponer el
consumo de tabaco rubio, porque es adulterable, se puede mezclar con cuanta
porquería se te ocurra, vainilla, hierbas, lo que abarata el costo de la materia
prima para la producción y por lo tanto incrementa las ganancias de la empresa.
Eso lo veíamos y lo denunciábamos y decíamos que la industria tabacalera se iba
a ir en algún momento de Goya y que iba a dejar todo lo que terminó dejando. En
aquel momento éramos los tarados que planteábamos esto y es lo que terminó
ocurriendo. En el proceso las industrias se fueron no sin antes -algunas de
ellas- tomar créditos que después pasaban a engrosar la deuda externa
argentina”, subrayó la maestra compañera del Paraná.
¿Educación para una
economía competitiva y una ciudadanía fuerte? (2) ¿Cómo y para qué? Sonará
desagradable e irrespetuoso; pero hay demasiados “brutos” (o serviles)
matriculados que no quieren comprender que “repiten la propaganda del
Estado”.
Garrote o disuasión: el gran capital necesita controlar el
pensamiento de las mayorías. Y que mejor, entonces, que sujetar en sus manos la
educación y la cultura. Clarín, Telefónica, Filmus, Nun, Tedesco, Obeid, Bárbaro
y las decenas de compañías y Fundaciones bondadosas... parecieran... que
estuviesen unidos, hermanados y guiados por la misma y estúpida ilusión de
creerse los únicos “dueños del país”. Y en verdad están más cerca de B.F.
Skinner que de Paulo Freire. Por más que insistan en lo
contrario.
¡Cuidado con los papagayos del saber!, escribió el pedagogo
Simón Rodríguez. Y sí, cuidado con los “charlatanes eruditos que repitan
sentencias que los demás no entienden”. ¡Cuidado!, porque detrás de ellos, como
siempre, está la insaciable sed de riqueza. Si antes se llamaba vasallaje ahora
la nombran como economía competitiva.
Notas: 1) Bertolt
Brecht 2) Página 12. 2 de abril de 2006. Entrevista a Juan Carlos
Tedesco.
Fuente: www.argenpress.info , 6 de mayo de
2006. |