|
Caleta Olivia está ubicada en un lugar privilegiado.
Erguida sobre la Cuenca del Golfo San Jorge, nació en una geografía que
para los cartográfos del petróleo tiene un trazado diferente al que
tradicionalmente vemos en los mapas: atraviesa la Patagonia, desde la
Cordillera hasta el Atlántico, desde el sur de Chubut hasta el norte de
Santa Cruz, y se prolonga debajo del océano, donde crecen plataformas
petroleras submarinas. Es la tierra que tiene a Repsol YPF SA como
principal operador, quien concentra casi el 50% de la producción de la
Cuenca. Es la tierra de las empresas AMOCO Argentina y Bridas SAPIC,
unidas en Pan American Energy, que se quedó con el 24% de la producción de
la zona. Es, además, la tierra de Total Austral y Tecpetrol, que si
bien tienen una participación porcentual reducida, están a cargo de la
explotación de generosas áreas centrales. El resto se lo dejan a empresas
que tienen a su cargo la explotación de áreas pequeñas, como Astra y
Vintage Oil, entre otras Y es, por si fuera poco, la anfitriona de las
empresas prestadoras de servicios petroleros como Halliburton Argentina
SA, Western Atlas, Schlumberger SA, Río Colorado-Servoil, Pride
International, BJ Services y San Antonio, entre otras. Nombres, todos,
que confluyen en una central operativa, el corazón de esta república de
monopolios internacionales, bautizado con la misma lógica de fantasía:
Termap. Allí fueron a pedir trabajo los que todavían quieren ser
ciudadanos en Caleta Olivia. Veamos qué puerta golpearon y a dónde se
metieron. Dice la página web de esta empresa: "TERMAP S.A. opera
desde febrero de 1994 las terminales de Caleta Córdova y Caleta Olivia
ubicadas en las provincias de Chubut y Santa Cruz, respectivamente, en la
República Argentina. Ambas terminales reciben el crudo de los distintos
yacimientos de la cuenca del Golfo San Jorge. El petróleo es almacenado y
preparado para ser bombeado a los buques tanques, de hasta 160.000
toneladas de Porte Bruto, que amarran en las monoboyas distantes a 3.500
metros de la costa por el personal de TERMAP". Los dueños de Termap son
los dueños de la Cuenca del Golfo San Jorge: la presidencia la ejerce YPF;
la vice, Pan American Energy y el tercer escaño lo ocupa Tecpetrol, el
alias petrolero del Grupo Techint . En el directorio hay asientos ocupados
por Shell, Total Austral y Vintange Oil, entre otras operadoras de la
zona. Ahora bien: mensualmente, TERMAP S.A. recibe de los productores
de la Cuenca del Golfo San Jorge un volumen promedio aproximado de
petróleo crudo de 1.250.000 m3. Imaginemos entonces qué significa ese
millón y cuarto de metros cúbicos de petróleo el mes en que el barril de
crudo alcanzó su cotización récord: 50 dólares. Estamos en setiembre de
2004, en Caleta Olivia y los tradicionales mapas la ubican a miles de
kilómetros de Wall Street. Pero en Termap, la capital de la Cuenca del
Golfo San Jorge, el mundo tiene otras dimensiones. Es fácil deducir
entonces a cuánto se cotiza allí la sensibilidad de los mercados: tres
mujeres y tres hombres están desde hace un mes encerrados en una comisaría
acusados de asociación ilícita, resistencia a la autoridad, daños,
obstrucción de la producción y coacción. Hombres y mujeres que fueron a
exigir trabajo en un tiempo y un lugar clave. Veamos
cúales.
Noticias de otro planeta En setiembre de 2004 el huracán
Iván paralizó las instalaciones petroleras en el sudeste de Estados
Unidos, que representan el 25 por ciento de la infraestructura petrolera
del país. En setiembre de 2004, un grupo armado, acusado de traficar
petróleo, amenazó al gobierno de Nigeria con librar una "guerra total" a
partir del 1º. de octubre y recomendó a las grandes compañías petroleras
extranjeras que se vayan de la región del delta. El grupo anglo-holandés
Shell anunció el cierre de una estación de bombeo que produce 28.000
barriles diarios debido a a la inseguridad en la región. Los dos
hechos, producidos en lugares y por razones tan dispares, fueron
comentados el mismo día por el Ministerio de Finanzas de Alemania. Dijeron
que, según el FMI, la economía global estaba en serio riesgo. Los
diarios del mundo, en general, y de la Argentina, en particular,
comentaron la noticia en sus portadas. En Termap, en cambio, informan
de otras noticias. Es 30 de setiembre, son las 7 de la mañana y ese
día hay cuatro buques operando. Repsol se lleva en uno 62.000 m3 de crudo
y Pan American, 43.000m3. Hay otros 150.000 m3 esperando, sin dueño
identificado. En la puerta de la planta, unas cincuenta mujeres
reclaman a los gritos la libertad de los presos y, adentro, la
gendermadería custodia que la transfusión se realice sin
sobresaltos. Pero esa no llegará a ser noticia, porque no podrá leerse
en ningún lado.
La asociación "lícita" Las mujeres presas tienen
nombre. Una se llama Elsa. Otra Marcela. La tercera, Selva. Una
tiene siete hijos. Otro, un bebé que la cárcel privó de la teta. La
tercera dejó a los chicos con la vecina, porque es cabeza de
familia. Las multinacionales no tienen nombre. Se esconden detrás
apodos, camuflan nacionalidades y van dejando huellas parciales de su
composición accionaria en los diferentes rincones del planeta en donde
operan. Seguirles el rastro significa penetrar el laberinto de espejos
que alguna vez imaginó Borges. Veamos hasta dónde llegamos. Alguien
en Caleta Olivia dice Repsol. Y otro alguien responde: empresa
española. La historia registra que Repsol nació como una pequeña
petrolera, concentrada en la refinación y comercialización de crudo para
el mercado español. Sus actividades estaban concentradas en África del
Norte donde extraía el 60% de su petróleo. A principios de la década
del '90 aprovechó la privatización de YPF para establecerse en la
Argentina, con la idea de expandirse en América Latina. Hasta aquí,
nada nuevo. En el año 1994 sus ingresos operativos sumaban 14.255
millones de euros. En el 2003, alcanzaron los 37.206 millones de
euros. Ahora bien ¿ quién ganó ese dinero? Según informa su página
web, al 31 de marzo de 2004, sus principales accionistas son: 1)
Repinves 5,6% 2) Repcon Lux 4,8% 3) Caixa 10,2% 4) BBVA (Banco
Bilvao Vizcaya) 6,3% 5) Free float 73,1% Información que, traducida
al castellano, significa que nadie puede asegurar quién es dueño de
Repsol. Veamos por qué. Y cómo. 1) Repinves es el apellido del
matrimonio por conveniencia que mantuvieron durante siete años la Caixa y
la Caixa de Catalunya. Técnicamente, un joint venture. No los unía el
amor, sino exclusivamente las acciones de YPF. El 2 de abril de este año
decidieron separarse y anunciaron públicamente así los términos del
acuerdo: "La nueva composición accionaria de Repinves será: 67,6% de la
Caixa, que trasladará a esta sociedad un 1,065% de su participación
directa de Repsol y 32,4% de Caixa Catalunya. Repinves mantendrá una
participación del 5,02% en Repsol YPF. La participación global de "la
Caixa" en Repsol YPF seguirá siendo de un 12,5%, un 9,10 corresponderá a
su participación directa y un 3,40% a través de Repinves". Lejos de
prentender que alguien entienda algo de este entuerto, el único fin de
reproducir aquí el comunicado de Repinves es hacer notar que los
coeficientes de participación en YPF mencionados no coinciden con lo
comunicado en la página oficial.
2) Repcon Lux dice que tiene por
dueño un fondo sin fines de lucro de Holanda, del cual la petrolera
estatal mexicana PEMEX es la garante. Es accionista de Repsol desde 1979 y
acaba de anunciar que venderá esa participación en una operación de bonos
que se cotiza en 1.400 millones de dólares (recuérdese que vende sólo el
4,8%). La operación es coordinada por UBS, Merrill Lynch y JO Morgan
Securities, que fue comentada así por los portales especializados:
"Los empresarios en México ahora quieren escuchar ofertas de boutiques
financieras europeas especializadas en estos vehículos, algo complicados
pero efectivos a la hora de generar fondos sin afectar el balance. Sin
querer ser muy negativo, hay que decir que esto es muy al estilo de los
tejanos de Enron" .
3) La Caixa fue una caja de ahorros nacida a
mediados del siglo pasado en Cataluña y ahora es la mayor caja de ahorros
de Europa y el tercer grupo financiero de España. Es accionista destacada
en las principales empresas de servicios e infraestructuras españolas.
Autopistas, empresas de gas, de suministro de agua, de hidrocarburos, de
telecomunicaciones, etc., son algunas de las inversiones que ha realizado
en los últimos diez años. Posee, entre otras cosas, el 5% de las acciones
de Telefónica y el 6% del BBVA.
4) BBVA comienza en 1857, cuando la
Junta de Comercio de España promueve la creación del Banco de Bilbao. En
la década de 1970, produce las primeras incorporaciones de bancos locales,
básicamente de Latinoamérica. Pero es recién a partir de 1995 cuando BBV
desarrolla una estrategia de expansión internacional que le llevó a
construir una gran franquicia en América Latina, cuyo significado real
conocieron todos los argentinos atrapados por el "corralito": BBVA es para
Latinoamerica un Mac Donald´s bancario. Así, en 1995 entra en Perú, con la
privatización del Banco Continental, y en México, con Probursa. En 1996,
llega a Colombia con Banco Ganadero y a la Argentina con Banco Francés. En
1997, entra en Venezuela de la mano de Banco Provincial. En 1998 se
instala en Chile con el Banco BHIF. En el año 2000 llega a México, con la
fusión de BBV Probursa con Bancomer. Y en octubre de 1999 anuncian la con
Argentaria, que concluye recién en febrero de 2001. Argentaria es un fondo
de inversión (es decir, especulación) que tiene inversiones "temáticas":
Telecomunicaciones, Sanidad y Privatización Global. En la Bolsa de Madrid
a este nuevo grupo -que se denomina Banco Bilbao Vizcaya Argentaria- lo
presentan así: "BBVA es la sociedad dominante de un Grupo de entidades que
realiza actividades bancarias, de mercado de capitales y otros servicios
financieros, tanto en Europa como en Latinoamérica. BBVA ( Banco Bilbao
Vizcaya Argentaria) es el resultado de dos fusiones, la primera realizada
el 1 de junio de 1988 entre el banco de Bilbao y el Banco de Vizcaya en la
que adoptaron la fusión paritaria de ambas sociedades, y de un segundo
acuerdo de fusión entre el Banco Bilbao Vizcaya, Argentaria, Caja Postal y
Banco Hipotecario el 1 de enero de 2000".
5) Free Float, se podría
inferir, es el verdadero dueño de Repsol. Por la cantidad de acciones que
representa y por lo que encarna: el casino del capitalismo global.
Entremos. El fondo de inversión Fidelity International Limited
tiene su sede central en Bermudas y una filial estadounidense llamada
Fidelity Management & Research Corporation (FMR). Así lo presentaba un
especialista : "El fondo es fiel a su nombre y está claramante orientado
hacia el crecimiento. Tiene una sobreexposición a los sectores de medios
de comunicación y de tecnología y está fuertemente ligado a los sectores
más defensivos como el manufacturero, con la excepción, sin embargo, de
las compañías energéticas. Tampoco le importa invertir en los mercados
emergentes". Fidelity es un levantador de apuestas. Tiene seis mesas de
black jack a las que llama: fondos internacionales, europeos, americanos,
asiáticos, sectoriales y de colocación de activos. Cada uno de estos
fondos tiene un groupier responsable de dar las fichas. Le dicen "canasta
de inversiones". Hay una en especial que nos interesa en este caso.
Su groupier es Joma Kanhonen. La mesa se llama Iberia Fund E y del
juego participan no más de 40 inversores individuales. En la presentación
-titulada "filosofía y estilo de la inversión"- se lo explica así: "el
objetivo consiste en obtener un crecimiento de capital a largo plazo
mediante una cartera de inveriones diversificadas". Veamos cuáles: Unas
fichas son para el Banco Santander Hispano. Otras para
Telefónica. Otras para el BBVA. Y algunas más para Repsol. Fue
así como el Fidelity Found compró por cuenta de los jugadores el 2% de las
acciones de Repsol. Este es el juego que llaman free float.
A
esta altura, si alguien sobrevivió a la lectura de semejante enredo,
merece no solo un aplauso, sino una revelación: nada de lo que se contó
hasta acá sirve para saber quién es el principal dueño de Repsol. Para
empezar a conocerlo hay que leer el diario español de El País del 10 de
noviembre de 2002. Allí se anunció que el mayor accionista de Repsol es un
californiano: "Una gestora norteamericana, Brandes Investment Partners,
ha desplazado a la banca española como primer accionista de Repsol-YPF. La
californiana Brandes, propiedad exclusiva de un financiero del mismo
nombre, se convirtió en uno de los principales accionistas institucionales
de Telefónica y de BBVA en España, de Portugal Telecom en Portugal y de
Telmex y su filial América Móvil en América Latina". Cuenta también con
participaciones superiores al 2 % en Unilever, Hitachi, BAT, Matsushita o
Tyco y Volkswagen. Sin embargo, tampoco este diario tenía razón. No
es cierto, como aseguró El País, que Brandes pertenezca a un solo
propietario. Tal cual informa el propio fondo, así fue en los comienzos.
Pero la estructura de la corporación fue cambiada en 1985, primero; en
mayo del 96 después y, por último, en junio de 2002, hasta licuarse en
anónimas manos, apenas unos meses antes de la inversión en Repsol.
Agotada la información, nos quedan los chismes. El diario argentino
Ambito Financiero presentaba la noticia del mayor accionista de Repsol de
otra forma: "Los operadores de acciones en Wall Street aseguraban -en
una rueda cargada de versiones- que detrás de Brandes estaba una petrolera
norteamericana (¿Mobil?) o bien Pérez Companc". Esto era lo que se
especulaba hace casi dos años. Pero estamos en setiembre, con el crudo
por las nubes y, al decir del FMI, con una seria crisis de la economía
global. En Caleta Olivia está claro. Los dueños de todo son
otros. Y con rejas acá o con guerras allá, nos están revelando quiénes
son.
Fuente: www.lavaca.org
. |