La reciente
turbulencia en los mercados emergentes ha llevado a algunos gestores de fondos
mutuos a sugerir inversiones en regiones tal vez aún más volátiles: los mercados
de "frontera".
A los que les gustan mercados como Zimbabue y
Kuwait dicen que estas economías están relativamente sanas y que, a largo plazo,
a medida que las compañías atienden a sus crecientes poblaciones, los
inversionistas se beneficiarán.
En comparación con los mercados emergentes, los
mercados de frontera ofrecen acciones con un mejor potencial de crecimiento,
menos deuda y valuaciones más atractivas, dice Laura Geritz, gestora de
portafolio del fondo Wasatch Frontier Emerging Small Countries. Debido a que
estos países dependen más del crecimiento del consumo interno que de las
exportaciones a economías industrializadas, también están menos correlacionados
con mercados desarrollados o emergentes, agrega. Cerca de dos tercios de los
recientes US$1.030 millones en activos en el fondo estaban en mercados de
frontera, como Ghana y Vietnam.
Estos países "son lo que eran mercados emergentes
como Brasil, Rusia, India y China hace entre 20 y 25 años", afirma Mark Mobius,
quien administra más de US$40.000 millones en activos de países en desarrollo en
Franklin Templeton Investments, de Franklin
Resources Inc. BEN +1.98%
Mobius cree que "fuentes internas de crecimiento"
han contribuido al desempeño de los mercados de frontera, y por esta razón
siguen siendo "las oportunidades de inversión más prometedoras para los
inversionistas de valores globales". Señala que algunas características que
impulsan su crecimiento incluyen "reformas y niveles relativamente bajos de
endeudamiento de consumidores y gobiernos". Aunque el nivel de deuda de los
consumidores ha crecido en algunos países con la introducción de préstamos
bancarios y el auge de las tarjetas de crédito, esto ha impulsado las ventas
minoristas, dice. Pero, añade, se espera que las valuaciones "se mantengan
favorables y que incluso mejoren".
El Índice de Mercados de Frontera de MSCI subió
3,8% en términos de dólares desde el inicio del año hasta febrero, comparado con
una caída de 3,6% en el Índice de Mercados Emergentes de MSCI.
De todos modos, invertir en estos países conlleva
altos riesgos. A principios de año, la Autoridad Reguladora de la Industria
Financiera de Estados Unidos (o Finra, por sus siglas en inglés), sumó los
fondos de frontera a la lista de productos que le preocupa en cuanto a prácticas
de marketing de corredores e idoneidad para los inversionistas.
"Los riesgos más altos asociados a la inversión
en mercados extranjeros o emergentes generalmente se magnifican en los mercados
de frontera", señaló Finra. El informe también advirtió sobre posibles problemas
de liquidez. "En muchos casos, estos mercados tienen relativamente pocas
compañías y oportunidades de inversión, y el mercado local de valores podría no
estar totalmente desarrollado", indicó Finra. "Esto podría significar menos
liquidez y menos protección al inversionista".
Sin embargo, algunos gestores creen que es el
momento adecuado para apostar a mercados de frontera, que representan un
porcentaje diminuto de los fondos mutuos. Un grupo de 16 fondos de inversión de
mercados de frontera y fondos que cotizan en bolsa (ETF, por sus siglas en
inglés) identificados por Morningstar Inc. MORN +0.91%tenían hace poco un
total de US$4.300 millones en activos, incluidos US$2.100 millones que
ingresaron en los 12 meses hasta enero. Dos de los tres fondos de frontera más
grandes, Wasatch Frontier Emerging Small Countries y ETF iShares MSCI Frontier
100, fueron lanzados recién en 2012.
Geritz y otros gestores creen que un portafolio
debería tener al menos un par de puntos porcentuales invertidos en economías de
frontera debido a su papel en el Producto Interno Bruto mundial.
Estos países representan 21,6% de la población
mundial, 6% de su PIB nominal y apenas 3,1% de la capitalización bursátil
global, según la CFA Institute Research Foundation.
Geritz favorece las empresas afiliadas a gigantes
multinacionales. La acción preferida de su fondo, con casi 4% de los activos, es
Nestlé NESN.VX +1.44%Nigeria PLC. Nestlé SA
es dueña indirecta de una participación en la compañía. Firmas como estas, dice,
"tienen fuertes plataformas de marcas, han estado en estos países por mucho
tiempo, tienen acceso a capital barato en mercados donde el capital usualmente
es muy caro, generan buenos flujos de capital y son empleadores preferidos en
esos mercados".
No obstante, incluso los más entusiastas
coinciden en que los límites de liquidez y otros riesgos hacen más difícil para
los inversionistas apostar a mercados de frontera. Un problema asociado con la
poca liquidez es que cuando el volumen de transacciones es bajo, los
inversionistas podrían tener problemas para encontrar un comprador cuando
decidan vender. Otro problema es que cuando un fondo grande quiere comprar o
vender una gran cantidad de acciones, el mercado para esas acciones puede ser
tan pequeño e insuficiente que termina pagando más, o recibiendo menos, de lo
que estimó.
"La liquidez es un gran problema", dice Mobius,
de Franklin Templeton. El gestor asevera que la volatilidad también es una
preocupación. "Tienes que estar al tanto del riesgo de volatilidad porque
tiendes a entrar en pánico si las cosas se complican", afirma.
Spencer Stewart, cogestor de portafolio del fondo
Grandeur Peak Emerging Markets Opportunities, que incluye países emergentes y de
frontera, advierte "que hay mucho bombo" sobre estos últimos. "Son emocionantes,
el PIB per cápita es diminuto y hay una creciente clase media", dice, pero
tienen sus retos, desde gobiernos incapaces hasta estructuras sociales dispares.
"En algún punto, los mercados de frontera podrían
convertirse en emergentes, pero hay apuestas inciertas", expresa. Como ejemplo
señala a Nigeria. "Podemos decir que hay una oportunidad enorme (…) (pero) qué
tan capaz es el gobierno y qué tan satisfechos estarán los civiles durante la
evolución son dos factores que a fin de cuentas decidirán el futuro del país".