Los cambios en el paisaje cultural :
Area
de transición entre el Sur Bonaerense y Patagonia
ENRIQUE HUGO FABREGAT
Secretaria de
Planificación y Control de Gestión de la Provincia de Río
Negro
Introducción.
El
paisaje es multifacético y cambiante y expresa las características de la
sociedad actual y la acumulación de los procesos que lo construyen a través de
la historia.
El
área de estudio comprende el Valle Inferior y las islas, límite entre el Sur de
la Provincia de Buenos Aires y la Provincia de Río Negro y es el actor dominante
del territorio que constituye una unidad económico-productiva. Las islas forman
parte del último tramo del Río Negro,
las cuales presentan paisajes que expresan la ocupación y utilización del
espacio a través del tiempo.
Cada
una representa una unidad espacial donde se materializa la relación
espacio-temporal, la cual depende de múltiples factores socio-económicos,
políticos, ideológicos y del marco natural que la
sustenta.
La
finalidad del trabajo es definir los paisajes actuales existentes, desde su
transformación y los caracteres sobresalientes de la vida en las islas que
conforman el Valle Inferior del Río Negro.
1.
El último tramo del Río Negro: un actor dominante en el territorio del sur
bonaerense y de la patagonia norte.
El
espacio conocido como el Valle Inferior del río Negro constituye por sus
características una unidad económica-productiva, la misma está constituida por
diferentes elementos tanto de orden físico natural como también de otros
relacionados con la acción del hombre. Entre esos elementos el que define en
primer lugar a esa unidad es el río, actúa no solo como un integrador sino
además como el motor de la organización de este espacio a partir de las
actividades que el hombre realiza. Debemos destacar que este territorio está
asociado a la idea de espacio apropiado y construido por la sociedad que lo
habita, en el cruce de diferentes lógicas políticas, económicas y culturales.
Esta unidad que forma el Valle Inferior se extiende por el sector sur del
Partido de Patagones en la Provincia de Buenos Aires y al este del Departamento
Adolfo Alsina en la Provincia de Río Negro.
En
cuanto al origen del nombre con el que se lo conoce a este valle, el mismo está
relacionado a los sectores en los que se divide la cuenca, que en tal caso son:
“alto, medio e inferior” que comúnmente se denomina a los tramos del valle del
río Negro. Además hay que agregar el Valle de Conesa que se encuentra entre el
Valle Medio y el Valle Inferior.
1.1.
El Río Negro importante cuenca hídrica argentina.
El
Río Negro se encuentra situado en el nordeste de la Patagonia, en una zona de
transición entre las típicas llanuras de la región pampeana y las áridas mesetas
de la Patagonia extrandina. Esa transición, tanto climática como morfológica se
va desarrollando en forma latitudinal desde la cuña seca en la que termina la
pampa húmeda y que coincide con el extremo sur bonaerense, para luego ingresar
al valle en el tramo inferior del río Negro y continuar en la meseta patagónica.
La transición se manifiesta en el espacio compartido por las dos provincias, en
donde la utilización del río se hace de diferentes formas y a ambos lados del
mismo, pero sobre todo este marca el límite dentro de ese cambio, al pasar de la
llanura a la meseta solamente cruzando el valle.
A
su vez esta zona se encuentra en su totalidad dentro de la cuenca del río Negro,
que ocupa después de la cuenca del Plata, el lugar más destacado en la
hidrografía argentina por el volumen de agua que transporta. Esto hace que se lo
pueda explotar para riego en casi toda su extensión, sin mayores dificultades
por la cantidad de agua que se puede usar.
En
cuanto a la superficie total de la cuenca del río Negro, es de
125.000
kilómetros
cuadrados, de los cuales corresponden al propio río Negro
27.100
kilómetros
cuadrados, de los cuales le corresponden al Valle Inferior
800
kilómetros
cuadrados, solo al sector del valle aluvial.
Por
lo tanto es el río más importante de todos los que surcan las tierras
patagónicas, y a la vez el principal de todos los cursos de agua que corren
íntegramente en territorio argentino, desde sus nacientes hasta la
desembocadura. Hay que destacar que todo su recorrido lo realiza dentro de la
provincia de Río Negro, atravesando su territorio, además permite la
organización de la mayor parte de las actividades económicas de la
misma.
En cuanto a su recorrido, desde las nacientes hasta su desembocadura en
el Océano Atlántico, alcanza los 637 kms. Su cuenca de alimentación está en la
Cordillera de los Andes, en el área andinopatagónica, por ello su caudal está en
relación con la cantidad de precipitaciones que se producen en la montaña, en
donde nacen los dos principales ríos tributarios. Este se desplaza con dirección
de oeste a este a través de las áridas mesetas patagónicas, en medio de un valle
amplio y profundo, de ancho irregular según los tramos, variando entre un mínimo
de 5 kms. en Chelforó y un máximo de 25 kms. en Choele Choel. Esto hace que se
presente como un extenso corte, que en forma de diagonal cruza toda la provincia
de Río Negro.
El
cauce, es el resultado de la intensa erosión que ha afectado a las mesetas
patagónicas, favorecida por la
escasa dureza de las rocas. Se halla flanqueado por mesetas de altura variable,
pero que tienden a disminuir hacia el este. En el corte de la meseta aparecen
las barrancas que acompañan al río en todo su recorrido, las mismas no superan
los 200 mts. de altura. Sin embargo, estas alturas no impidieron el acceso al
cauce del río tanto a los grupos humanos primitivos que se desplazaban por los
valles, antes de la llegada de los españoles como tampoco a los que
posteriormente se asentaron en ellos.
Sin
embargo atraviesa una región de pobreza hídrica con escasas lluvias, y por lo
tanto insuficientes para alimentar algún curso de agua. Los registros
pluviométricos en toda la cuenca del río Negro son: para Alto Valle
180
mm.,
Valle Medio 325
mm.,
Valle de General Conesa 330
mm.
y Valle Inferior 396
milímetros
anuales de promedio, en este último caso con algunas variaciones de acuerdo a
años más o menos lluviosos, que pueden superar los 500
mm.,
o excepcionales como en el año 1997 en el que superó los
600
mm.
1.2.
El Valle Inferior.
Delimitar
el área es una tarea difícil, sobre todo para determinar los límites. Para tal fin se buscó un criterio que
permitiera definir al territorio que ocupa el Valle Inferior del Río Negro. Pero
además que ese límite incluya a la mayor cantidad de elementos que están a ambos
lados del mismo, ya que generalmente cuando se habla del Valle Inferior, sólo se
hace referencia a Viedma y a la zona rural bajo riego.
La
diagonal fluvial que le sirve de eje atraviesa al área desde los 64º a los 62º
de longitud oeste de Greenwich con dirección Noroeste a Sudoeste y entre los
paralelos 40º a 41º de latitud sur del Ecuador. Sobre esta línea se apoya el
curso inferior del río Negro, que aquí se lo considera desde la Primera
Angostura hasta la desembocadura en el Océano Atlántico, recorriendo una
distancia de ciento diez kilómetros aproximadamente.
Es
de destacar, que el río Negro en todo su curso es un río alóctono, pues no
recibe ningún afluente, pese a la pérdida de caudal que le ocasiona la
evaporación, la infiltración y sobre todo el uso que se hace de sus aguas para
el riego de los cultivos en todo el valle del río, a pesar de esto conserva
siempre un importante caudal que le permite alcanzar su nivel de base en el
Océano Atlántico.
Por
lo tanto, el criterio que se propone como el más conveniente en este caso es:
"considerar a ambas márgenes del río por la relación funcional que la población
que lo habita, tenga con el mismo",
en función del uso que se hace del río que constituye los elementos que lo
integran. Lo cual constituye una unidad geoespacial.
Esa
relación puede ser directa o indirecta, por ejemplo la utilización del agua del
río para riego o para consumo. Una forma fue su uso como ruta de acceso al
interior, a partir de la llegada de los españoles en 1779, como así también con
el fin de poblar ese territorio, de explotar los recursos que en él se
encuentran y por último hay que destacar el uso del recurso agua para riego,
etc.. Se observa que a través de la historia los usos a los que se sometió este
río han sido distintos, de acuerdo a las épocas y las circunstancias. En el
sector de secano por ejemplo el agua del río se la ha utilizado para abastecer
de agua a los bebederos para los animales, tomando el agua directamente del río
o de los canales.
Es
además, este criterio que históricamente ha prevalecido en el Valle Inferior y
al cual se puede llamar de ahora en más "de uso del río". Si bien el mismo ha
sido diferente según el momento y la situación político-económica, a lo largo
del proceso de ocupación del Valle Inferior. Se puede afirmar entonces que es
una unidad geográfica constituida por un espacio atravesado en toda su extensión
por el cauce del río Negro en su tramo inferior, elemento natural que actúa de
dos maneras: "como actor dominante y como eslabón de unidad del
paisaje".
Por
otra parte, en el valle inferior se observan diferentes unidades de paisajes:
por un lado el formado por el valle delimitado por las cuchillas norte y sur,
las cuales se enmarcan perfectamente en un área donde se distinguen las
diferentes acciones culturales y por otro el que aparece al subir a la cuchilla
en el sur y la altiplanicie de Patagones en el norte. Allí arriba es donde los
límites se desdibujan y adquieren una mayor flexibilidad, dada sobretodo por las
características geomorfológicas. Como así también por las actividades que se
realizan en el sector y por la relación que se establece con el río. Al norte se
observa la actividad agrícola-ganadera propia del paisaje de la pampa húmeda, a
pesar de encontrarse en la cuña seca. En cuanto al sector sur del río, las
actividades que aparecen están relacionadas con la agricultura bajo riego y al
ascender sobre la cuchilla actividades relacionadas con la ganadería extensiva y
de secano.
El
conjunto constituido por la margen norte tiene dos sectores de distinta
pertenencia, desde el punto de vista jurisdiccional, uno ubicado en la provincia
de río Negro donde se encuentra la localidad de Guardia Mitre y el otro en el
Partido de Patagones, en la Provincia de Buenos Aires, que comprende desde el
meridiano quinto hasta la desembocadura. Es una angosta faja que alcanza pocos
kilómetros de ancho, donde se encuentra la ciudad de Carmen de Patagones,
cabecera del partido el mismo nombre, a 40º 47' de Latitud Sur 63º 01' de
Longitud Oeste y a 40
m.s.n.m.
Es
así, que el Valle Inferior presenta la margen norte más alta y estrecha que la
margen sur que es baja, plana y amplia. En esta última, en la denominada margen
sur, se encuentra el valle fluvial propiamente dicho de diez a trece kilómetros
de ancho, que se extiende como ya se mencionó desde la Primera Angostura hasta
la desembocadura. Esta extensa planicie se desarrolla en forma paralela al cauce
del río y ocupa un espacio que va desde la ribera del mismo hasta la cuchilla,
este último término es el que se utiliza para denominar aquí al borde de la
meseta patagónica, que recorre el límite sur del valle.
Así
se pueden observar dos ambientes distintos, uno al norte del lado de Patagones
formado por el angosto pie de la cuchilla y sus desniveles, con la llanura
localizada sobre la misma. Y el otro ambiente en el sur con características
distintas, formado por la planicie del valle y el borde de la meseta. Es decir
un paisaje de valle de río que integra dos unidades naturales diferentes. En
este último caso el territorio que hemos definido abarca algo más de 80.000 has.
en forma de faja de 8 kms. de promedio. Con una altura sobre el nivel del mar
que varía entre 5 y 30 mts. Así podemos decir que el paisaje natural que aparece
en su margen norte, una vez superada la barranca, presente como forma
predominante del relieve una planicie con algunas depresiones o bajos sin
salida, interrumpida por el valle del río Negro.
En
cuanto a los bajos mencionados que están ocupados por las salinas o salitrales
son particularmente notables en el sur del Partido de Patagones, son otro de los
elementos que se detectan en este paisaje, estos presentan un fondo casi plano y
en algunos casos tienen agua casi todo el año y cuando esta se seca aparece la
capa salina de un cierto espesor.
Todo
este sector desde sus aspectos geológicos se halla dentro de la llamada Cuenca
del Colorado, estas planicies se presentan como un relieve poco diferenciado
semejante a una llanura suavemente ondulada. Su pendiente general es muy escasa
y se desarrolla en sentido Noroeste-Sudeste, con alturas máximas que no superan
los 100
m.s.n.m.
en forma superficial y con profundidades variables presenta arenas, arcillas y
cantos rodados. Esta forma de relieve es el que localmente se denominan
"campos", es decir establecimientos rurales que se dedican a diferentes
actividades.
Cruzando
el río hacia el sector al sur del cauce se llega a la planicie aluvional, que
forma el paisaje de valle propiamente dicho, esta es un área con un ancho
variable, que va desde los 200
metros
en la Primera Angostura y hasta 15 kms. en la desembocadura. En esta planicie se
encuentra la ciudad de Viedma, capital de la Provincia de Río Negro a 40º 51' de
Latitud Sur, a 63º 01' de Longitud Oeste y a 4
m.s.n.m.
Un
rasgo característico son las barrancas del valle inferior a las que localmente
se las denomina "cuchillas". En ellas suelen destacarse levemente del nivel
general ciertos promontorios que en la zona se denominan "cerros". Ejemplo de
esto es el Cerro de la Caballada en Carmen de Patagones, que solo alcanza a
41
m.s.n.m.,
pero es un punto de referencia local.
Estas
se encuentran a ambos lados del valle y son parte de la unidad glacis terrazado
cubierto (Capitanelli) comúnmente denominado barda o cuchilla. Su génesis
responde a procesos complejos, fundamentalmente morfoclimáticos. Las cuchillas
como se las denomina en el Valle Inferior son un localismo como vocablo, ya que
en realidad es la misma terraza del río que se extiende desde la confluencia
hasta la desembocadura. Pero es interesante ver que estas adquieren diferentes
nombres según la zona, depende donde nos encontremos, en el Alto Valle se la
llama barda al igual que en el Valle Medio o barrancas y aquí es cuchilla. El
origen de estas diferentes denominaciones es supuestamente sociolingüística. Ya
que si bien el fenómeno geomorfológico es el mismo, la forma de denominarlo
cambia según cual es el sector de la cuenca fluvial en el que nos encontramos.
Este último significa según el Diccionario de la Real Academia de la Lengua
Española barranca/o se denomina a: 1) despeñadero, precipicio, quiebre profundo
que abren las aguas en el suelo (2) hendidura profunda que hace a la tierra el
agua (3) zanja de paredes ruinosas que entalla los conos volcánicos constituidos
por materiales sueltos.
Cuchilla:
en Argentina, Cuba y Uruguay, eminencia prolongada cuyas pendientes se extienden
hacia el llano. Barda, en América Meridional se denomina a un extenso manto de
roca basáltica, de color oscuro y determinaciones abruptas. Esta forma diferente
de llamar a este elemento tan representativo de las geoformas locales como son
las terrazas como parte de la unidad de glacis del pie de la meseta constituye
una variación diatópica, es decir que tiene que ver con el lugar donde surge y a
pesar de similitud semántica, las distintas denominaciones están muy
circunscriptas localmente.
En
cuanto a su ancho, desde su origen en Primera Angostura hasta unos 25 kms. el
valle es más bien angosto, de relieves uniforme, presentando una serie de
accidentes fisiográficos en forma de numerosos meandros y brazos inactivos del
río ubicados al final de esta parte estrecha.
A
partir de esta zona la barda cambia bruscamente su orientación, tomando rumbo
sudoeste, el valle se ensancha aquí hasta un ancho máximo de 13 kms. El relieve
superficial del terreno es uniforme, y la zona costera del río presenta
numerosos brazos y meandros fuera del curso actual de escurrimiento, vestigios
de anteriores divagaciones del río, en unos 27
kilómetros
más de recorrido.
A
los 52 kms. de su punto de origen el valle toma un ancho uniforme que oscila
cercano a los 10 kms., aquí el río pierde su carácter divagante, con islas en su
curso y sigue manteniendo su carácter meandroso. A continuación y luego de pasar
la ciudad de Viedma, el cauce se define claramente hasta desembocar en el
océano.
Todas
estas estructuras son producto de la dinámica fluvial, que es el máximo artífice
de los microrelieves que presenta el valle. Se destaca "la franja de meandros,
de trazado y ancho irregular, que es el resultado de las divagaciones del río
que además se caracteriza por la profusión de los mismos, algunos activos y
otros abandonados. Entre estos últimos los hay tanto con agua como secos. El
albardón se interpone entre la planicie de inundación y el lecho actual del río,
2 que los bordea es bien drenado y favorece los asentamientos
humanos.
El
valle continúa hacia el mar por una llanura suavemente ondulada, con una zona
baja y muy plana, conocida como "Bajo del Juncal", hoy en día seco, debido a que
desde 1930 la construcción de un dique de tierra impide el paso del agua.
Completaban el paisaje la "Laguna del Juncal" y zanjones naturales con algunas
compuertas que regulaban la entrada y salida del agua por efecto de las mareas.
Un
elemento para destacar, que interviene activamente en el movimiento de las
aguas, son las mareas que en el curso inferior del río Negro se siente su acción
hasta unos 35 kms. de la desembocadura. En cuanto a la salida al mar esta se
encuentra obstruída por una barra de bancos de arena que hacen difícil la
navegación.
Ya
en el litoral marítimo, este presenta dos ambientes bien diferenciados según
observemos la costa bonaerense o la rionegrina. En el primer caso la costa es
baja, presenta la formación de dunas como microrelieve preponderante, con una
importante faja de médanos costeros. Por el contrario, el litoral a partir del
faro del Río Negro, es una costa alta (hasta 50 mts.) de acantilados, a cuyo pie
se presentan grandes bloques producto de los derrumbes dada la acción constante
del mar sobre la base.
1.2.1.
Las islas dentro del Valle Inferior.
El
Valle Inferior posee otro ambiente natural que lo forman las numerosas islas,
entre las que se destacan, por su tamaño, la Isla Mulhall, frente a Guardia
Mitre y por su proximidad a Viedma las islas Gral. Wintter, Cmte. Simone, entre
otras. Estas se distribuyen en casi todos los sectores del río en su tramo
inferior. El conjunto de islas ha sido un elemento importante en la construcción
del territorio ya que fue asiento de grupos de familias que desarrollan en las
mismas distintas actividades económicas.
En
cuanto a la cantidad, se cuentan más de treinta islas en el Valle Inferior, de
muy diferentes tamaños y condiciones físico - naturales, por lo que su
utilización también cambia de una a otra, es reconocida la fertilidad de los
suelos que las mismas contienen. Estos son los que han permitido desde hace
muchos años su explotación agrícola – ganadera. En cuanto a la primera actividad es variada, una
de las producciones más importantes
es la de vid para la elaboración de los vinos de las islas, que son muy
reconocidos desde hace muchos años, como el vino Churlaquin, en algunas de las
islas se pueden observar todavía las instalaciones de las bodegas en algunos
casos abandonadas. Como así también
la producción de uvas
frescas para consumo de mesa, producción que se coloca principalmente en el
Valle Inferior colocando en el mercado hasta el mes de mayo. Otra de las
actividades de las islas esta relacionada con el cultivo de nogales, cuyas
variedades se han adaptado muy bien a los suelos con una producción importante
que se coloca tanto en el mercado
local como fuera de este. La actividad de cultivo de verduras y hortalizas fue
muy significativa hasta la construcción del área bajo riego del IDEVI –
Instituto de Desarrollo del Valle Inferior, de todas maneras se sigue
manteniendo en algunas de las islas esta
actividad. En cuanto a la actividad ganadera es de destacar la cría de
ganado ovino como otra fuente de ingresos para los productores
isleños.
1.2.2
El Clima del Valle Inferior
En
cuanto al clima del Valle Inferior y según los datos meteorológicos de las
estaciones Carmen de Patagones y Viedma, instalada en el Aeropuerto Gobernador
Castello, del Servicio Meteorológico Nacional, que están en el área del Valle
Inferior, y en base a los antecedentes climáticos analizados se establece que el
área de estudio pertenece a una zona de clima seco estepario, con condiciones de
semiaridez. Con una elevada tasa de evaporación durante la primavera-verano por
las altas temperaturas, una gran insolación con baja humedad relativa y la
existencia de vientos de alta intensidad, debido a la baja presión atmosférica,
generando así la aridez del medio.
El
área se ubica en una zona climática seca, de tipo estepario y semiárida,
mesotermal, sin períodos de exceso de agua durante el año y con baja
concentración térmica en verano. Las precipitaciones medias anuales del área se
ubican entre los 360
mm.
y los 400
mm.,
con gran variabilidad, propia de las zonas áridas, con una distribución uniforme
a lo largo del año, con picos de marzo a abril. La velocidad promedio anual del
viento es de 19,5 Km/hora.
Para
el Valle Inferior, se aprecia un aumento de la precipitación media anual con
respecto a Carmen de Patagones posiblemente debido a la posición de ambas
estaciones, una a 40
m.s.n.m.
y la otra a tan solo 4
m.s.n.m.,
circundada por parcelas irrigadas y con cortinas forestales desarrolladas a los
cuatro vientos. Esto podría generar un microclima favorable a un leve aumento en
la cantidad de lluvias anuales.
Respecto
al caudal medio aforado a la altura de la Primera Angostura es de 957 m3/seg.
Antes de las obras de infraestructura que se hicieron aguas arriba de la cuenca,
eran comunes las inundaciones provocadas por el río Negro.
Por
lo tanto, esta masa de agua del río Negro ha depositado considerable cantidad de
material sobre el piso del valle, en procesos relativamente reciente. Este
material depositado aguas arriba de San Javier, consiste en arenas, gravas y
arcillas mezcladas en variadas proporciones, lo que depende de las
características meándricas del río. En cambio, aguas abajo de San Javier abundan
los depósitos de grano fino, que estos siguen apareciendo hasta llegar a la
desembocadura del río en el océano.
El
déficit hídrico del área, entre octubre y marzo sitúa a la escasez de agua como
el factor limitante de la producción forrajera y pecuaria.
En
cuanto a la vegetación la región pertenece a la provincia fitogeográfica del
monte, subregión Monte Pampeano del Nordeste de la Patagonia, caracterizado por
el predominio de estepas arbustivas altas y medias dominadas por jarilla Larrea
divaricata.
1.3.
Unidades de Paisaje
los
paisajes culturales son el resultado de las transformaciones de los procesos
sociales que los grupos humanos realizan a través de sus actos y valores. Es así
que la interrelación de los elementos culturales y naturales complejizan y
dinamizan los territorios.
Leimgruber
W. (2003) sostiene que la cultura entendida por la “cantidad de valores y
tradiciones que caracterizan a una sociedad y que han sido transmitidas a través
de la historia, modificadas sucesivamente”.
“En
cualquier tiempo y lugar, los grupos sociales, desde los estadios
más
primitivos hasta las modernas sociedades capitalistas industriales, por ejemplo,
establecen determinados modos de relación con su espacio; en otras palabras lo
valorizan a su modo. En el interior de ese proceso, podemos identificar
relaciones culturales con el espacio, en sentido estricto, un grupo social
primitivo, por ejemplo, aunque con una tenue y provisoria fijación en un
determinado espacio expresará, a partir de esa relación, una serie de
manifestaciones: mitos, ritos, cultos, sacralizaciones, etc. el mismo modo,
expresará con su trabajo y sus técnicas, formas de apropiación y explotación de
ese espacio, marcándolo con sus necesidades y su modo de producir y, por que no,
impregnándolo con su cultura.
“En este
sentido, su espacio posee límites cuyo trazado no esta constituido por líneas
rígidas sino por zonas que se destinan a delimitar el espacio de recursos
necesarios a la reproducción biológica y cultural de ese grupo. Es importante
destacar que cuando un grupo proyecta sobre el espacio sus necesidades, como así
mismo la organización para el trabajo y la cultura en general proyecta
igualmente las relaciones de poder que se desarrollan en su
interior.
“Por
eso, toda sociedad que delimita un espacio de vivencia y producción se organiza
para dominarlo, lo transforma en su territorio”. (Da
Costa, M. 1995, pág.18).[1][1]
Si
bien los paisajes son multifuncionales en “cada sector del mismo predomina una
función en un momento dado, de acuerdo a las pautas culturales, decisiones
políticas y socioeconómicas del grupo humano que lo ocupa, apropia y utiliza sus
potencialidades (Zinger A. y otros, 1999, 61). Así dos aspectos fundamentales
del espacio geográfico: fisonomía y función, permiten delimitar las unidades de
paisaje que predominan en un lugar, las cuales cambian con mayor o menor
rapidez, de acuerdo a la incorporación de tecnología o se deprimen debido a la
polifuncionalidad potencial que poseen.
En
el caso del área de transición entre el Sur Bonaerense y la Patagonia, podemos
definir diferentes unidades de paisaje de acuerdo al espacio aquí descripto
y a los conceptos analizados hasta
aquí. Estas unidades de paisaje se organizan en función de un conjunto en el
cual se contienen que es el Valle
Inferior del río Negro.
En primer lugar tenemos el paisaje de “los
campos” donde la actividad principal es la agrícola ganadera, por lo tanto
estamos frente a una unidad de paisaje de fuerte influencia del hombre. En
segundo lugar dos unidades de paisaje urbano, una sobre ambas riberas del río
las ciudades de Viedma y Patagones, siguiendo aguas arriba se ubican las
localidades de San Javier y Guardia Mitre, estos centros conforman los paisajes
urbanos del valle. Por otro lado y muy próximo a la desembocadura del río Negro
se encuentra el balneario El Cóndor, en la costa del Océano Atlántico. En tercer
lugar el área del IDEVI (Instituto de Desarrollo del Valle Inferior)
conforma un valle irrigado de más
de 50.000
ha
en explotación, principalmente de actividad frutihortícola y algunas chacras de
explotación ganaderas. En cuarto lugar las islas es una unidad de paisaje con
fuertes cambios, en fuerte actividad en décadas anteriores, que han pasado por
un fuerte proceso de abandono y que en algunos casos todavía continua, mientras
que en algunos casos están en recuperación, un paisaje natural de gran
significación en el Valle Inferior, hoy podemos decir que es un espacio olvidado. Por último las
unidades de paisaje natural con fuerte presencia de lo físico lo componen las
“cuchillas” en el sur de esta área de transición y los salitrales en los bajos
de la zona norte del valle en la planicie sur bonaerense. Fuera de la zona de
riego sistematizada aparece otra unidad de paisaje que es el de las estancias en
la costa del río cuya superficie se extiende desde el río y sube la cuchilla
sur.
Finalmente
podemos decir que estamos ante una zona de transición de multivariados paisajes
en donde las relaciones de poder se entremezclan con fuerza en la construcción
de social de los mismos. Por lo tanto como toda transición tiene la riqueza de
la variedad, el contraste y la complejidad.
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