NCeHu
1385/04
Argentina
SOBERANIA ALIMENTARIA,
ESA ES LA CONSIGNA DEL GRUPO DE REFLEXION RURAL, PERO ES ALGO MAS QUE UNA
CONSIGNA…
EL CAMPO Y LA SOJA PARA UN PROYECTO DE PAIS
DEPENDIENTE
Elena Luz González Bazán 27/08/2004
El Grupo de Reflexión Rural fue conformado por la
década del ´90, aquellos que se fueron al campo, abrazaron la defensa
del Medio Ambiente, buscaron formas de rechazo a la dependencia al modelo
neoliberal para nuestros países latinoamericanos. Fueron los que denunciaron y
lucharon contra el monocultivo de la soja, los transgénicos, el cuidado del agua
y de las fuentes de vida, se los tildó de quebrados o preocupados por temas
menores. La vida ha demostrado, palmariamente, que esos denostadores quedaron
atrapados en sus propias telarañas y cooptados por el sistema. Y los denostados
metieron el cuchillo hasta la médula del problema desmintiendo, en la práctica
concreta, que sus planteos no eran críticas superficiales.
Estuvimos con Jorge Eduardo Rulli, un
referente del Grupo de Reflexión Rural.
El no me
recuerda, pero a principios de la década del ´90 fui a cubrir una actividad de
ecologistas y mediambientalistas en la ciudad de Pilar, provincia de Buenos
Aires, ahí estaba Rulli, junto a uno de sus hijos, que en ese momento no tendría
más de cinco o seis años. Ya para esa época tenía ese carácter tranquilo y que
parece siempre sereno. Como mirando otras cosas, con esa forma de reflexionar y
no callar nada.
Su larga trayectoria de militante político y popular
tiene un momento fundamental con la creación de la Juventud Peronista, hacia
1956, plena etapa dictatorial, junto a Gustavo Rearte, Susana Valle, Tuli
Ferrari y Spina. Como tantos militantes sufrió la cárcel, la tortura, fue
perseguido y tildado de quebrado. Sin embargo, en la actualidad Rulli, junto a
un grupo importante de hombres y mujeres conducen el proyecto del Grupo
de Reflexión Rural y caminan el país planteando y denunciando la
devastación de la soja transgénica, de la lucha contra las comercializadoras y
las propuestas para un campo y una producción independiente.
Desde el
programa Horizonte Sur, que se emite por Radio
Nacional, los sábados de 12 a 13 horas, donde el
tiempo no alcanza para dar una amplia cobertura a la realidad nacional, a las
comunidades originarias, a los problemas sociales, y ala batalla inclaudicable
contra cerealeras, gobiernos y funcionarios corruptos, empresas y concesionarias
impunes.
El nuevo emprendimiento del Grupo ha sido poner en marcha, en la
Biblioteca Nacional, el ciclo Cymes-Lewkowicz
sobre la Construcción de pensamiento de Estado en Soberanía y Justicia Social,
con una veintena de expositores. Ciclo que comenzó el 18 de agosto y se llevará
acabo cada quince días (sobre el mismo informaremos en un informe
aparte).
En este reportaje transitamos la realidad del campo actual, del
pasado, el presente y del futuro que nos espera sino tenemos una actitud de
oposición y defensa.
1) Nos podés explicar porqué el Grupo de
Reflexión Rural afirma que la SOJA es una nueva forma de
dependencia.
La Soja y en especial la Soja transgénica, expresa
en la Argentina de los ochenta y de los noventa la incorporación a las nuevas
relaciones de Globalización del Capital transnacionalizado. Como consecuencia
del sistema de la Deuda Externa que requería divisas para pagar sus intereses y
que nos obligaba a una nueva y colosal sumisión, se nos impuso un modelo de
primarización de nuestra economía y, en especial, de agroexportación de
comodities. La combinación de la Siembra Directa con el Glifosato de Monsanto y
las sojas transgénicas aprobadas en 1996, produjeron un salto espectacular en la
producción que alentaron, además, los altos precios del mercado
internacional.
En pocos años la Argentina devino en una potencia en la
producción de piensos, lecitinas y aceites de soja. Las consecuencias de este
modelo fueron el despoblamiento del campo, la miseria y el hambre para las
poblaciones.
2) El glifosato es un herbicida de producción
elemental de Monsanto, hay otras empresas, tienen conexiones: nacional o
internacional.
El Glifosato es un herbicida sistémico propiedad
de Monsanto. Su venta como parte de un paquete tecnológico fue la verdadera
razón comercial de imponer Sojas que por manipulación genética eran tolerantes a
su uso. Cuando, en los últimos años, se vence su patente, los chinos comienzan
su fabricación alternativa y compiten en precio. Monsanto inicia entonces en la
Argentina una demanda por dumping contra China, pero las autoridades no le dan
la razón, pese a que el Ministro de Economía reconoce que en su consultora,
Ecolatina, Monsanto es uno de los principales en su cartera de clientes. De este
modo la Argentina sienta un peligroso antecedente en cuanto al reconocimiento de
China, como economía de mercado, reconocimiento que la enorme mayoría de los
países del mundo, incluyendo a la UE y a Brasil, han negado.
3)
La Soja Transgénica, ¿cuáles son las consecuencias en el campo, para la
producción agrícola y para el ganado?.
Las consecuencias en el
campo del uso masivo de sojas transgénicas van a ser impactantes. En primer
lugar, y junto al despoblamiento, podemos apreciar la instalación de una
agricultura sin agricultores. La soja transgénica no requiere trabajadores, ni
es amigable con la población local, el uso intenso de fumigaciones crea zonas
peligrosas para la salud de quienes habitan en las vecindades de los campos.
Tampoco consumen estos cultivos algún tipo de insumos locales, los grandes
pooles de siembra llegan con sus propios insumos y sus maquinarias y luego se
marchan, llevándose sus ganancias a las grandes urbes, y de allí, y mediante las
exportaciones, a los mercados internacionales.
El crecimiento de los
monocultivos de soja desplaza a otros cultivos como el arroz, las lentejas, la
batata o los tambos, y acorrala a la ganadería en lugares de engorde con
balanceados y hormonas que se denominan feed lot. En simultáneo con los grandes
éxitos exportadores de la soja desaparecen más de doscientos mil unidades
productivas en el campo argentino y el censo registra la disminución de más de
diez millones de cabezas de ganado. Se impone de este modo el nuevo diseño de
Republiqueta sojera.
4) En 1874 la producción ganadera
representaba el 94,5 por ciento en las exportaciones y la agrícola el 0,29 por
ciento, ¿cómo se contraponen los intereses de ambos: ganaderos y productores de
soja?.
El antiguo esquema de poder y de dominio del campo
oligárquico no ha cambiado, sino que por lo contrario, se ha reforzado en un
modelo de mayor concentración. Lo que sí ha cambiado es la clase dominante. La
vieja oligarquía patricia que, al menos temporalmente, habitaba su estancia ha
sido desplazada y en su lugar se impone una nueva clase gerencial y empresaria
que ya no vive en la tierra.
Los años noventa registran los más altos
índices de transferencias de tierras de toda la historia en la Provincia de
Buenos Aires, centro de la zona, núcleo en que se produce con mayor impacto el
desarrollo de los monocultivos de soja. La competencia por menores costos va por
otra parte, dejando en el camino a los más pequeños que son absorbidos por los
otros. Según informaciones empresariales, a finales de los años noventa veinte
millones de hectáreas de las mejores tierras están en manos de tan sólo dos mil
productores
5) ¿Cómo está repartida el mercado de la soja entre:
grandes productores, productores medios, cómo afecta a los
pequeños?
Las sojas transgénicas no requieren mano de obra
rural. Los antiguos puesteros, alambradotes, vendedores de insumos locales,
herreros, repuesteros de maquinaria agrícola, braceros, etc. ya no son
necesarios y desaparecen junto a un modelo del campo argentino agrícola pastoril
que desaparece también con los alambrados y los molinos que daban de beber al
ganado. Y con los poblados rurales y caseríos, en que coincidía la Estación del
Ferrocarril, con la escuela, la sociedad italiana con el templo y los comercios
locales, las casas de los trabajadores rurales jubilados y toda la Cultura
agraria, tradiciones e imaginería que expresaban en la Sociedad argentina esos
cientos y cientos de poblaciones, hoy desaparecidas.
6) La soja
avanza sobre las Comunidades Originarios, los campesinos
pequeños y medios. ¿Cómo los afecta?
La extensión de la
Soja, más allá de la zona núcleo, alentada por la facilidad de su cultivo y por
los precios espectaculares, del mercado internacional, abre nuevas fronteras
agrícolas sobre suelos más frágiles y en general cubiertos de monte nativo. Es
lo que se denomina la sojización de la Argentina. Millones de hectáreas son
desmontadas en las provincias de Santa Fe, Santiago del Estero, Chaco, Formosa,
Tucumán y Salta.
Los ecosistemas nativos y los suelos son puestos en
estado de precolapso, la biodiversidad es gravemente afectada cuando se siembran
hasta las banquinas, las cuencas hidráulicas se contaminan con el uso masivo de
agrotóxicos, el hábitat de los campesinos y de los pueblos aborígenes es
destruido, y se los deja sin posibilidades de sobrevivir en el nuevo desierto
verde de la soja; las poblaciones rurales son desplazadas de ese modo y deben
emigrar a los nuevos cordones de pobreza urbana.
7) ¿Cuales son
las consecuencias que arroja la utilización del Glifosato, en el campo, para
nuestro suelo?, ¿Qué dicen los técnicos del INTA?
El uso abusivo
de un solo patrón agroquímico, el Glifosato, sobre más de quince millones de
hectáreas, provoca una reacción previsible aunque no considerada por los
técnicos oficiales del INTA que festejaron los nuevos desarrollos
biotecnológicos. Decenas de malezas desarrollan resistencia al glifosato y deben
ser combatidas con mayores dosis del producto, llegándose a casos de más de diez
litros por Hectárea y aún así es preciso apelar a otros herbicidas aún más
tóxicos, tales como el 2.4D y el Paraquat que se usan en la preemergencia y en
los barbechos químicos del invierno.
El sistema entra en crisis. La vida
microbiana del suelo es gravemente impactada por tantos tóxicos, la tierra
pierde su capacidad de incorporar la materia orgánica y el rastrojo debe ser
barrido para depositar las nuevas semillas, el descenso de las colonias
bacterianas da lugar a una proliferación fantástica de hongos en medio de los
que, la Roya y la muerte súbita aparecen como las nuevas grandes amenazas de la
agricultura argentina
8) Siendo esta la triste realidad que
dejará la soja a nuestro campo y sus habitantes ¿Qué función cumple el maíz
RR?
El rápido deterioro de los suelos, por pérdida de fósforo,
nutrientes y materia orgánica, en general, conduce a pensar en modos de
recuperación que no incluyan grandes dosis de fertilizantes que por los
capitales que requerirían modificarían las actuales ecuaciones de inversión y de
ganancia. Volver a las antiguas rotaciones agrícolas ganaderas que hicieron
sustentable a los suelos argentinos queda fuera de consideración. Se piensa
entonces en un Maíz de Monsanto asimismo tolerante al Glifosato y que, a
diferencia de las Sojas transgénicas no permite su resiembra sin pagar los
correspondientes royalties a la empresa, porque en este caso es un híbrido que
pierde su vigor rápidamente y, por lo tanto, su semilla debe ser comprada cada
año. Pero las expectativas que abre la reciente habilitación del Maíz RR para
lograr posibles rotaciones del suelo y para evitar un colapso generalizado por
desertización son claramente desproporcionadas y refieren a una mera expresión
de deseos.
9) ¿Cómo se complementa la soja transgénica con el
maíz transgénico?
La rotación con maíz, si bien añadirá materia
orgánica al suelo, será apenas un remedo de verdadera rotación y jamás podrá
reemplazar el bosteo tradicional de poner hacienda sobre el campo. Por otra
parte, la incorporación de un nuevo cultivo resistente a Glifosato no hará sino
aumentar y extender las tolerancias de nuevas malezas que se agregarán a los
problemas ya existentes de competencia sobre un suelo cada vez más empobrecido
en nutrientes. El desequilibrio de los ecosistemas y los peligros de
desertización aumentarán y se harán explosivos en las zonas de reciente
deforestación. Por otra parte, los riesgos de una economía basada en la
exportación de productos primarios y sujetos a los precios internacionales nos
hará cada vez más vulnerables.
10) Con esta
realidad ¿Qué pasa con el mercado internacional y las relaciones bilaterales en
nuestro continente. Y el MERCOSUR.
Será difícil que podamos
afrontar como país los desafíos que nos plantea el comercio internacional, la
relación con el Brasil y con el MERCOSUR, con los restantes países de la América
Latina y en especial con Venezuela, ahora también la relación con China y la
siempre conflictuada relación con Europa, a partir de una economía basada en la
sojización y que nos arrastra a una situación de hambre creciente y de
indigencia poblacional que obliga a mantener más de la mitad de la población
bajo la línea de pobreza y a millones de argentinos indigentes sostenidos por
planes asistenciales.
11) ¿Cuáles son los
factores de poder que empujan a la Argentina transformarse en un país de
tránsito y productor de soja?, o sea un país con producción direccionala: El
Monocultivo.
El modelo de la Soja transgénica es un modelo de
agricultura extractivo, casi minero, un modelo productivista e insustentable,
destinado a favorecer a los países productores de carnes y que condena al hambre
al pueblo argentino. Como consecuencia de la falta de Estado y de un proyecto de
Nación, se nos impone un modelo de país neocolonial sujeto a los vaivenes de los
mercados internacionales, donde el hambre y la pobreza son la consecuencia de
las crecientes exportaciones de granos.
12) ¿Cuál es la propuesta
del G.R.R, hablamos de políticas de Estado?
Frente a este modelo
se hace imprescindible recuperar políticas de Estado, de contralor del comercio
exterior y de precios sostén para los cultivos que aportan a la mesa de los
argentinos. Debemos proponernos la Soberanía Alimentaria como programa político
de una Argentina posible y que debemos conquistar, una Argentina donde el
derecho a la alimentación, sana y abundante, y el respeto a los patrimonios
culturales sea considerado como esencial. Como así también el derecho de los
agricultores a su propia semilla y a los desarrollos locales que permitan
repoblar el campo abandonado. De esa manera: Soberanía Alimentaria y rediseño
poblacional del territorio conforman la propuesta por la refundación de la
Argentina en Justicia Social y soberanía política y económica, que lleva
adelante el GRR, el Grupo de Reflexión Rural.
Esta entrevista nos deja
ese sabor amargo de aquello que fue y se perdió. Pero esto no es una denuncia
como tantas realizadas al viento y a los tiempos de aquellos que buscaron la
fama y el dinero, editando, publicando y denunciando. Que colaboraron en
desmovilizar y desmoralizar a una sociedad que en grandes partes, importantes
lugares de este increíble país y su pueblo, resistió, peleó, luchó y no cejó.
Otros, los que han tenido más oportunidades prefirieron mirar hacia otro lugar,
o lugares. Pero el final con Rulli tiene esa certeza que no es sólo una
denuncia, hay propuestas, hay planes, hay eventos y hay muchos que se organizan
y piensan que podemos pensar en esta Soberanía Alimentaria, en nuestra soberanía
política y económica. Se trata simplemente de conciencia y compromiso. Rully y
todos los compañeros del Grupo de Reflexión Rural tienen los sueños del
sembrador…
Ya están germinando las semillas…
Fuente: www.argenpress.info
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