ACTO CULTURAL
En
la Sala de la Biblioteca Infantil Popular “Teniente Coronel Marcelino Reyes”,
cedida gentilmente por su Directora, la Licenciada María Luisa Iribarren, dos
artistas del lugar, interpretaron canciones riojanas.

La
primera de ellas, fue el tango Caminito, que si bien lleva música de Juan de
Dios Filiberto, su letra fue escrita por Gabino Coria Peñaloza (descendiente del
caudillo federal Chacho Peñaloza). Coria Peñaloza
se refiere
a un
sendero que comunica al pueblo riojano de Olta
con Loma
Blanca, y a los sentimientos que
le inspirara un amor perdido, y no al Caminito del barrio porteño de la Boca,
donde no hay ni hubo cardos ni juncos en flor.
Caminito
Música:
Juan de Dios Filiberto
Letra: Gabino Coria Peñaloza
Caminito
que el tiempo ha borrado,
que juntos un día nos viste pasar,
he venido
por última vez,
he venido a contarte mi mal.
Caminito que entonces
estabas
bordado de trébol y juncos en flor,
una sombra ya pronto serás,
una sombra lo mismo que yo.
Desde que se fue
triste vivo yo,
caminito amigo,
yo también me voy.
Desde que se fue
nunca
más volvió.
Seguiré sus pasos...
Caminito, adiós.
Caminito que
todas las tardes
feliz recorría cantando mi amor,
no le digas, si vuelve
a pasar,
que mi llanto tu suelo regó.
Caminito cubierto de cardos,
la mano del tiempo tu huella borró...
Yo a tu lado quisiera caer
y
que el tiempo nos mate a los dos.

Luego cantaron cuecas riojanas…

Y explicaron al público, el origen de la Chaya Riojana…
La Chaya es la fiesta ancestral por antonomasia de
la provincia de La
Rioja, "La fiesta
de los tres días", una gran fiesta de
amistad y de alegría, de compartir y dejar a un lado todas las penas. FESTEJO
BARRIAL EN DIA DE CARNAVAL
Cuenta la historia que los
primeros españoles llegados a estas
tierras se encontraron con una fiesta singular de agua y danza que celebraban
los diaguitas festejando la finalización de las cosechas, aunque en La Rioja de
hoy esté muy ligada al Carnaval de febrero. Es entonces cuando se realiza el
Festival Nacional de la Chaya, además de las típicos topamientos (acercamiento
festivo) por los barrios, con agua, harina, albahaca, vino y vidalas para
refrescar la amistad de todos.
UNA LEYENDA PARA CONOCER:
"La niña Chaya y el Príncipe Pujllay"
En la memoria de los naturales ha quedado
grabada la historia de una niña india: "Chaya", muy hermosa, que un día dolida
de tristeza por su amor
imposible hacia el joven príncipe de
la
tribu "Pujllay", desapareció en la alta
montaña, convirtiéndose en nube.
De allí la tradición popular rescató
ambos vocablos:
Chaya o "Agua de Rocío" es símbolo de la perenne
espera de la nube y la búsqueda ancestral del agua (elemento vital muy caro al
sentir riojano).
Pujllay, voz cacana que significa "jugar, alegrarse"
personaliza a un héroe ridículo, que enamorado de la bella Chaya y desilusionado
por no poder concretar su amor debido a la oposición de la tribu, se dedica a la
borrachera hasta que un día muere quemado en el fogón de la fiesta. Esta es tal
vez la tragedia riojana de sabor griego que aparece en las actuales fiestas
chayeras, con la "Quema del "Pujllay" y su "Entierro" al finalizar el carnaval
de febrero.

Para finalizar, se hizo un brindis de bienvenida con vino y
empanadas riojanos…