NCeHu 548/09
Contra
la colonización de la educación
Carta
al rector de la Universidad de Chilecito para que no acepte fondos
mineros
(AW) Las
Asambleas Ciudadanas de La Rioja enviaron un escrito a las autoridades de la
casa de altos estudios para que rechace el dinero proveniente de minera Bajo La
Alumbrera, cuyo vicepresidente se encuentra procesado por la justicia acusado
del delito de contaminación ambiental.
La
Rioja 7 de agosto de 2009
(Agencia Walsh).
Al Rector de la Universidad
Nacional de
Chilecito
Sr.
Norberto Caminoa
S…………./………………D
Las
Asambleas Ciudadanas Riojanas se dirigen a Ud. y por su intermedio a los
miembros del Honorable Consejo Superior a fin de solicitarles el rechazo de los
fondos del Consorcio Yacimientos Mineros Aguas de Dionisio (YMAD) redistribuidos
por el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN). Al aceptarlos, utilizaría
beneficios económicos obtenidos por Alumbrera Ltd. en base a: la violación de
normativas vigentes, a la contaminación del ambiente, la enfermedad de personas
expuestas y al clientelismo empresarial generando una minero-dependencia en la
que serán cómplices las universidades, permitiendo que estas empresas impongan
condiciones en desmedro de la calidad académica y la autonomía
científica.
Ante
esta estrategia de “seducción”, algunas Universidades y la CONADU
HISTORICA han mantenido sus principios en alto, rechazando
los fondos de este tipo de empresas, que vienen a legitimar sus actividades,
colonizando también la educación. Entendemos que el resto de las Universidades
Nacionales, en especial la UNDeC, deberían actuar de modo similar a estos dignos
ejemplos. Lo que está en juego no es una fuente de recursos de la educación
pública, sino el sentido y el alcance de la educación y la investigación que
realizan las instituciones universitarias.
El
Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) no tuvo reparos a la hora recibir de
la minera los 36,8 millones de pesos, que se suman a los 50 millones de pesos
recibidos por los rectores de las universidades nacionales en 2008. Los fondos
que llegan a 40 universidades nacionales desde Minera Alumbrera condicionan la
necesaria independencia de las universidades cada vez que investigan y producen
dictámenes técnicos. La empresa que gerencia la mina ha sido acusada
internacionalmente por incumplir normas vigentes, violar derechos humanos, dañar
el ambiente y comprometer la existencia y funcionamiento de cuencas hídricas
vitales para ambientes semiáridos.
El
proyecto minero La Alumbrera consume el 25% de la energía eléctrica suministrada
a la Región del noroeste argentino (NOA) y el 87% del consumo total de energía
de la provincia de Catamarca; que genera un campo magnético de dimensiones tales
que provoca alto riesgos en niños de contraer leucemia y una lista innumerable
de efectos contaminantes que afectan la salud Además, insume
4 millones de litros de agua por hora, o sea 100 millones de litros de agua por
día, utilizando agua dulce que es, por cierto, muy escasa en regiones de
características semiáridas como la Provincia de Catamarca en la cual se
encuentra dicha explotación minera. De esta manera, las poblaciones circundantes
quedan limitadas en sus posibilidades de acceso a este derecho perjudicando, no
sólo por su escasez sino también debido a la contaminación, a la producción de
pequeños agricultores, afectando las cuencas hídricas de Vis Vis-Amanao y el
Sali Dulce que abarca a Catamarca, Tucumán, Santiago del Estero y Córdoba
generando un gran impacto socio-ambiental y económico.
Este
tipo de empresas extractivas son actores principales del modelo de saqueo
colonial que el capitalismo destina a los países de América Latina; y trae para
los pueblos de la región más dependencia y problemas sociales, además de
represión a quienes se oponen.
Ante
este genocidio silencioso, a lo largo de la Cordillera y de América Latina, se
han gestado innumerables asambleas populares conformando la Unión de Asambleas
Ciudadanas (UAC) entre las que se encuentran las Asambleas Ciudadanas de
Chilecito, Famatina, Sanagasta, Pituil, Chañarmuyo, la Costa y Capital y que
desde hace cuatro años vienen denunciando la connivencia de ciertos sectores
políticos, académicos, religiosos y sociales con el poder saqueador y
contamínante.
El
sistema universitario y científico debe jugar un papel aún más significativo
porque es uno de los pocos actores públicos que puede proveer los saberes
técnicos independientes. La universidad pública podría generar un servicio de
suma importancia no sólo a las localidades en disputa con las corporaciones
mineras sino a todo el país que necesita conocer qué decisiones toman nuestros
gobernantes en materia productiva cuando los bienes comunes están en juego.
Lamentablemente no ocurre con la minería y es de público conocimiento que muchas
instituciones universitarias están trabajando al servicio de las corporaciones,
en este caso, las grandes mineras. No es un secreto, estas relaciones se exponen
como grandes logros en materia de convenios, colaboraciones, extensiones.
Por una
Universidad Nacional que sea autónoma, pública, crítica, participativa y
emancipadora, que pelee por un mayor presupuesto, que no esté al servicio de
capitales e intereses privados, ni nacionales ni extranjeros, que defienda un
país soberano, el cuidado del ambiente y los derechos humanos, consecuente con
los reclamos de nuestros pueblos que resisten a la depredación de nuestra tierra
y al despojo de los bienes comunes.
Lo
saludan Atte.
ASAMBLEAS
CIUDADANAS RIOJANAS