ENFOQUES ESPACIALES Y SOCIOLÓGICOS
EN LOS PROCESOS DE URBANIZACIÓN DE LOS BARRIOS
CERRADOS:
LOS CASOS DE BUENOS
AIRES, BOGOTA Y MÉXICO D.F.
Cintia
Ariana Barenboim

Los acelerados cambios a nivel mundial, así como los producidos en
el propio contexto local, han llevado al replanteo de la relación entre
sociedad, economía y espacio, generando tanto la especialización del espacio
urbano como una intensificación de la fragmentación y segregación socio
territorial.
Para Borsdorf (2003) la fragmentación urbana es una nueva forma
de separación de funciones y elementos socio – espaciales, ya no en una
dimensión grande (ciudad rica – ciudad pobre, zona habitacional – zona
industrial), sino en una pequeña. Elementos económicos y barrios habitacionales
se dispersan y mezclan en espacios pequeños: urbanizaciones de lujo se localizan
en barrios muy pobres; centros de comercios se emplazan en todas partes de la
ciudad; barrios marginales entran en los sectores de la clase
alta.
Asimismo, la ruptura de la estructura espacial tradicional de la
ciudad latinoamericana, compacta y con un centro único, y su reemplazo por una
organización espacial difusa y policéntrica ha sido acompañada por el
surgimiento de nuevos “artefactos” urbanos. Entre estos se destacan: grandes
centros comerciales en la periferia ligados a las grandes avenidas o carreteras
urbanas; parques tecnológicos o logísticos periféricos que concentran empresas y
barrios cerrados para residencia o recreación de los grupos de mayores ingresos.
Estos conjuntos urbanísticos de producción, consumo, residencia y recreación se
interconectan por vías, usualmente congestionadas, sin la continuidad espacial
que presentaba la ciudad compacta predominante hasta fines de la segunda mitad
del Siglo XX (Janoschka, 2002).
La
reestructuración espacial ha tenido impactos significativos y duales.
Por
una parte, cuenta con una buena dotación de infraestructura y servicios, donde
se ubica la población de mayores ingresos, y por otra parte, generalmente la
mayoritaria, con menores servicios, alejada de los centros de empleo, con
problemas ambientales y de inseguridad donde se concentran los hogares de bajos
ingresos.
Los barrios, conjuntos o unidades residenciales o
condominios cerrados, son propuestas que han surgido como respuestas de la
sociedad a toda esta serie de cambios ocurridos durante la década del noventa.
El presente trabajo de investigación invita a una
reflexión, integrando enfoques espaciales y
sociológicos, partiendo desde
los conceptos acuñados por Pierre Bourdieu (1999), acerca del capital económico,
social, cultural y simbólico, de estas nuevas formas residenciales en las
ciudades de Bogotá, Buenos Aires y México D.F. Se estudiaron sus características
constitutivas y formas de comercialización de los distintos barrios cerrados.
Finalmente, se compararon las diversas situaciones de dichas urbes.
Las
ciudades analizadas son grandes capitales en el contexto latinoamericano, pero
ninguna es totalmente rica o pobre: cada una esconde el choque social entre
ambos extremos.
En
países como Colombia y México, la violencia y la inseguridad pasaron a ser los
principales motivos de miedo y preocupación, desplazando a temas como el empleo,
la vivienda, la salud y la educación. Una suerte de psicosis colectiva se
apoderó de la población. Inseguros, los ciudadanos comenzaron a "privatizar" la
violencia buscando formas de autodefensa. Se dio así un auge de las empresas
privadas de seguridad. Paralelamente surgió una visible arquitectura del miedo
amurallado en las ciudades.
Zonas
residenciales de estas ciudades, han sido convertidas en "archipiélagos de
seguridad", "bunkers de los felices", asentamientos-dormitorio tipo fortaleza
con casas enrejadas y provistas de cuatro cerraduras, custodiadas por hombres
armados y perros amaestrados, en barrios sellados al exterior por casetas de
vigilancia, retenes y barreras levadizas, a lo que se suma el control de
documentos de peatones y vehículos. Estos "barrios-fortaleza" están poblados por
una nueva generación de "colonos", que para defenderse de los "bárbaros" de
afuera (pandillas, bandas, mafias, etc.) se han transformado en verdaderos
"prisioneros voluntarios". Los ciudadanos empezaron a desconfiar los unos de los
otros. Se cerraron calles y barrios, impidiendo el libre tránsito.
En el caso de Bogotá, la existencia de estos cerramientos no
implica solo un caso de aislamiento social, ni siquiera urbano, dado que sus
habitantes realizan casi todas sus actividades en los mismos sitios y de la
misma manera que quienes viven en espacios abiertos; sino que aluden a la
seguridad, abarcando desde los estratos socio-económicos más bajos hasta los más
altos. Allí, los procesos de fragmentación y segregación social aún se
encuentran en un estado muy incipiente, comparados con los de grandes ciudades
como Buenos Aires, en donde puede considerarse que se ha llegado a un estado más
crítico.
A
pesar de ello, y de otras causas de tipo económico y social, es posible que los
clubes y los conjuntos campestres que hoy son considerados como lugares de
segundas residencias o simplemente de recreación, lleguen posteriormente a
implementar las tipologías que hoy se observan en estos countries
o barrios cerrados de Buenos Aires.
Por su parte, el gran Buenos Aires es donde se han hecho más
visibles dichas muestras de segregación espacial, contando para ello con una
amplia diversidad de ofertas que buscan, básicamente, dar la oportunidad a las
personas de clases alta y media-alta a salir de una ciudad caótica, peligrosa,
congestionada y contaminada, entre otras cosas, para vivir en un lugar
tranquilo, seguro, limpio, en donde se les asegura, además, la oportunidad de
practicar deportes al aire libre, ir a colegios de alto nivel y llevar un nivel
de vida acorde, gozando de diversos privilegios y de una gran exclusividad en
todo. Es por eso que en este caso se hace más evidente la importancia del
capital simbólico, ya que es uno de los objetivos que se espera alcanzar al
vivir en un sitio distintivo. Sin embargo, dichas personas deben contar primero
con el capital económico y en algunos casos capital social y cultural que les
facilite la aceptación en esta nueva sociedad.
En general, con respeto a los conceptos de Bourdieu observamos que
en los tres casos estudiados se hace referencia al capital económico dado
que estamos hablando de elegir donde vivir, y el dinero, es un elemento
fundamental y decisivo al momento de escoger un barrio y adquirir allí una
vivienda.
El capital social, conectado a los recursos vinculados a la
red de relaciones sociales, se evidencia más en la ciudad de Buenos Aires que en
los otros casos, a través de la amistad que se forman con los vecinos del barrio
cerrado, la participación en las actividades deportivas y sociales de toda la
familia. Esto es debido a las
particularidades que ocurren en esta ciudad en cuanto a las tipologías de los
barrios cerrados, en los que las buenas relaciones interpersonales con los otros
habitantes del barrio son casi un requisito para permanecer en él.
Por
último, el capital simbólico, como el prestigio de vivir en un
determinado lugar y al reconocimiento
por parte de los demás de un poder a ese valor, se da en todo los casos
estudiados. Sin embargo, es mucho más notorio y valioso en Buenos Aires, en
donde entran en juego cuestiones como el arquitecto que construye la casa, el
lugar donde se encuentra ubicada y otros servicios con los que cuenta aparte de
vigilancia, escuelas, deportes, etc. Estas características
determinan la gran exclusividad que representa
vivir en un barrio cerrado.
La elección de ¿Dónde vivir? obedece a los patrones de
fragmentación de la ciudad que produce espacios bien definidos con
características propias, ya no solo de localización, infraestructura,
equipamientos o calidad de la vivienda, sino también a una serie de códigos y
valores que se aceptan y se obtienen implícita (y a veces explícitamente) al ser
parte de una clase determinada de la sociedad. Es así como se evidencia al
capital simbólico, como el prestigio de vivir en un determinado lugar y al
reconocimiento por parte de los demás de un poder a ese
valor.
BIBLIOGRAFÍA
§
Janoschka,
Michael, (2002) “El Nuevo modelo de la ciudad latinoamericana: fragmentación y
privatización” Revista EURE 28 (85): 11-29