Luego de 10 años de congelamiento (pese a la inflación) y una
devaluación sin compensación, nuestro salario fue hecho añicos y el presupuesto
universitario reducido drásticamente.
El gobierno de Kirchner no ha
modificado la situación. Mantuvo el congelamiento salarial hasta que la lucha de
los docentes enrolados en la AGD y en la Conadu Histórica lo obligó, con su
movilización, a otorgar un pequeño incremento en marzo (haciendo bonificables
los decretos 1470/98 y 1610/93) y una suma "en negro" en mayo.
El presupuesto
universitario que el gobierno proyecta para el año 2005 incluye sólo un
incremento de 300 millones de pesos destinado a cubrir el aumento ya otorgado a
docentes y no docentes. Así el gobierno somete a las universidades nacionales a
seguir vegetando con su presupuesto (con falta de docentes; sin mejoras de
laboratorios de enseñanza y bibliotecas; sin mantenimiento edilicio, etc.) y a
sus trabajadores a sobrevivir con salarios indignos que ni siquiera equiparan la
inflación.
Los rectores han aceptado el proyecto del gobierno. Se han
disciplinado, como meros gerentes faltando a su deber de defender a las
universidades estatales, a la política universitaria global que impulsa el
gobierno a través de sus ministros de Educación y Economía que mantiene el rumbo
trazado por el menemismo y continuado por De la Rúa, y plasmado jurídicamente en
la Ley de Educación Superior. En la UBA, si bien el Rector y el Consejo Superior
solicitaron la casi triplicación del presupuesto y plantearon la renta de los ad
honorem, fijaron un "incremento" salarial que apenas llega al 15% y no llamaron
a la comunidad universitaria para debatir el presupuesto que se necesita para
mejorar las condiciones laborales y académicas de la universidad.
Mientras el
gobierno declama que no pagará a los acreedores "... a costa del hambre del
pueblo", el gobierno reconoce legitimidad a la deuda usuraria y cumple
puntillosamente con el FMI: se dispone a pagar con reservas monetarias. Para
mejorar la oferta a los acreedores y pagar la deuda en default, el gobierno
destinará el año próximo más de 6000 millones de dólares (casi la mitad del
presupuesto nacional). Este es el dinero que les falta a la educación y a la
salud populares; este es el capital que falta para reactivar seriamente la
economía, reindustrializar el país y generar el empleo que necesitan más de 4
millones de argentinos.
Las previsiones presupuestarias indican que el
gobierno pretende mantener congelado el salario de docentes y no docentes
durante todo el 2005. No estamos dispuestos a aceptarlo. Por ello Conadu
Histórica y la AGD-UBA han decidido mantener su plan de lucha y convocar a un
paro nacional con clases públicas de 24 horas para el próximo miércoles 25 de
agosto. Ese mismo día, a las 18 hs., la AGD junto con la FUBA realizará una
clase pública en Plaza Congreso.
* Por la triplicación del presupuesto universitario en el
presupuesto nacional para el 2005.
* Por el inmediato aumento salarial
transformando en remunerativas y bonificables todas las sumas que actualmente se
pagan en negro, incorporándolas al básico, manteniendo unificado nacionalmente
el salario docente.
* Por la incorporación al presupuesto del año 2005 las
partidas necesarias para restablecer la vigencia del nomenclador docente con la
media canasta familiar (actualmente $ 800) para el cargo testigo (Ayudante de
primera con dedicación semiexclusiva).
* Por la renta para todos los ad
honorem.
¡Basta de doble discurso!
¡Luchemos para poner fin al
salario en negro que nos perjudica previsionalmente y resta aportes a nuestra
Obra Social! ¡Y por la renta para todos los ad-honorem!
AGD-UBA